CHAPTER TWO

3.3K 227 14
                                    


Capitulo dos: Tienda de dulce.

Capitulo dos: Tienda de dulce

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¿Ves? es la bruja. Sarah Fier regresó.

Era Kate, la mejor amiga de Elena y Deena.

—Dios mio —exclamo la pelirroja divertida y Kate le sonrió un poco.

—Tu también —dijo esta vez Deena un poco cansada.

Pero Kate jalo de brazo a Elena y Deena para irse hacia el baño.

—¡De su tumba revivió y a todo el mundo esclaviso!

—Oh vamos Kate —sonrío la pelirroja divertida y ella le guiñó un ojo haciendo reír a Elena.

—¡Te quiere! —grito alguien por atrás de las dos chicas asustandolas.

—¡Simon! —exclamó Deena.

—Me asustaste idiota —le dijo Elena riendo.

—¡Tu sangre quiere quitarte y no parará hasta matarte! —dijo Simon mirando a la Wilson.

—Y yo te mataré a ti —bromeó la pelirroja y este se río.

—¡Vaya! si que son idiotas

—¡Oye yo no! —le dijo Elena fingiendo estar ofendida y la morena rio un poco.

—Bueno tu no —dijo Deena divertida.

—Es divertido —le dijo Kate a las dos chicas.

—Es morboso —hizo una mueca.

—Exacto —le dijo Denna dándole la razón a Elena.

—¿Que? ¡El tipo tenia una máscara de calavera! —sonrio Simon— ¿Cómo no es divertido?

—Murieron personas, murio Heather chicos. —hablo Elena un poco incómoda, y los dos la miraron con una mueca de culpa, se habían olvidado de lo que paso anoche.

—Exacto, seguro que era un infeliz que detestaba todos a su vida, como el resto de nosotros —hablo Deena y la pelirroja la miro de inmediato—Pero pensó: "¿Por qué no huyo de aquí para siempre? ¿Y por qué no llevarme a Heather y un par más conmigo?".

Elena solo la miraba, algo le pasaba a Deena, y lo iba a descubrir.

—No lo enloqueció ninguna bruja muerta y enfadada. ¡Este pueblo lo enloqueció! —termino de decir y dejo caer su mochila enojada.

La pelirroja lo había descubierto, termino otra vez con Sam.

—¿Estás bien?

—Si, estoy bien —contesto Deena.

—No pareces estarlo —le dijo Elena y la morena solo la ignoro.

—Quizás llevas una bruja dentro
—bromeo Simon.

—¿Tu que haces aqui? es el baño de damas —dijo Deena sonriendo.

—Tienda de dulces.

Simon tenia una caja en sus manos.

—¿Tienes de limón? —dijo burlona la pelirroja.

—Creo que no...

—No creemos en esta tonteria de la bruja —dijo Kate mientras se arreglaba su moño— Es como un Papá Noel jodido o algo asi ¡Jo, jo, jo¡

—¿Qué es?

—Un regalo para mi, oh gracias. —bromeo la pelirroja viendo la caja que tenía Deena en sus manos.

—No Lena, dáselo a Sam esta noche
—le dijo Deena.

—Ni loca —dijo Kate

—¡Por favor, Kate! ¡Elena, Por favor!

—Ay no Deena, no seremos parte del drama con tu ex, alias sam —dijo la pelirroja, no quería meterse en su problema.

—Hazlo tu, Deena. —le dijo Kate y la pelirroja asintio.

—No iré al partido. Deje la banda
—dijo Deena con una mueca.

—Que pena.

—¿Desde cuando? —le preguntó Kate.

—¿A quien le importa?.

—A mi. —le respondió la Wilson miradonla.

—¿Tu única actividad extracurricular?
—le hablo Kate

—Aún tienes el informe ¿no? —dijo Elena y Deena suspiro frustrada.

—Exacto, ponte esa mierda última vez

Kate se agacho y agarró la caja.

—Tengo algo que te dará coraje para enfrentar a Sam.

—¿Traficando otra vez? —pregunto Deena sorprendida y la pelirroja rio un poco.

—Nunca cambian —dijo Elena un poco divertida.

—¿No habias parado tras la sobredosis del hermano de este idiota? —pregunto Deena otra vez.

—¿Timothy?

—Si, ese ¿que le paso? —pregunto Elena con intriga y Kate la miro de inmediato.

—No le paso nada, fue solo sobredosis real, no murió —le respondió Kate y la Wilson alzó una ceja—Está con vida, créeme.

—Te creo, entonces. —dijo la Wilson con un tono divertido y ella le sonrió.

—Lo resucitaron —dijo Simon y realizó un movimiento con sus manos.

—Los dos son unos idiotas
—le dijo Deena con una sonrisa divertida.

—¿Cómo? ¿Quién tiene las mejores nota?

—Pues yo —dijo la pelirroja y los tres le miraron con una ceja alzada—Nah soy mala en eso.

Los cuatros rieron y se dirigieron hacia la puerta.

—Me voy. Debo reclamar mi lugar entre las estrellas, perras. —dijo Kate mirando a la pelirroja.

Paso un chico corriendo con algo y dijo:

—¡La bruja vive! ¡Que viva Sarah Fier!

Tenia un muñeco.

—¡Eso! —dijo Simon riendo.

—¡Vaya! es un loco.

FEAR STREET 1994 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora