Un partido más

Capitulo 11: Todos contra Goochi

Todo pasó como un destello, Axel me tomó por las muñecas y me presionó contra la pared violentamente paralizando todo mi cuerpo y atentando mi cuello con su lengua mientras su cadera golpeaba la mía contra la pared, mi conciencia golpeaba mi mente preguntándome si en verdad debería acceder a esto, a fin de cuentas yo de una u otra manera lo iba a disfrutar pero como me sentiría después conmigo mismo al permitir que alguien utilizara mi cuerpo sin merecerlo ante mis ojos, Axel me sacó de mis pensamientos cuando apretó mi cuerpo en algo que mas que parecerse a un abrazo era una prisión que me aplastaba dolorosamente, me lanzó contra el sofá y se abalanzó de nuevo contra mi, su comportamiento era parecido al de un animal hambriento y yo estaba inmóvil representando histriónicamente a la carroña, su temperatura era muy alta y sus músculos cambiaban de posición mientras sus manos desabrochaban los botones finales de mi camisa y seguían hasta acariciar mi trasero y luego pasarse por mis piernas apretando dolorosamente y seguía imitando ese golpe de caderas mientras aún tenía la ropa puesta y la sangre estaba acumulada en mis pómulos y mi frente provocando una sensación bastante conocida por mi gracias a Ábelard, de su boca emanaban una imitación extraña de gruñidos placenteros y sus manos abandonaron mi erección y pasaron a bajar el cierre de sus vaqueros desesperadamente y cuando por fin sus dedos temblorosos sacaron el botón, sacó su camisa jalándole por los bordes hasta sacarla levantando los brazos, tiró de mis pantalones con fuerza y brusquedad y fue entonces cuando estábamos completamente desnudos, mi mirada estaba perdida aun en el filo de detener todo en el momento de sentir que esto se convirtiera en una violacion y mientras el daba los últimos pasos para comenzar la penetración tomé el control de la situación por primera ves e hice que nuestros cuerpos giraran sobre el sofá mandándolo al suelo y colocándome sobre el demostrando que yo tenía el control, le bese para sellar el hecho de que esto era un acto mutuo y asegurándome de que lo que le excitaba de la situación era mi trasero y no el hecho de penetrarlo sin mi consentimiento, la temperatura de el mármol frío contra su espalda ardiente debió provocarle una especie de excitación extrema y elevo la parte superior de su cuerpo para abrazarme y tomar mis hombros para tirar de ellos empezando en nosotros el verdadero placer, los primeros segundos fueron extraños, Axel era muy diferente a mi anterior amante, el me trata con dureza y me provoca una excitación que no había descubierto en mi que tal ves no era la más intensa pero lograba satisfacerme por completo, mientras Abelard era completamente delicado y bastaba de un rose de su cuerpo para hacer que me olvidase de el resto del mundo, y eso no se podía comparar, los gemidos, la velocidad en la que nos movíamos y la humedad de su cuello y mi espalda incrementaban mi placer y en el punto máximo de nuestro acto las convulsiones de su vientre me anunciaron el orgasmo de Axel que estalló provocando un grito enorme por parte de Axel e inmediatamente el conjunto de su orgasmo su expresión y sus gritos me hizo concluir a mi también y provoco otro tipo de Clímax en mi que me hizo sentir infinitamente sensual y relajado pero al abandonarme esos sentimientos solo dejaron un vacío en mi corazón y un pensamiento de estupidez en mi cabeza 

-Dios... nunca pensé que fueras tan ardiente.- Dijo mientras recorría con la yema de el dedo angular mi hombro y descendía hasta mi espalda provocándole un escalofrío y yo no le respondí solo dejé mi mirada perdida en una pequeña cómoda enfrente de el sofá en el que estábamos recargados. 

-Acaso Ariadna no es tan femenina como se pavonea y resultó que cualquier chico puede ser más mujer que ella?- Axel arqueo una ceja y puso cara de no haber comprendido mi comentario y es que realmente yo solo estaba reflejando mi descontento pasado con la persona equivocada pero a fin de cuentas esos eran mis verdaderos pensamientos. 

-Ariadna es como un robot, simplemente deja que haga lo que quiere mientras no la lastime y eso es algo tedioso aveces.- su comentario me confirmo mis ideas que para Axel lo más excitante es el sexo violento pero la verdadera incógnita era hasta donde podía controlar sus fetiches y pasaría al punto en que sólo el disfrutará.