¿Los animales tienen sentimientos?
Una pregunta tan difícil
de responder, los huma-
nos tratamos de compren-
der un mundo el cual
nos rechaza.
"Mis instintos saldrán a luz, cuando la amenaza trate de atacarme."
"Todas tus formas son únicas, pero al...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Su cuerpo dolía con punzadas y ataques. Últimamente los animales en su interior estaba ansiosos e inquietos, haciendo que sus días fueran más candados e difíciles.
Su abuelo se encontraba buscando una forma de poder controlar alguno de ellos, especialmente a él lobo y la pantera: los cuales eran los más peligrosos para los seres a su alrededor.
Seguía en su forma natural pero dentro de ella, una gran pelea se desarrollaba.
—Dejen de luchar, mantengan sus instintos controlados. — ordenó con firmeza.
Algunos le hicieron caso otros simplemente la ignoraron. Sin ninguna otra opción, preparó su cuerpo para dejarse caer sobre una gran estanqué.
Dado que el agua hacía que estos se tranquilizan durante unos minutos dándole unos cortos momentos de tranquilidad.
—¡Keiko-sama! — exclamo una de las vigilantes de su territorio.
Hime negó no su cabeza, haciéndola entender que no debía de interponerse; si no sería gravemente herida.
Poco a poco sobre su piel escamas comenzaron a creer y en los costados de su cuello branquias empezaron aparecer.
Adaptación: Un de los puntos fuertes de su quirk, permitía que el usuario pudiera adaptarse a cualquier hábitats o ambiente en donde se encuentre.
Tenía que liberar su mente y el agua era lo único que necesitaba. Realmente su abuelo se había lucido con la creación de aquella parte de su hogar. Aquel estanqué tenía una profundidad de unos cuantos metros bajo el suelo, había una gran variedad de peses e animales marinos que la ayudaban a conocer un poco más de su naturaleza.
Sabía que estaba lastimando a sus amigos, separándolos más y más de la una vida feliz. Dylan no merecía la soledad que ella le estaba dando, hacer que dejara a sus amigos por un simple miedo.
Aunque lo intentará una y otra vez, nunca sería capaz de olvidar la muerte de su raza, la destrucción de su pueblo y la eterna soledad a la que había sido llevada.
Siempre que trababa de buscar una razón para creer en los humanos, sus recuerdos volvían para atormenta su vida. Incluso cuando su abuelo la apoyaba en todo, no podía confiar por completo en el.
"¿Y si ellos también acaban conmigo?" pensó con intranquilidad. Nada le aseguraba que ellos no la lasrimarian o abandonarian como lo había hecho su familia.
