Eterno | KookV♡

｢Capítulo 32 ❃｣

Taehyung se quedó inmóvil al reconocer a la persona frente a él, no podía ser cierto, seguramente aún estaba dormido y continuaba inmerso en un sueño, uno que se sentía muy real. Se incorporó y talló sus ojos en repetidas ocasiones, como si estuviese buscando la forma de hacer que el hombre frente a él desapareciera. No quería verlo, necesitaba despertar en verdad y que Seokjin estuviera muy lejos.

Quería encontrarlo, enfrentarlo, saber la verdad. Pero no se sentía listo, no ahora que empezaba a experimentar sensaciones tan fuertes en su cuerpo. Su pecho dolía, sus manos temblaban, su espalda estaba bañada en una fría capa de sudor que se había acumulado luego de aquella extraña experiencia por el bosque. 

No podía entender lo que sucedió, todo era confuso. Lo único que recordaba con claridad, era el terror que sintió al ver a Jungkook herido de esa forma.

Sintió miedo de que pudiera morir al ser sometido por aquellos hombres que lo atacaban sin descanso. Quizá, todo fue producto de su imaginación por el estrés y la ansiedad que le provocaba el hecho de que Jungkook se hubiera marchado en una peligrosa misión, sin embargo, las sensaciones eran reales. Aún estaba nervioso por todo lo que vio, débil y sin energías, indicándole que, quizá, aquel sueño no sólo fue una mala jugada de su mente.

—Taehyung, ¿Estás bien?

Seokjin lo observó con preocupación, el castaño permaneció sentado en la cama mirando a un punto fijo sin reaccionar ante su llamado, así que decidió acercarse a él y tomar su rostro entre sus manos, su frente estaba perlada por el sudor y toda su piel parecía arder bajo su tacto.

—Taehyung, tu piel se siente muy caliente, ¿Qué fue lo que sucedió?

Aquella pregunta lo hizo reaccionar de su trance, no estaba dormido, Seokjin verdaderamente estaba ahí, con él. ¿Cómo había llegado? No tenía idea, y quizá debió ser lo primero que preguntara, pero su rostro visiblemente preocupado, despertó en él una chispa de ira que no pudo contener. Con fuerza, empujó al contrario para hacer que dejara de tocarlo.

—¿Qué fue lo que sucedió? Oh, bueno, acepté un trabajo como historiador en Rumania con un reconocido profesor de la UNS, pero, él jamás llegó a nuestro viaje, dejándome jodidamente solo en un continente que no conocía. —Observó como el gesto de Seokjin se tensó y estaba a punto de interrumpirlo, pero él continuó. — Claro que ese sólo podía ser el principio de mis problemas, ¿No? Porque resulta que el gran Kim Seokjin no sólo destaca por sus investigaciones, sino por ser un maldito traidor y un mentiroso de primera.

—Taehyung, por favor, tienes que dejar que te explique...

—¿Qué cosa vas a explicarme exactamente? ¿Qué eres un ser sobrenatural? ¿Qué tienes superpoderes tan geniales como para hacer que toda una maldita legión esté detrás de ti? ¿O que usaste esos mismos poderes para borrarme todos mis recuerdos?

Seokjin lo observó con una mirada neutra que pronto se entristeció ante sus palabras. Estaba claro que Taehyung sabía mucho más de lo que esperaba y eso complicaba las cosas. Necesitaba averiguar cómo había recuperado sus recuerdos, y especialmente, qué tanto de eso había visto ya. Muchas cosas eran realmente delicadas, y no sería bueno para sus planes que todas ellas hubiesen sido reveladas.

—Tae, sé que hice las cosas muy mal al no decirte sobre todo esto...

—Claro que me lo dijiste, sólo que luego, por alguna estúpida razón que no comprendo, creíste que sería una maravillosa idea hacerme olvidar todo, dejándome confundido e ignorante ante este mundo.

Los ojos de Taehyung se oscurecieron, su mirada mostraba todo el enojo que estuvo conteniendo desde que supo la verdad sobre Seokjin. Había tantas cosas que necesitaba saber, tantas preguntas acumulándose en su cabeza, pero su ira podía más en ese instante. Sólo quería reclamarle todo lo mal que la pasó por su culpa.