ROUND 38

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Round 38

Farrelly 

(Escuchen "someone like you" de Adele al leer)

Yo era una persona orgullosa, o más que eso tal vez, era de esas personas que uno podría llamar… ”Terca”. Nunca me había vanagloriado de esa condición pero tampoco podía decir que era lo peor de mi, gracias a mi fuerte orgullo había podido contrarrestar los insultos de varias personas y responder o dar cara a “bromas” que realmente eran insultos acerca de mi peso, pero… lo que había pasado con Lucien era algo completamente distinto.

No lo veía hace cuatro años, cuatro largos años que habían sido una completa tortura, ok realmente habían pasado siete días pero para mí fueron como cuatro años, nuestra relación había sido tan corta y a la vez tan intensa que se podía considerar un orgasmo. Estaba claro que si me ponía a pensar en cosas sexuales terminaría perdiendo ya que lo recordaría más y mas seguiría llorando como una magdalena.

Nunca entendí como algunas personas podían terminar con sus novios y luego conseguir otro solo parpadeando, a mi me había tomado poco más de un año superar a Ethan y eso que con ayuda de un súper sexy chico malo que no sabía hacer otra cosa que poner de cabeza mis sentimientos, entonces… ¿Cómo superar a la única persona que te hacia superar todo?, creo que era imposible, al menos para mí.

— ¿Por qué te volviste a cortar? — me pregunto la doctora Backer por segunda vez mientras yo jugaba con mis dedos delante de ella , no quería contestar— Farrelly…

—Lo necesitaba… me ayuda. — dije al fin y lleve mi índice a mis dientes mordiendo un pellejito suelto

— ¿Enserio lo necesitas, Farrelly? —

—Enserio lo necesito…

 No quería estar ahí, eran las diez de la mañana y yo quería estar en clase, no en el consultorio de mi psicóloga. Había faltado a clase varios días seguidos y este era el sétimo, debido a mi golpe en la cabeza causado por la jauría de Diana y porque mi padre estaba preocupado por mi estabilidad emocional y todo lo que me pasaba con mi madre. Era raro, muy raro como alguien que decía que te quería proteger y estar a su lado, de un momento a otro te decía que eras lo suficientemente complicada como para estar en su vida, algo muy raro… y doloroso.

—No, Farrelly, no lo necesitas, ya no, habíamos superado esto, no te cortabas hace más de un mes, que paso, pensé que estábamos progresando—

Sentía el dolor en sus palabras pero realmente no tenia ánimos para hacerla sentir mejor o mentirle y decirle que “ era una crisis” que volvería a superarla como siempre lo hacía hasta que volvía a caer , pero no quería mentir, sentía que realmente no quería, es decir, para que mentir o fingir que había mejorado si volvería a lo mismo una y otra vez, si era lo que siempre me pasaba, si nunca mejoraba, si yo era débil y no podía llevar una vida sin recibir algún golpe que me llevara a abrazar a mi amada amiga…la navaja.

—Esa no es la solución a tus problemas, ¿o es que acaso lo crees?

— ¿Quiere que repitamos lo de siempre?, ¿preguntas cliché?, ¿Por qué lo haces?, ¿Es esta la solución?, te provocas un dolor peor, Farrelly. Lo sé doctora, lo sé muy bien y no es necesario que me lo recuerde porque recuerdo cada uno de sus sermones y no por recordarlos he dejado de cortarme, si, es un estúpido cliché y frase que utilizan todos en diferentes redes sociales y como típica respuesta de cuestionario cuando alguien les pregunta “¿Por qué lo haces?”, “Porque quiero hacer el dolor psicológico algo físico” y es así, joder que es así— grite exasperada

Camerra [C#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora