31. El baile de graduación

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Era el día del baile de la graduación y estaba de los nervios, pero también estaba feliz de haber podido terminar esta pesadilla de curso y poder disfrutar del verano que estaba llegando.

Durante esos últimos días, Sahara y yo estuvimos estudiando juntas en las asignaturas que teníamos en común. Hasta le llegué a contar qué pasó después de que nos fuéramos de la fiesta de cumpleaños de Logan que se hizo en la casa de Adler. Sahara quedó sorprendida pero tampoco tanto como me lo esperaba, ya que ella me dijo que estaba esperando a que llegara ese momento y que lo estaba viendo venir.

Estaba en casa, con Clarise a un lado mío y Sahara al otro, colocándome el vestido y quitando los alfileres que había dejado Clarise después de arreglarlo porque me quedaba un poco flojo.

—Abby...¿de qué color quieres los labios?—me preguntó Sahara acercándose al neceser que tenía enfrente del espejo.

—Póntelos rojos que te quedan muy bien.—y asentí viendo a Clarise.

—Opino lo mismo.—murmuró Sahara pocos segundos después, revolviendo el neceser buscando el labial rojo.

Después de que yo estuviera lista, le ayudamos a Sahara. Ella parecía que estaba más nerviosa que yo y pude ver que también estaba emocionada al ver sus ojos cristalizados.

En un momento que Clarise ya se fue a junta de Logan para preguntar si necesitaba ayuda, noté como Sahara quería decirme algo pero no era capaz.

—¿Qué pasa?—y ella alzó la cabeza hacia mí.

—Mmm...¿cómo te lo dijo?...

Alcé una ceja sin entender a lo que se refería.

—Al grano, Sahara.

—Pues...es que no sé como te lo vas a tomar.

—Sahara, dímelo ya de una vez.—y ella asintió.

—Estoy embarazada.

Me quedé en shock al escucharla. No me lo podía creer después de saber que ella era imposible que pudiera tener hijos después de todo lo que ocurrió con su ex. Sahara al ver que no le contestaba, empezó a sollozar.

—Ey...no pasa nada.—y la abracé—. ¡Felicidades, futura madre!

—Gracias...pensaba que estarías enfadada conmigo.

—¡Claro que no! Me alegro por ello.

—No sabes lo feliz que me puse al saber que estaba embarazada. Nunca pensé que pudiera llegar a quedar embarazada después de lo que me dijeron los médicos.

—Siempre te dije que podía haber una posibilidad de que pudieras quedar.—y ella sonrió, secándose las lágrimas—. Si, va a ser mejor que pares de llorar porque si no el maquillaje se va a ir a la mierda.

Nos reímos juntas y cuando Sahara estaba lista para irnos, bajamos al piso de abajo y vimos a Adler y Logan, viéndonos fijamente sin quitarnos los ojos de encima. Logan parecía que me estaba desnudando con la mirada y eso aún me ponía más nerviosa.

—Estás preciosa.—y yo me sonrojé, abrazándolo.

—Tú tampoco estás mal.

—Si estuviéramos solos, no te dejaría salir hasta que te hiciera el amor.—susurró en mi oído, haciendo que me sonrojara más de lo que ya estaba.

—Sh...que te van a escuchar.

—Ya me da igual. ¿Qué sucede? ¿No puedo decirle a mi novia las ganas que tengo de hacerle el amor?—y me sorprendí al escucharle decir "mi novia".

Mi pesadilla favoritaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora