1. ¿Quién eres?

125 13 0
                                    

"Cuando ya ni puedes reconocer tu rostro frente al espejo ¿En quién te conviertes? Cuando esos ojos que te miran ya no parecen ser los tuyos. Cuando sientes que ya no queda nada de ti, y aún así, te dicen que estás ahí.
Sólo quiero gritarle a mi reflejo que deje de mentirme, ese no puedo ser yo"

-¿Quién eres? -soltó sin darse cuenta.

Por primera vez, en ya algunos años, había quitado las telas que tapaban algunas de sus ventanas para que la luz llegara y cubriera nuevamente algunos de los rincones del viejo apartamento. Volteó y también desocupó y regresó a su sitio uno de sus espejos. Aunque de ésto último no estuvo seguro aún después de repetirse una y otra vez que era hora de superarlo.

Sólo logró hacerlo forzándose a tirar las telas que lo cubrían, y prácticamente se regañó e insultó mentalmente para abrir los ojos y verse nuevamente el rostro en el reflejo del mismo. Fue una dura batalla que de seguro pocos comprenderian, y otros cuantos, aún más pocos lograrían ganar por su cuenta.

Gritó molesto al verse, cansado de vivir así sólo tiró varias de sus cosas por todas partes. No estaba realmente enojado, más bien frustrado por un pasado que se le había hecho más que difícil olvidar, y quizás hasta entender. Finalmente recuperó la calma pronto y se tiró sentado al sofá, se quitó la máscara que cubría sus cicatrices y quemaduras y la dejó a un lado. No pudo evitar, sin embargo, voltear y quedarse mirando a aquella pared forrada de viejos periódicos, todos con la misma noticia...

"Lo has prometido. Lo has prometido..."

Se repetía una y otra vez. Respirando profundo para convencerse de que ya no había vuelta atrás, que debía ya tratar de superar todo y que tampoco era necesario demasiado, sólo sería una salida rápida y ya. Se tomó una ducha helada para reaccionar, y justo cuando iba a cambiarse con algo sencillo para salir... vió sus viejas pulseras tiradas en el suelo.

Él juraba que las había guardado en algún lugar bajo llave. Pero parecía que no y sólo después de su pequeño ataque de rabia y destrucción las pulseras habían salido de su escondite y habían acabado casualmente junto a él.

Éstas pulseras eran especiales, y haciendo una pequeña pausa en la narración de ésta particular historia les explicaré un poquito que son pulseras... casi mágicas. O asi lo parecen. La tecnología que poseen es sorprendentemente superior a lo que nosotros consideramos como algo realmente avanzado. Tanto que parece un tipo de magia.

Y bueno, Taehyung detestaba esas pulseras. Tanto a lo que contenían como a lo que significaban. Pues... contenían la identidad que le habían dado junto a sus habilidades, y representaban todo su entrenamiento para esas habilidades. Representaban su preparación... y el accidente. Aquel trágico accidente que también estaba en las noticias de la pared... pero de eso ya se irán enterando más adelante.

Taehyung pensaba en todo eso y más. Especialmente en cuánto detestaba esas pulseras, pero se le vino una brillante idea a la cabeza en sólo unos segundos. Había prometido salir a dar un paseo por la ciudad a su mejor y de hecho único amigo, y había prometido que lo haría "a su manera". Taehyung estaba pensando en salir de todas formas muy bien cubierto, usando su máscara y... de noche para que a la gente le importe mucho menos lo que ve o lo que no. Iría a un restaurante únicamente a por un café bien cargado, tal vez a una plaza a tomar algo de aire y... eso era todo.

Pero esas pulseras... abrían un mundo nuevo de posibilidades, uno donde no tendria que soportar que le vieran el rostro o lo que se podía ver del mismo. Claro que este mundo de posibilidades llevaba consigo un montón de recuerdos incómodos, una nostalgia algo... a su parecer vacía, y bastantes posibles riesgos. Aún así, se colocó las pulseras. Dudó un poco más... pero acabó activándolas de todas formas.

Crazy [Vkook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora