Alberto ya ha cumplido la suficiente edad para participar en el mayor de los festivales de los de su especie: La época de apareamiento.
Y Luca no sabe que hacer, la idea de que alguien ocupe su lugar a lado de su amigo lo destroza por dentro.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Se volteo y estiró como una gata perezosa pero ella era mucho más que eso.
La diosa del mar, La Shenu.
No era tan diferente a un Andyel común solo que contaba con un par de alas. Sus escamas eran tan negras como la noche y sus ojos de un color azul tan limpio que pareciera casi adorable.
Su apariencia era la de un Andyel en la madurez pero su edad era mucho más que eso, era la antepasada del mundo (la hija favorita del mar).
Sacudió las alas y un huracán azotó la costa Este de los Estados Unidos, que en el futuro sería conocido como el Huracán Helene.
Bostezo y un socavón se formó en algún país de Sudamérica.
Miro a su alrededor buscando a su posesión más preciada que siempre estaba junto con ella. La encontró rodeada de flora marina que se extendía a lo largo de varios kilómetros, sabía que le encantaban las flores.
Trato de sacarla pero las plantas marinas la sujetaban con fuerza, tiro del orbe hasta al fin sacarlo. Lo malo de la forma de los Andyel's es que es son muy débil pero al menos era mucho mejor que la estructura de los humanos.
Limpio el orbe con su cola para quitarle los retos de las plantas y sonrió. Empezó a nadar hasta la dirección de la Isla con la que había acordado con los Andyel's para su reunión.
Miro de cerca de donde nadaba y pudo notar algunos cosas que por alguna razón adornaban el mar, al intentar tocarlas se derretían a su toque y se transformaban en una alga marina, sin darle mucha importancia siguió nadando.
Aún estaba en las profundidades por lo que no había nadie o algo habitando a sus cercanías. No pasó mucho para que se encontrará con una manada de orcas que se dirigían a su encuentro.
Ella se detuvo para mirarlos y ellos la miraron con miedo era su instinto que les decía que corrieran porque había un depredador. En circunstancias normales no se hubieran acercado a esta área pero sabían que era la época de apareamiento así que se tuvieron que arriesgar.
Las orcas shoka eran una especie que existía desde hace milenios eran los descendientes de los megalodones mezclados con las orcas y ballenas.
Nadie en el mundo conocía de su existencia ya que habitaban en lo más profundo del océano en lugares que aún en décadas después el humano no podrá visitar. Eran dos veces más grande que una ballena y eran seres tranquilos pero también eran uno de los mayores depredadores del océano.
Se quedaron quietos por varios minutos mientras eran mirados por la Shenu hasta que una pareja joven de apenas unas siglos de edad se animó a acercarse.
La Shenu se veía diminuta a lado de las dos orcas pero ella no era la que temía por su vida. El orbe de la nada creció al tamaño de una ballena bebé para que se les facilitará a las dos orcas tocarlo a lo que se acercaron tímidamente.
