Zack

70 11 3
                                    

-¿Eso fue lo que dijo?- preguntaba un rubio con preocupación. 

-¿Acaso te mentiría?- dijo Zack con toda calma. Jack en cambio aún seguía dudoso de lo que su amigo estaba diciendo, es cierto, ya llevaban tiempo siendo amigos pero algunas de sus actitudes lo sacaban de quicio... estaba desconfiando de él en esos momentos, Anne jamás se atrevería a decir un rumor acerca de él, y mucho menos él.

Ya hacía un rato que Jack estaba viendo a su amiga con otro tipo de visión, la amistad máxima estaba al límite, la confianza y la lealtad eran firmes y su corazón dudaba de su... ¿acaso era amor?, parecía que sí. Las veces en que ella le daba una sonrisa, le tocaba el hombro o le miraba directamente hacían en su interior gritar de alegría y nerviosismo, y lo mejor de todo era que ambos estaban a gusto, uno junto al otro, pero dudaba de si ella también sentía lo mismo. Por eso no se atrevía a confesarse, y el único que lo sabía era su amigo Zack.

-Estoy seguro que no dijo eso, conozco a Anne, es mi amiga, confío en ella-

-Bueno, no te alarmes cuando el rumor se esparza-

-Me estás poniendo de mal humor, ¿no habrás sido tú?-

-¿Dudas de tu amigo?, he estado con ustedes por mucho tiempo, por eso se me hizo raro que ella dijera eso con las demás chicas- 

-Entonces le preguntaré- dijo con firmeza denotando un poco de molesta del chico, esto hizo sonreír a Zack con satisfacción, al parecer su plan de destruir la amistad de ambos estaba siendo llevada del modo correcto, si nadie podía entenderlo de verdad por más esfuerzo que hiciera, ni ellos ni su familia la pasarían bien. Zack estaba harto de ser el chico "sombra", ¿a qué me refiero con esto?, a ser de ese tipo de persona que han sido discriminadas a su corta edad, su apariencia delgada, sus pecas en su piel y su aspecto decaído le traían burlas y era el imán favorito de los bullies, sumando la nula apreciación de sus padres, comparándolo con su hermano Sebastán , sintiéndose poco, Zack comprendió que el mundo era cruel y que debía pagar todo el sufrimiento que le causo. 

>>Todos pagarán<<

Zack comenzó a recordar uno de tantos momentos sobre su relación familiar y lo mucho que Anne y Jack se parecían a sus despreciables padres, según sus palabras.

-¿Terminaste tus deberes?- decía su madre con enfado.

-Lo hice hace una hora- respondió tímidamente el pelirrojo.

-Bien, tú único deber es estudiar-

-Lo sé, siempre me lo dices- respondió con enfado.

-Madre- intervino la voz pacífica de Sebastián, apenas ellos dos se llevaban tres años de diferencia, pero Sebastián no estaba en la misma institución que su hermano, él ya pertenecía a otra élite, una para instruir a los futuros reyes y reinas para tomar el trono y Zack... Su madre siempre decía que su casi era "diferente", él estaba estudiando para poder ser como su hermano, ese colegio
estaba orientado a enseñar las reglas básicas a principes y princesas problemáticas. Para los padres de Zack él era insuficiente para regir un reino, pero para él, sólo le hacía notar lo crueles que podían ser sus progenitores.

Sebastián estaba a punto de partir a sus clases sobre finanzas, estaba por despedirse cuando la madre de ambos soltó un comentario hiriente a su hijo menor.

"Deberías ser como tú hermano"
Deberías
Esa maldita palabra retumbaba su mente cada que algo no salía bien, cada que algo le molestaba y esa relación de amistad le estaba estorbando, ¿cómo pretendía confesarle sus sentimientos si todo el maldito rato estaba junto a ella?, ese maldito principito bueno para nada le estaba quitando lo único que le hacía bien: su primer amor.

Por otro lado Jack se encontraba agitado buscando a su amiga y por fin pudo verla a lo lejos, estaba caminando junto a otras chicas, parecían estar charlando sobre algo y sin dudarlo fue con ellas.

-Pero qué suerte tienes, estás con un chico muy interesante-

-¿Jack o Zack?, sólo los veo como amigos, son buenas personas-

-¿De verdad no?

-Chicas, Anne- dijo con elegancia, las dos chicas comenzaron a suspirar emocionadas y Anne le saludó de igual forma.

-Jack-

-¿Podemos hablar?-

-¿Es importante?, yo estaba...

-Bueno, los dejamos, ten un buen día Jack-

Las dos adolescentes se fueron soltando risitas en su camino, Jack no supo cómo responder pero seguía inquieto sobre lo de su amiga.

-¿Por qué dijiste eso sobre mí?- dijo algo indignado.

-¿Qué cosa?, no te entiendo-

-Dijiste que era un fracaso o algo por el estilo, no comprendo si lo dijiste de verdad o no, Zack me lo contó-

-¿Qué?, jamás diría algo así, eres mi amigo, y Zack puede decir muchas cosas, sabes que puede meter la pata-

-Entiendo pero, ¿lo dijiste o no?-

-Mirame, jamás dije eso-
Jack observó a su amiga a los ojos, y lejos de estar enojado con ella pudo distinguir con más agudeza el bello rostro que poseía, y sin darse cuenta quedó maravillado.

-Jack, no estamos jugando, y me sorprende que sospechas de mí, nada de eso fue cierto-

-Bueno, bueno, sólo quería preguntartelo, me parecía algo tonto, no será que Zack lo dijo a propósito...

-Lo dudo, ¿por qué lo haría?, somos los tres al final, ¿no?-

-Solo si voy contigo-

-Está bien, los dos juntos-

"Los dos juntos"

De nuevo excluido, de nuevo sintiéndome solo, ¿por qué nunca soy suficiente para alguien?, ¿acaso tengo un error de nacimiento?, ¿hice mal al nacer?...
Zack veía con envidia como ellos dos estaban tomados de la mano, sentía en su interior cómo algo quebrarse, cuando un plato es tirado al suelo, cuando un cristal se rompe y se resbala de las manos, y ves los trozos en el suelo, así mismo podía percibir su pobre ser en esos momentos, nunca reconocido ni validado, ni dentro, ni fuera. Entonces tenía que armar la mayor pelea entre ellos para separar eso que le dolía, su venganza sería recordada por ellos y por todos los demás imbéciles del instituto...
Tanto así que su plan dió resultado hoy en la actualidad...

Mi pasado en el presente -- ContinúaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora