Un día por la noche Jisung recibió un mensaje donde le advertían la infidelidad de Minho.
Mensaje que desataría un caos en su vida.
➯Adaptación autorizada
Créditos a @MerakiRame
➯Se prohíbe cualquier tipo de comentario ofensivo.
❥ Portada y...
El sonido de mi celular sonar indicando la llegada de un mensaje, hizo que me despertara.
Rodé en la cama intentando averiguar dónde estaba, aun con los ojos entrecerrados.
El aroma a medicina era muy evidente, abrí los ojos poco a poco, intentando acostumbrarme a la poca luz que había, tome mi celular, abriendo aquel mensaje de un número desconocido.
Numero desconocido: Soy Felix, ¿Podemos hablar? 10:35AM
—Dios no. —Susurre al leer aquel mensaje.
Tome un largo suspiro luego de empezar a escribir una respuesta.
—Si quizá ya sea hora. —Hable antes de enviar aquel mensaje.
Estoy en el hospital. 10:43 AM
Me sentía nervioso, intranquilo, los minutos pasaban y con cada uno de ellos pasando me sentía mas nervioso.
Me dirigí al baño, abriendo la llave del lavabo, deje el agua correr un poco, mientras miraba mi rostro en el espejo, me miraba un poco cansado, con grandes ojeras.
Tome un poco de agua entre mis manos llevándola a mi rostro, mojándolo un poco.
—Solo hablaremos. —Me dije a mi mismo, observándome en el espejo, intentando calmarme. —Eres hermoso, eres grandioso, eres Han Jisung. —Explique viéndome en el espejo, con una sonrisa. —Estoy listo para esto.
Camine de regreso a la cama, presione un botón de ayuda, esperando apenas unos minutos cuando una enfermera llego.
—¿Paso algo Doctor Jisung? —Pregunto la enfermera apenas entro a la habitación.
—Quisiera un suero y pastillas para el dolor de cabeza. —Pedí mientras me recostaba.
La enfermera asistió con una sonrisa y salió de la habitación, minutos mas tarde ella ingreso con lo que pedí.
Ella se acerco colocando el suero, en el porta suero, mientras preparaba la intravenosa la detuve.
—Yo lo hago. —Respondí, aceptando la aguja.
A decir verdad, me seguía asustando las agujas.
Abrí y cerré mi mano un par de veces, respire profundo antes de insertar la aguja en mi vena.
Pronto empecé a sentirme mejor.
Los minutos pasaron rápido cuando Felix ingreso por ese puerta, con un rostro totalmente distinto a lo que recordaba.
—Hola. —Saludo con voz baja.
—Hola. —Respondí, acomodándome en la cama, para verle mejor.
—Quería disculparme. —Susurro con la vista baja. —Por todo... — Felix guardaba silencio observando el piso, mientras jugaba con sus manos. —Extraño tener un amigo, todos se alejaron de mi. —Hablo mientras sorbía su nariz, parecía estar llorando.
Entonces me tome el tiempo para observarlo mejor, vestía ropas holgadas, su cabello estaba despeinado y sus hombros decaídos.
—No es tan fácil. —Respondí mientras me ponía de pie.
—Estoy yendo al psicólogo, la psicóloga dijo que necesitaba avanzar. —Explicó levantando la mirada. —Para eso necesito arreglar las cosas contigo. —Sonrió aun jugando con sus manos, demostrando nerviosismo.
—¿Puedes decirme algo? —Pregunte, tomando sus manos, Felix asintió en silencio mientras nuestras miradas se encontraban. —¿Lo planeaste?
—¿Qué? —Pregunto levantando una ceja.
—¿Planeaste lastimarme, o solo sucedió? —Pregunte aun sosteniendo su mano.
—Quizá las dos, solo sucedió la primera vez, luego quería a Minho, él no quería dejarte... —Explicó alejando sus manos de las mías. —Entonces si, planee herirte.
Mordí mi labio inferior tratando de mantener una sonrisa.
—¿Lo amabas? —Pregunté sentándome en el sofá, indicando a Felix que hiciera lo mismo.
—Si. —Aceptó.
—Cuando Minho me dejo, dijo que te amaba. —Confesé, recordando aquella vez en el motel, donde me dejo.
—Prefiero un engaño por amor, y no uno por pasión, ¿Recuerdas? —Preguntó Felix viéndome a los ojos, hice un gesto intentando comprender sus palabras. —Siempre lo decías. —Continuo al no recibir una respuesta de mi parte. —No querías ser engañado, solo porque se dio la oportunidad, si no porque había amor, creo que Minho intentaba creer que fue por amor, por ti.
—Que mala persona es Minho. —Intente bromear, viendo el rostro decaído de Felix.
Pero no todo era mentira, quizás en el fondo yo si pensaba que Minho no era tan buena persona.
—Creo que a todos les gustan los chicos malos. —Sonrió Felix.
—Aquella vez te escuche. —Confesé. —"No vuelvas a perder a Jisung".
—No debiste. —Sonrió, aun manteniendo su mirada perdida.
—Por primera vez en muchos años sentí que escuche a Lixie mi amigo.
—¿Significa que me perdonas? —Pregunto levantando su cabeza, conectando nuestras miradas.
—Lo intentare. —Respondí.
—¿Podremos llegar a ser como antes? —Pregunto mientras se ponía de pie.
—No creo. —Sonreí, viendo la puerta abrirse.
Minho ingreso sosteniendo una pequeña bolsa.
—Me voy. —Susurró Felix, sin hacer contacto visual con Minho.
—Quizá mejores amigo no. —Hable antes de que Felix saliera. —¿Te parece ser viejos conocidos? —Pregunté, viendo a Minho acercarse a mi, con cara de interrogación.
—Eso esta bien. —Susurró.
—También intente lastimarte Felix, en el cine aquella vez. —Minho tomo mi mano, sin dejar de pregúntame con la mirada que pasaba. —Perdón también.
Felix salió de la habitación luego de soltar un suspiro, dejando una pequeña caja en la pequeña mesita de la salida.
—¿Lo perdonaste? —Indagó Minho viéndome directo a mis ojos.
—Lo hice contigo, que diferencia a Felix, ¿que te sorprende que lo perdonara?. —Pregunte quitando la pequeña bolsa de comida entre sus manos.
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