Capítulo 0

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Día de Confusión (Rick Grimes)...

🗡

Estaba en mi sofá viendo las últimas noticias del día, hablaban de un nuevo virus, yo no le tome mucha importancia y me fui a dormir, al día siguiente me despertaron un montón de gritos, tiroteos y estallidos, lo cual claramente me altera, me puse el primer pantalón que encontré y una camisa sin mangas, me dirijo al baño, abro un cajón pequeño que tenía un arma y una botella de agua llena de balas, voy al armario y saco un arco y flechas, las usaba los días que no tenía nada que hacer, me asomo por la ventana y veo a personas comiéndose a otras personas.

"Creo que en estos casos la realidad supero la ficción"

Agarro dos maletas grandes y me voy a la cocina, meto toda la comida que encontré, agua, jugos, latas de lo que encontraba y todo lo que vi, creo que metí cosas innecesarias, ya que la presión del momento no me dejaba aclarar mi mente, voy a mi cuarto y en la otra maleta meto ropa, un botiquín de mano, una linterna y todas las pilas que tenía en el cajón, estaba por sacar otras cosas, pero escucho golpes en la puerta, me asomo con cuidado por la ventana, son un montón de muertos vivientes tratando de entrar, corro y cojo todas mis cosas, las guardo como puedo, entre ellas también saque una radio, salgo por la puerta de atrás y me largo a la casa de Merle, tiro la puerta, ya que cuando toque nadie habría, me puse en alerta con mi arma apuntando, pero no había ni una mosca, paso mis manos por mi cara con frustración al pensar que mi amigo murió por una de esas extrañas cosas, suelto mis cosas y con muebles tape la puerta para que nada la cruzara, aprovecho el silencio y la "calma" que hay para tranquilizarme.

Me siento en el piso y reviso lo que empaque, todo es de utilidad a excepción de unas 3 latas de cerveza, las cuales decidí abandonar después de todo ya no tengo con quién pasar una noche de tragos.

Verifico la casa y no hay nada, de alguna forma me alivia Merle pudo escapar, tal vez esté vivo.

Después de 4 semanas decidí irme, ya no tenía nada que hacer, confirme que mis padres murieron de una manera muy dolorosa lo cual solo me hace creer que fue el karma los alcanzó, no encontré el cuerpo de mi hermano aunque prefiero no tener más falsas esperanzas, decidí irme a un pueblo vecino, para ver si había algo o alguien y no, pero si había un hospital, destruido, pero lo había, entro con precaución y no hay mucho, lo poco que noto que puede ser de utilidad lo tomo, después de revisar algunas habitaciones decido no ver más e irme, en eso escucho algún gemir de dolor y pedir ayuda entre dientes, es una voz masculina que viene de una habitación, dudo un poco, pero decido entrar con mi arma apuntando en frente, veo un hombre en una cama tratando que quitarse los cables que tenía conectados al cuerpo con desesperación, este al verme levanta las manos, tiene una cara de muerte el pobre.

-Baja el arma... por favor.- dice.

No hago caso y lo sigo apuntando, después de mirar todo con detalle y darme cuenta de que el hombre parece más perdido que yo cuando todo esto empezó bajo el arma y le ayudo a quitarse los cables que tenía encima, este me mira más confundido que antes, yo me siento en la cama a un lado de él.

-Para que son esas vendas?.- Digo mirando su abdomen.

"En parte sé que es una pregunta estúpida, pero es mejor ser prevenida"

-Me dispararon.- Dice con tristeza.

-Solo eso?.- Digo con verdadera intriga.

-Únicamente me dispararon, no te basta con un disparo?.- Dice con enojo.

-No.- Digo cortante.

-Porque?.- Dice, al escucharlo suelto una pequeña risa y lo miro a los ojos.

-Ya lo verás, cuando estés listo te espero afuera.- Cojo mi maleta, la abro y saco una camisa ancha, la cual era de Merle, la dejo en mi casa una vez, dejo la camisa en la cama y salgo con mis cosas de la habitación, espero unos segundos cuando el hombre sale de ella, mira todo con asombro y miedo, él camina por todos lado, yo únicamente lo sigo con fastidio, va a la recepción y toma el teléfono de la recepción trata de llamar un par de veces, pero no tuvo caso. -No sirve-

"Como pudo sobrevivir todo este tiempo sin que alguien le ayudara"

Este sigue caminando como si no escuchara mis palabras, luego de unos minutos salimos del hospital. El hombre seguía sin creer lo que estaba viendo, este voltea haberme confundido, buscando que le diera una respuesta a todo lo que estaba pasando

-El mundo se acabó, eso es todo y tú estás vivo extrañamente, pero lo estas- Digo entre dientes mientras miro con cautela todo el lugar.

-Mi esposa y mi hijo... Están vivos?.- Hago una mueca de no saber nada de su familia.

-No tengo ni idea, recuerdas donde viven?.- El hombre asiente -Entonces vamos, pero antes tienes que tomar algo- Le doy una botella de agua.

.

Como lo suponía no había nadie en esa casa, el hombre estaba devastado así que decidí darle espacio.

Salí de la casa y di algunas vueltas vigilando todo el sitio, después de unos minutos escuché un disparo.

Un hombre de tez oscura acompañado de un niño que supongo es su hijo lo estaban jalando de las piernas, me acerco y cojo por el hombro al hombre les apunto con mi arma.

-Quienes son?.- Este me apunto con un arma, yo rápido agarro al niño del brazo y le apunto -Vas a responder?- El hombre baja el arma y alza las manos para hacerle saber que se rinde.

-Yo... yo soy Morgan y él... él es mi hijo Duane, por favor...- Lo interrumpo.

-Porque se llevan al hombre? Lo mataron?.- Morgan no responde, a lo cual yo le quito el seguro a mi arma, este niega con la cabeza con desesperación.

-Mi hijo lo golpeó, pensó que era uno de los muertos, el disparo yo se lo di a uno de ellos, lo llevamos para sanarlo, pero...- Lo vuelvo a interrumpir.

-Bien, además no le voy a disparar a tu hijo, no soy un monstruo, aparte acabo de conocer al hombre.- Morgan suspira aliviado, yo suelto al niño y nos dirigimos a la casa yo detrás de los hombres y el niño mirándolos con cautela. Después de una larga espera el hombre despierta y sale de la habitación para comer, yo solo estoy sentada en un mueble con el hijo de Morgan enseñándole a hacer flechas.

-Hola.- Dice el hombre del hospital, yo solo asiento con la cabeza, después de un rato no sentamos a comer, Morgan y su hijo iban a rezar, nos hace una seña para que también lo hagamos y no nos queda de otra o bueno a mí, hice lo mismo, pero no soy muy creyente.

-Cómo te llamas?.- miro al hombre del hospital.

-Rick, Rick Grimes.- dice sin apartar la mirada del plato.

-Vinieron juntos y no se saben ni los nombres?.- Dice Morgan con una sonrisa, yo niego con la cabeza metiéndome otra cucharada de comida a la boca.

-No llevamos mucho tiempo juntos, ella únicamente me encontró en el hospital... Y me salvo- Dice Rock dedicándome una sonrisa.

Alas Rotas (Parte 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora