Smoke©

29. Un Trabalenguas

Pov's Owen.

Me despierto por un fuerte dolor de cabeza, joder.

Miro a mi alrededor y tardo un poco en darme cuenta de donde estoy.

El gimnasio.

Me renuevo en lo que parece una  cama - más bien sofá/cama - y casi me caigo al ver a Abby a mi lado.

Yo me levanto rápidamente y me doy cuenta de que estoy vestido.

Eso me tranquiliza, no quiero hacer algo con ella y después no poder recordarlo.

No me atrevo a despertarla, podría verla dormir durante todo el día, pero estoy cabreado.

Joder se que ella también lo siente, la tensión que hay entre nosotros, la complicidad, todo...

Ella se remueve en la cama y abre los ojos poco a poco.

- No se que crees que pasó anoche - dice con la voz ronca.

- No se que pasó anoche, pero estoy vestido, así que nada de lo que pueda arrepentirme

- No, solo te presentaste aquí borracho, montaste un numerito y tuve que dormir aquí contigo para evitar que siguieras haciendo el gilipollas - responde mientras se levanta.

- Pues gracias por dejar que me quede - digo y salgo de la oficina sin decir nada más.

Por mucho que quiera darme la vuelta y volver a decirle que la quiero no puedo hacerlo.

No voy a abrirme otra vez para que pueda hacerme daño de nuevo.

Subo al coche y me largo de ahí tan rápido como puedo.

En unos minutos llego a casa y al entrar mi madre me espera en la cocina.

- ¿Donde has pasado la noche? - dice enfadada - Ha sido con esa chica, ¿verdad? Desde que sales con ella estás insoportable.

- ¡Nunca he salido con ella! - le espeto y ella frunce el ceño.

- ¿Que?

- Todo era una puta falsa para poder chantajearte y que me dejases ser feliz por una vez - respondo y ella se queda en Shock.

- ¿¡Me has estado mintiendo todo este tiempo!?

- ¿Sabes que? Ojalá hubiese sido verdad porque ella es increíble.

- Es una pordiosera - responde con rabia.

- No hables así de ella - la advierto.

- ¡Date cuenta de que sólo te quiere por tu dinero!

- Abby no es así, ¿y sabes por qué? Porque no me quiere - digo y me trago el dolor que me causa decir eso en voz alta

- Si crees que por contarme eso voy a invertir mi dinero en que arruines tu vida, entonces estás muy equivocado.

- Tú estás arruinando mi vida - digo y ella se hace la ofendida. - Pero no vas a seguir haciéndolo, porque voy a irme de esta Maldita casa y voy a encontrar la forma de conseguir lo que quiero.

- Owen...

- Que te den - sentencio y subo a mi habitación para hacer la maleta.

No cojo demasiadas cosas, solo la ropa  y algunos recuerdos.

Bajo las escaleras hecho una furia y saco mis tarjetas de crédito para dejarlas en la encimera de la cocina, donde mi madre toma un vaso de agua como si nada acabase de pasar.

En ese momento mi padre entra y frunce el ceño nada más verme.

- ¿Que está pasando aquí? - dice