El Reino Hechicero

Leyenda

- No sé si lo has entendio.

Ainz miraba a Pandora, su creación había venido a él tan apresurado que incluso corrió a la Supervisora, Albedo al verse agredida intento ponerse al tú por tú contra él, pero Ainz lo impidió. Si conocía bien a su creación (y en verdad que lo conocía muy bien) lo que le debió alterar debía ser algo grave, el NPC se paseó por un momento por la habitación tanto que pareciera que haría un hoyo el piso alfombrado.

Ainz cansado golpeo el escritorio pidiendo una explicación al Tesorero, este se giró a verlo y se echó al piso pidiendo perdón.

- Dejate de estupideces, habla ahora o te arranco lo que tienes de pseudo cara.

El NPC se recompuso, tomo su forma verdadera.

- Ella... ¡¡¡ELLA!!! ¡Esa asquerosa!

Ainz ladeo la cabeza un poco ¿A quién se refería?

- Esa escoria de aventurera se atrevió a confesarse a usted, o sea a mi siendo usted, ¡Momon!

Seguía sin entender.

- ¿Es por eso que has corrido Albedo?

Pandora asintió.

- Entonces ¿Eso que tiene de malo?

No lo entendía, era una confesión de qué ¿de amor?, incluso él la hubiese rechazado y más aún sabiendo lo que Albedo podría hacer si se llegase a entrerar.

- ¡ELLA NO ES DIGNA DE USTED!

Su cara mostraba furia, era un rostro que gritaba pero sin emitir sonido alguno, se deformaba de una manera extraña y espantosa, digna de una pesadilla.

- No se declaro a mi, sino a Momon.

- ¡Pero Momon es usted!

Volvió a gritar.

- uhmmm... es verdad pero aún así.

- Y la muy ramera se le ocurrió decir que yo, usted, Momon sostenía una relación de hombre y mujer con Nabe.

Si Ainz pudiera tragar saliva, se hubiese atragantado con ella.

- ¡¿Qué?!

Ambos "hombres" se quedaron en silencio por un momento, al final el Rey estalló en carcajadas. El Tesorero solo lo miraba en silencio.

- ¿De dónde habrá sacado esa idea tan estupida?

Dijo después de que su [Supresor de Empciones] fuese activado.

Si bien el perfil de Momon había sido minuciosamente estudiado y creado, deseaba que fuera el ideal de Héroe en un mundo dónde reinaba el caos, no era descortés ni mal educado con nadie, ni siquiera con los nobles que en algún momento desearon humillarlo, aunque eso nunca pasó. Momon sabía darles la vuelta.

Ainz pidió a Pandora que le relatará lo sucedido.

--II--II--

Las rosas azules al ver que el aventurero y su compañera no regresaban decidieron irse de aquella plaza, el viento frío y la noche comenzaba a caer mientras las lamparas de poste de luz continua comenzaban a iluminarse.

¿Cuánto tiempo había pasado?

Lakyus sentían un peso en el pecho, un mal augurio.

Las cuatro mujeres se encaminaron al hotel esperando ahí encontrar a su amiga.

Y así fue.

Al entrar a la habitación la encontraron destrozada y oscura, no parecía que hubiese sido un robo, eso sería imposible con las leyes y castigos del Reino. Al adentrarse buscar en cada habitación, notaron que un pequeño bulto se levantaba en medio de la cama, estaba cubierta por las sábanas blancas y de igual manera la habitación estaba hecha un desastre.