Capítulo 5

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Harry se despertó con algo resbaladizo en el culo.  Estaba demasiado cansado y deprimido para pensar lógicamente, por lo que debe poder decir que la extraña sensación no es más que el dolor de anoche.  Se acurrucó más cerca de la suave almohada y dejó que su cuerpo se fuera a la tierra de los sueños.  Sin embargo, la sensación en su trasero se estaba volviendo cada vez más sentida.  Podía sentir un suave cosquilleo en el abdomen y podía sentir la sangre corriendo hacia su pene. 

Frunció el ceño y abrió los ojos para mirar alrededor de la habitación e identificar la fuente de su problema.  Volvió la cabeza por encima del hombro y vio la imagen que esperaba, pero no pensó que fuera tan sorprendente.  

—Buenos días, esposo. 

—Um, buenos días ... —Harry tartamudeó mientras otra ola de calor se deslizaba por su pene.  Se congeló ante esta agradable sensación y sus párpados se cerraron por un momento.  Era cálido, cómodo y agradable.  No había pasado mucho tiempo desde que se sintió tan feliz, y el estrés asociado con toda la ceremonia de ayer fue olvidado.  ¿Cómo has dormido?  Junto con la pregunta, sintió que algo se estiraba más.

—¿Cómo has dormido? — Sintió, junto con la pregunta, algo que estiraba más su dolorida entrada.  Movió las caderas y algo se hundió más profundamente en su agujero. 

—¡Mierda! —Gritó de pánico, saltando al otro extremo de la cama.  Sintió que el intruso de su trasero se deshacía, por lo que soltó un suspiro de alivio. —¡¿Qué estás haciendo?! 

Su voz era acusadora y su expresión debió ser cómica ya que el Rey se rió y se acercó al niño.  Levantó la mano y Harry vio que dos de los cinco dedos brillaban como si estuvieran manchados con algo.  Se estremeció y miró al rey con dureza. 

—¿Por qué hiciste eso?

—¿Porque soy tu marido y puedo?— El Señor de Occidente respondió como si fuera lo más obvio del mundo. 

— ¡No, en absoluto—!  Harry exclamó indignado, cubriendo su cuerpo con una manta.  — He cumplido con mi obligación matrimonial y se han cumplido las condiciones de la alianza.  ¡No puedes meter tus dedos en mi culo! 

—¿Que... lo siento...Por que no puedo?   supongo que me perdí esa parte. 

—¡Yo Digo que..!  He cumplido con mi deber y esto ... —Comenzó a agitar las manos en todas direcciones.—¡No sucederá más! , Ya no es mi responsabilidad. 

— Pensé que no lo haríamos por deber. 

El Señor del Oeste parecía divertido por toda la conversación, lo que hizo que Harry se enojara aún más. 

—¿Por qué? 

—Porque es divertido y lo disfrutamos.  

Se repele con calma, como si le explicara algo a un niño.  Harry frunció el ceño, sin comprender en absoluto. 

—No pensé que nuestro matrimonio sería como cualquier otro, hecho para una alianza. 

—¿Qué quieres decir?— Preguntó Harry con curiosidad.

— No me voy a follar a los demás y mucho menos así no dejaré que nadie más te toque. 

— Yo no ... - tartamudeó, y su cabeza se quedó en blanco.  Se sintió extraño tener esta entrevista porque le estaban enseñando algo completamente diferente.

El marido siempre ha tenido derecho a tener numerosos amantes, y este derecho se ha utilizado con mucha frecuencia. Por otro lado, la esposa, que en este caso era Harry, no tenía muchos derechos. Debía ser fiel a su Rey y tener relaciones sexuales con él hasta  consevir un heredero varón. Este no era el caso de Harry, por lo que solo se le requería tener relaciones sexuales. Y cumplió con esta condición, entonces, ¿por qué el Rey quiere más?

𝚅𝙸𝙻𝙻𝙰𝙸𝙽  [traducción] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora