❝Capitulo 24❞

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Si no estas dispuesto a luchar por lo que quieres, entonces no lo mereces.

Habían pasado mas de 3 meses desde aquella tarde, Minho y yo seguimos viéndonos de vez en cuando, quizá dos veces por semana, cuando salía temprano del hospital, en mi día libre, o solo esperaba por las noches fuera de mi departamento hasta que llegara, tras una noche atareada en el hospital, ahí estaba él esperando con un café seguramente ya frío y una rosa, o algún tipo de regalo que en otro tiempo me hubiera enloquecido.

Ahora solo me parece decepcionante.

Quiero mas, algo que ponga mi mundo de cabeza, no solo rosas que eventualmente marchitaran.

Suspire cambiando mi uniforme por mi ropa de vestir.

—Me voy a casa. —Dije apenas pase por la recepción viendo a las enfermeras.

—Descanse Doctor Han. —Respondieron al unísono.

Espere apenas unos minutos cuando mi Uber llego.

—¿Han Jisung? —Pregunto el conductor bajando la ventana.

Asentí en silencio, tras revisar las placas subí al coche.

—¿Algún camino de preferencia o solo sigo el GPS? —Pregunto manteniendo una sonrisa en su rostro.

—Siga el GPS. —Susurre sintiendo el cansancio en mi cuerpo, apoyando mi cabeza en la ventana.

—Señor, disculpe, señor. —Escuchaba vagamente, mientras sentía un leve toque en mi hombro.

—¿Mmm? —respondí sintiéndome somnoliento.

—Llegamos. —Dijo con una gran sonrisa.

—Oh por dios, me quede dormido, lo siento. —Me disculpe viendo el edificio de mi casa.

—No hay problema, son 15 dólares.

Pague lo acordado y baje del coche.

Espere el ascensor apenas unos segundos, cuando este se abrió, entre y presione el piso de mi departamento.

Apenas baje del ascensor pude ver a Minho aun con su uniforme de policía puesto, un par de cafés y un caja de donas, dormido en la entrada de mi departamento, tal cual vagabundo, tirado en el piso.

Sonreí mientras avanzaba hacia él. —¿Minho? —Le llame, apenas y sintió mi mano tocar su hombro la tomo.

—Llegaste. —Susurró entrelazando nuestras manos.

—¿Qué haces dormido aquí? —Pregunte mientras le ayudaba a ponerse de pie.

—Te esperaba. —Sonrió queriendo besar mis labios.

—Lo siento. —Moví mi cabeza, escapando del beso. —No me he lavado los dientes. —Respondí apenado.

—Esta bien, traje donas y café. —Apunto a ambas cosas en el suelo, mientras las recogía.

—Estoy cansado Minho. —Susurre apenas abrí la puerta.

—Entiendo... Descansa entonces. —Aparto la mirada disponiéndose a irse.

—¿Podemos comer las donas por la mañana? —Pregunte apenado tras evitar esto tantas veces.

—¿Tu me estas invitando a pasar la noche? —Cambio la expresión en su rostro a una gran sonrisa.

—Si, no quiero que estes dormido en el pasillo. —Pude ver como cambio la expresión en su rostro de un momento a otro, tras escucharme decir eso.

—Vamos a dormir, estoy cansado. —Hable mientras cerraba la puerta, y apagaba las luces.

Tome la mano de Minho, mientras sentía mi respiración acelerarse, camine con él tomados de la mano, hasta la cama, dejándonos caer en ella, un encima del otro.

—Te amo Jisung. —Susurro en mi oído dejando un casto beso en mis labios.

Me quede en silencio, sin saber que decir

¿Esto es real? Me debatí, repitiéndome sus palabras.

Sonreí, regresando el beso en uno mas apasionado, dejando un pequeña mordida al final.

Las frías manos de Minho se pasearon por toda mi espalda, haciéndome sentir escalofríos.

Mientras desabrochaba mi camisa, sentía mi respiración acelerarse aun más.

—Tengo miedo Minho. —Susurre mientras me sostenía con sus brazos en un fuerte abrazo, tras quitarme la camisa.

—Lo pude notar. —Respondió besando mi frente.

—Tengo miedo a que se repita otra vez, y ya no poder dejarte ir nunca mas. —Hable con sinceridad. —También tengo enojo, solo de pensar que hiciste esto con Felix, me enoja tanto, que simplemente me quitan las ganas.

—Entiendo, perdón. —asintió haciendo mas fuerte el abrazo, mientras me acurrucaba en su cuerpo.

—¿Por qué lo hiciste? —Pregunte agrazándome a su cuerpo.

—Por deseó supongo. —Negó acariciando mi cuerpo. —Perdón.

—¿Como fue? —Hable aferrandome mas a su cuerpo.

—¿Qué? —Respondió casi al instante. —¿Por qué me preguntas eso?

—Quiero saber, como fue. —Sonreí mordiendo mi labio inferior, viéndolo a los ojos. —Dímelo todo.

—No Jisung. —Minho negó levantándose de la cama. —No te torturare de esta forma. —Respondió caminando a la salida.

—Si no me dices se acaba esto. —hable fuerte, cubriendo mi cuerpo con la sábana. —Entiende que debo saberlo.

—No Jisung, no tienes que saberlo.

—¡Pero quiero! —conteste alzando la voz. —Quiero saber Minho, solo quiero saber... Yo me muero por saber, pase años imaginando todo, pero quiero la verdad... de ti, no lo que imagine.

—Fue bueno, fue bien, fue feliz, fue excitante, pero solo al principio, antes de darme cuenta que solo era placer y no amor, hasta que me di cuenta que no era bueno, porque no era contigo.

—¿Y Felix? ¿Como fue para él? —Pregunte aferrandome a mis piernas.

—Supongo que peor de lo que fue para ti, después de todo estaba con alguien que no lo amaba. —Minho suspiro y agacho la cabeza.

—¿Y no lo amabas?

—¡Ya basta Jisung!.. deja de preguntarme esto. —Pidió aun con la mirada en el piso.

—¿El sexo como era? —Pregunte sintiendo mi cuerpo estremecerse. —Contéstame.

—Era increíble. —Susurro. —Felix en el sexo es increíble, pero nunca hicimos el amor.

—Entiendo. —Asentí levantándome de la cama, caminando lentamente hacia Minho.

Desanudándolo con la mirada, tire la sabana que cubría mi cuerpo semidesnudo, dejando mi torso al descubierto, termine de desnudarme mientras avanzaba hacia él.

—Debo decirte que el sexo conmigo ahora será mucho mejor. —Susurre en su oído, mordiendo la oreja, tomando su mano llevándola a mi trasero. —Tengamos sexo Minho.

➜᎒minsungpapas

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Tu novio te engaña ➸ Minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora