UN TE AMO ES PARA SIEMPRE - (INTENABO)

V E I N T I O C H O

—Se nos va —dijo Claudio.

En ese momento se ve a varios enfermeros y algunos doctores entrar a la sala donde estaba Gustabo.

—¿Qué pasa? —dijo Jack parándose de su silla.

Nadie contestaba y fue a acercarse donde los doctores.

—No puedes pasar —le dijo Claudio.

—COMO QUE NO, SOY EL PUTO SUPERINTENDENTE, DEJAME ENTRAR —gritó Jack.

—Tranquilízate, si no tendré que llamar a seguridad, te prometo que Gustabo estará bien, te lo prometo —le dijo Claudio.

Claudio entro a la habitación de Gustabo y con un aparato iba a comenzar a reanimarlo.

—Todo está listo —dijo un enfermero.

—Te salvaré amigo mío —dijo Claudio y empezó a hacer su trabajo.

***

—Gustabo es fuerte, yo sé que él se pondrá bien —dijo Horacio.

—Ojalá, porque te juro que mato a esa perra —dijo Jack.

—No, tranquilo, iré por café, sé que el despertará —dijo Horacio y seguidamente se fue.

—Jack, apenas Gustabo se levante quiero que le digas que saliste con Jazmín, no es bueno las mentiras, estuviste a punto de perderlo y no contarle nada —dijo Volkov.

—Bien, le diré cuando estemos en casa, pero Jazmín es solo una amiga —dijo Jack.

—Si claro, más te vale que tu no le hayas dicho nada a Jazmín de la boda, me parece raro que Julia se haya presentado a la boda sin saber nada, y Brown no está —dijo Volkov.

—Bien, desconfiemos de ella —dijo Jack.

***

—¡LO LOGRAMOS! —dijo el enfermero.

Claudio no lo podía creer, estaba a punto de rendirse, pero siempre confió en que Gustabo haría su parte.

—Dejemos descansar al bombón, en una hora recién pueden entras- indicó Claudio.

—¿Usted les dirá la noticia a los familiares? —dijo el enfermero.

—No, se las das tú, yo necesito respirar —contestó Claudio.

***

—Mucho tardan, ¿Pasa algo? —preguntó Conway muy nervioso.

—No amigo, todo estará bien, con fe —dijo Volkov.

—Greco, ¿Dónde está? —preguntó Jack.

—Creo que se fue a comisaría, iba a revisar celular por celular si alguien se a comunicado con Julia o eso —dijo Volkov.

—Está bien, apenas llegue Brown lo botamos, quiero matar a esa hija de puta y quiero besar a mi bebé —dijo Jack.

—Tranquilo, mira ahí viene el enfermero, no lo insultes- advirtió Volkov.

—Bien, Gustabo casi se nos iba de un paro, Claudio ha logrado salvarlo en el último minuto, su pareja es un guerrero —dijo el enfermero sonriente.

Jack estaba más aliviado, su esposo o casi esposo estaba a salvo.

—Quiero verlo —dijo Jack.

—En una hora, las visitas se podrán en una hora señor —dijo un poco nervioso el enfermero.

—Bien, ¿Despertará? —preguntó.