Habían pasado varios meses desde que el pasado había cambiado un poco. Desde que los gemelos interfirieron.
Marinette estaba limpiando su casa cuando escuchó unos golpes a la puerta, dejó de lado el mandil rosado que llevaba.
-Agh seguramente Adrien se olvidó de las llaves otra vez- se dirigió a la puerta y la abrió, ahí vió a su padre con unas maletas.
-Hija mía, ¿no hay abrazo para tu padre que se fue de viaje?- la ojiazul se cubrió la boca, la Marinette del pasado había logrado protegerlo y ahora lo tenía enfrente. No esperó mucho tiempo y lo abrazó con fuerza, sus lágrimas corrían por sus mejillas no eran de tristeza simplemente era de felicidad, una grande felicidad.
-Papá te extrañe no sabes cuanto- dice sin soltarlo.
-Yo también pequeña y eso que fueron solo unos días- ríe.
-Fue una eternidad para mí papá...Mientras tanto, días después en el pasado...
-Chat noir, ¿qué hacemos aquí?- dijo la azabache con una sonrisa- No veo nada.
-¿Para que quieres ver princesa? Yo te estoy llevando o es que acaso no confías en mí como yo en ti ciegamente.
-Sabes que sí pero es algo incómodo sobre todo si hay gente- ríe- ¿Ya mero llegamos a donde quieres ir?
-Faltan unos kilómetros- bromea.
-¿Qué?- intenta levantarse la venda pero el chico la detiene con sus garras- No hagas eso- aleja su mano consiguiendo rascuñar a Chat en la mejilla.
-Auch- se queja.
-¿Qué pasó?- pregunta preocupada.
-Nada, sigamos- dice y la carga de sorpresa- Perdón vamos más rápido así.
-¡Es lo que te dije al principio!- grita medio enojada la ojiazul.Cuando corren por la ciudad, Chat salta con su bastón cuidadosamente. Cuando llegan a su destino Marinette logra escuchar olas, el olor a mar y sentir el agradable viento que estaba presente.
-¿Que pasa mi gatito?-
-Esperame princesa- se acerca y le quita la venda- Listo, ya puedes ver.
-Wow esto esta muy bonito, pero ¿por qué me haz traído aquí?- sorprendida.
-Marinette me he dado cuenta de que me enamoré enserio de tí- ella lo mira- Te quiero...
-Y yo a tí Chat- sonríe- pero ¿qué te pasó en la mejilla?
-Nada solo que siempre me haces daño con estas uñas- toma ambas manos y las besa.
-Perdóname gatito- lo intenta agarrar pero él la detiene.
-No es nada princesa- la abraza- solo disfrutemos el momento e ignoremos eso.
Los dos comieron de la comida que Chat le preparó con ayuda de Alya y su mamá.
-Muchas gracias todo estuvo delicioso- sonríe.
-No es nada, lo mejor para mi princesa
Marinette se levanta y se queda viendo el mar enmedio de la noche, la vista era preciosa ya que era iluminada por la luna. Chat noir la abrazó por detrás, ambos estaban en silencio mirando el mar, el chico gira a su novia lentamente quedando los dos de frente, el toma su rostro entre ambas manos y la besa. Ella tarda un poco luego le corresponde poniendo sus manos a su alrededor.
Luego de unos cuantos segundos, se separan y se miran.
-Te amo Marinette-
-Yo también te amo Chat noir-
Ambos vuelven a unir sus labios este si era con amor, nada comparado como el primero que tuvieron.
-Marinette-
-¿Si?-
-Es hora que sepas quien soy- ella se aleja un poco- No puedes tener una relación solamente con el superhéroe, también tienes derecho a conocer mi verdadera identidad.
-Pero...- se vió interrumpida por las palabras de destransformación de su novio. Dejando a la vista a su antiguo ex crush.- ¿Adrien?
-Espero no decepcionarte mi princesa- comentó algo nervioso.
-Claro que no tontito- ella sonríe y dice las palabras en la cual se transforma en ladybug- Estabamos destinados, ¿no?
-Así que eras tú- Él sonríe- Pero a decir verdad prefiero a mi princesa Marinette.
-Y yo a mi gatito bromista- responde, luego se convierten como eran anteriormente.
Quedando así Chat noir y Marinette.
-Me alegro que sean la misma persona pero me gusta muchísimo Marinette. Por que a su lado siento que puedo protegerla, por otro lado con ladybug es como si ella me protegiera.
-Siempre dejaré que me protegas- sonríe- Y a mi me gustan los dos tú- acaricia su cabello.
-¿Te casarias conmigo?- pregunta el felino.
-¿Qué te sucede apenas somos jóvenes- lo acorretea y se le atora los zapatos en la arena por suerte antes de caer Chat logra atraparla.
-Ten cuidado a menos que quieras darte un baño-
-¿Qué?El corre y se tiran en la playa, por suerte era verano y el agua estaba tibia.
-¡Chat!- intenta salir pero el la agarra fuerte y la vuelve a besar. Después de un rato salen.
-Oye, ¿me compraras un hámster?- la azabache lo mira a ver de forma confusa.
-Se supone que tu debes comprarmelo gatito- le acaricia su cabello- aunque quizás te lo comas antes de que llegue a mí.
-¡Oye! Yo no como animales pero con respecto a personas contigo podría hacer una excepción- la cachetada resuena- ¡Oye! Se supone que los gatos comen ratones y una vez usaste el Miraculous del ratón por eso lo decía- se soba la mejilla.
-Ah es cierto- le jala de la oreja- Aún así sonó muy grosero minino.
-Auh- intenta quitar su mano- My lady no lo vuelvo hacer, no lo vuelvo hacer.
-Más te vale- se quita el zapato- Aún falta tu otro castigo.Chat comienza a correr en cuatro patas sobre la arena y Marinette lo perseguía con un zapato.
¿Fin?
No este no es el final, es el inicio de una gran historia...🌻
SEMANA MARICHAT
05/06/21