⁶ (fin)

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La ciudad era hermosa, a donde miraras podías encontrarle diferentes encantos.

Jeongin caminaba relajado por las calles de París disfrutando de la vista y del ambiente tranquilo. Aunque era un lugar repleto de turistas conservaba su tranquilidad, llevaba un mes en aquella ciudad y a su parecer no se iría pronto.

Con las manos en los bolsillos siguió caminando y a diferencia de otras ciudades lo interesante en París sucede en las noches, luces alumbraban cada rincón. Fiestas y celebraciones se llevaban a cabo. Aunque fuera una persona nocturna disfrutaba al máximo cada noche.

Entro a una tienda de ropa en busca de un saco nuevo, Jeongin disfrutaba de hacer sus compras y perder el tiempo en vestirce bien. Igualmente no tenía más en que invertir su tiempo... Por lo que fingir por un momento ser humano y hacer cosas normales lo mantenían tranquilo.

Dio un par vueltas por la tienda y a lo lejos colgados en la esquina del estante logro ver un saco negro que seguramente le quedaba hasta la rodilla y uno rojo vino que era un par de centímetros más largo que el anterior, los dos le facinaban por lo que llevo los dos hacia la caja.

Al acercarse una chica de pelo negro y corto lo atendió regalándole sonrisas coquetas durante su pequeña charla.
-Disculpe el atrevimiento pero ¿Me podría dar su numero?- no negaría que la chica se le hizo muy tierna, si tan solo supiera que no le atraían las mujeres.

-Lo siento, tengo novio- una pequeña mentira no le hacía mal a nadie y técnicamente Hyunjin y él nunca terminaron, la sorpresa en su rostro era notable pero segundos después sonrió mostrando sus hoyuelos.

-No tiene porqué pedir perdón, en todo caso. Discúlpeme usted a mi- y al terminar de empacar los dos sacos, salió del local con una sonrisa en su rostro. Era una chica muy agradable.

Camino durante horas hasta que los comercios cerraron y las personas regresaban a sus hogares pero el seguía vagando por las calles, llego hasta una fuente de agua que era alumbrada por un poste y observaba el agua pasando su mano entre el frió líquido, su mirada se dirigió a el reloj en su muñeca, 04:00 suspiro pero fue inevitable no mirar hacia su brazalete.

Sonrió como bobo mientras se ponía de pie y volvía hacia su departamento.

Una pregunta apareció en su cabeza, ¿Amar a alguien durante tanto tiempo era normal?

Seguramente no lo era pero sinceramente era algo que no le importaba.

Camino durante 20 minutos y al llegar a su edificio subió por el ascensor hasta el piso 6 y camino atraves del pasillo hasta llegar a su habitación.

Entro y como era costumbre las luces estaban completamente apagadas, suspiro con tranquilidad al llegar a tiempo a su lugar seguro.
Dejo la bolsa en el piso y colgó el abrigo que llevaba puesto en el perchero de la entrada.

Segundos después prendió la luz dándose vuelta para recostarse en la cama.

-Hola- levantó la mirada y se encontró con la persona que avía rondado por su cabeza.

Abrió los ojos como dos platos, sentía que en ese momento se podía desmayar y al parecer el contrario también lo noto.

-¿París eh?- sonrió de costado mientras miraba al peli azul a los ojos.

-¿Creíste que escapando de Corea te librarías de mí?- hizo un puchero mientras se acercaba cada vez más al menor.

-Hyunj-jin - aclaro la garganta- ¿Cómo me encontraste?

-Eres muy predecible Innie- sonrió mientras el contrario sentía que su sangre se helaba.

Cuando tenían 15 años

-Hyung, ¿A dónde le gustaría viajar?- el menor pregunto acostado en su cama.

- Mm tal vez a Paris, Francia- suspiro mientras se acomodaba en el colchón que estaba en el piso de la habitación- ¿Y tu?

-No lo sé, ¿Me llevaría con usted?- pregunto con diversión.

-Claro- sonrió parándose del colchón para tirarse sobre Jeongin- cuando seamos más grandes nos vamos juntos ¿Quieres?

Y al terminar de hablar empezó a hacerle cosquillas al menor quién solo asentía.

-Con gusto Hyung- respondió regulando su respiración para luego seguir hablando-¿Hoy duerme junto a mí?

Y el mayor asiento metiendose bajo las sábanas y abrazando al menor.
-¿Sabes Jeongin? En estos momentos París espera por nosotros.

Presente

Jeongin agachó la mirada y se rascó la nuca
-¿Te acuerdas de eso?- suspiro- pensé que lo habías olvidado.

-¿Y que se te ofrece?¿Un vaso con agua?- sonrió nervioso mientras sentía la mirada del alto sobre el.

-No quiero agua - escucho una risa de parte del mayor- pero si quiero otra cosa.

El menor asintió levantando la mirada
-¿Que quieres?- pregunto con la intención de ayudar al mayor.

Escucho como se acercaba lentamente hacia el y por inercia empezó a retroceder pero por su mala suerte choco contra la pared.
En cuestión de segundos Hyunjin estaba a escasos centímetros de distancia y llevo una de sus manos a el rostro del menor, tomándose el tiempo de apreciar la belleza del peli azul.

-Sigues igual de hermoso- sonrió haciendo que Jeongin se sonrojara.

-Innie, te quiero a ti- y sin esperar una respuesta beso los labios del menor en un beso reconfortante, un beso hambriento pero que demostraba amor.

Un beso único para los dos.

¿Vampiro?  |Hyunin|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora