Icegirl- Celeste y Manuel.

•EPÍLOGO•

— ¿Me estás diciendo que Mara me va a reemplazar?.

Celeste llegó a la pista encontrándose con la grata sorpresa de que Mara la sustituirá en la última etapa al estar inactiva para los ensayos.

Estaba confundida y un poco desconfiada pues Mara es rival de ellos y por lo que va, no de llevan bien. Hasta ahora.

— sí, Mara cambió, nos pidió perdón y está mostrando su buena cara para esto, es buena bailarina tal y como lo recuerdo — le respondió Alex.

— sólo es para mañana y ayudarlos y en caso de que ganen, podrás regresar y patinar en Canadá, no pretendo quitarte a Alex cómo pareja de patín — habló Mara — yo solo quiero remendar las cosas con todos ustedes... Me deje llevar por las estupideces.

— ya vimos — dijo Alex.

— ¿Por qué siempre tienes que opinar?— lo enfrentó Mara.

— bueno, en ese caso, gracias por ayudar al equipo, fue un gran sacrificio el qué hiciste— la felicitó Celeste — no te voy a mentir que estoy triste porque no participaré en ésta última etapa y quién sabe si era la última.

— ¡No digas eso!, Vamos a ganar — gritó Alex — estoy yo dentro del equipo, que no se te olvide, blanca nieves.

Celeste rió y abrazó de lado a Alex.

— entonces hazme saber qué eres él mejor, cuñadito — él fue quién rió.

— por tú culpa ahora tengo que estar soportando ver a Manuel con una estúpida sonrisa y escucharlo reír en las noches cuando habla contigo por teléfono. Mira, acepto su noviazgo pero a mí me respetan la hora de dormir.

Celeste rodó los ojos.

— tú hablas con Chiara, no te hagas que ella me lo dice.

— ay, pero al menos yo soy prudente.

— tapate los oídos entonces.

— ¡Eres una malcriada!— Alex la empuja y ésta carcajea.

Por otra parte, Daisy estaba organizando algunas cosas para el día de mañana y detrás de ella, estaba Mara un poco más alejada buscando sus patines y Marcos igual venía para ver a su hermana después de tenerle la ley de hielo.

— ¿Qué haces aquí?— le preguntó Mara.

— vine a ver tú último ensayo — le respondió mientras le daba una ojeada rápida a Daisy. Mara sonrió pícaramente al notarlo.

— y a ver a Daisy también — Daisy giró al oír su nombre y Mara le sonrió con inocencia y volvió a lo suyo — ve y háblale pelotudo.

— no me va a hablar.

— sí lo va hacer, yo hablé con ella...

— ¿Cuándo?.

— no me acuerdo, fue esa vez que abracé mientras fregabas — el rió — le expliqué que todo fue a raíz de mi...

— si, pero no entiendes que yo pude haberme negado a eso, ya esa parte era voluntad mía.

— Marcos...— Mara se acercó a su hermano y lo tomó de los hombros para entrarlo al vestidor — si vas con honestidad y arrepentido ella te va a escuchar porque sabe al menos una pincelada y la raíz del problema. Si de verdad la quieres, ve y dile todo sin filtro, ella entenderá.

— tengo miedo de que no lo haga y me dolerá.

— eres el chico más pesimistas, joder, te odio a veces por esto... ¿Lo harás?.