Prólogo

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Soy Melissa Potter y soy hermana gemela de un chico bajito, cabello negro azabache, con lentes, ojos verdes y con una cicatriz en forma de rayo, siempre me ha parecido muy interesante, su nombre es Harry Potter. Él siempre se ha preocupado por mi y siempre me ha cuidado, es un gran hermano, supongo que empezó a tener miedo a perderme desde qué pasó lo de nuestros padres.

¿Se puede vivir tantos años siendo la mancha que sobra en una casa? Sí, así fue mi vida, así crecí. Una vida monótona donde lo más entretenido de mi día era un día solo con mi hermano.

Harry y yo somos muy unidos, técnicamente solo nos tenemos el uno al otro, nos apoyamos en todo, somos el mejor equipo que existe. Lo quiero muchísimo.

Mi vida cambió notablemente el día en el que aquel hombre gigante llegó a nuestras vidas, desde que conocí a aquel rubio con ojos grises. Desde que me perdí en su tono de voz, su piel pálida, sonrisa blanca y comentarios sarcásticos o arrogantes.

¿Siempre fuiste tú, Draco Malfoy?

Nota de autora: Es la primera historia que escribo, la verdad es que quería hacerlo desde hace un mes y pues aquí estoy, me quiero mantener en anonimato por ahora, así que mi firma será sólo mi inicial, espero que les guste mi historia a medida que avance, quiero aclarar que empieza la historia desde pequeños, hay datos, personajes o hechos que son inventados por mi, no están en el libro o en la película. Con es aclarado pueden seguir, un beso en la frente para todxs. <3

-B 💚

¿Siempre fuiste tú? 💚 [en proceso] |Draco Malfoy|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora