17. Chicas De Los Demás

147 13 0
                                    

Pov's Abby

Owen conduce en silencio, mientras sigue mis indicaciones, a pesar de que le dije que le explicaría todo por el camino, pero él no ha preguntado, así que no diré nada.

- Gira a la izquierda - digo y él me da una mirada rapida

- Olvidé decirtelo, pero me alegro de que tu pelo ya no sea morado

- Gracias - respondo y eso me recuerda a que aún tengo que vengarme de Taylor.

Pensé en hacerle una pequeña depilación, pero eso está muy visto, al igual que los polvos pica pica.

En serio, tengo que pensar algo mejor.

- ¿No vas a decirme donde vamos? - dice y yo no respondo.

Creo que la charla de hace unos minutos nos ha dejado a ambos algo... jodidos.

No suelo hablar de mi madre, pero hacerlo con Owen me ha hecho darme cuenta de que siempre hay alguien que puede entenderme y que no piensa que soy la rarita que perdió a su madre durante el robo del banco donde trabajaba.

Por otro lado, él no parece desahogado, es como si en lugar de soltar un peso lo hubiese cargado de nuevo.

Nunca había visto a Owen Paterson guardando silencio durante tanto tiempo y con esa expresión de frialdad en su cara aún menos, recuerdo perfectamente cuando Mark murio, ni siquiera dejó que la gente viese esa faceta suya, y ahora..., ahora está mostrándome "su verdadero yo"

- Creo que estas esperando que te lo vuelva a preguntar

- A una pelea - respondo y en frunce el ceño, para después dirigir su mirada a mi.

- ¿Que cojones...? - En ese momento el sonido de un claxon llama nuestra atención y Owen vuelve a mirar al frente para evitar que choquemos contra un puto camión.

- ¡No vuelvas a apartar la vista de la carretera! - me quejo, notablemente molesta.

- ¿Por qué vamos a una pelea? - me ignora

- Porque tengo algo que hacer allí

- ¿Ahora te metes en peleas ilegales?

- Yo no seré quien peleé esta noche

- ¿Entonces? ¿Por qué tienes que ir allí?

- Owen joder, deja de hacer preguntas, tengo que ir y ya - digo comenzando a perder los nervios - Simplemente déjame en la entrada y vete a tu maldita casa

- No pensaba entrar

- Mejor, no me apetece para nada tener que cuidarte

- Pensé que te había demostrado que sabía cuidarme solo - dice, y noto como esa frialdad se va transformando en arrogancia, es decir, vuelve a ser el Owen de siempre.

Por un momento había pensado que ese sería el verdadero Owen, pero creo que me equivocaba.

- Cuidar de uno mismo no es solo saber golepar - digo y él no responde

Unos minutos después Owen para el coche frente a la enorme nave abandonada donde ya ha empezado la pelea, ya que, como siempre, llego tarde.

Abro la puerta del coche y justo cuando voy a bajar él me agarra del brazo.

- ¿No dirás nada? - dice y yo suelto una leve carcajada

- Si, claro - digo y él me suelta - Que te den - respondo y salgo del coche, para adentrarme en la nave, mientras escucho como se aleja.

Smoke©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora