✩ 𝑫𝒖𝒍𝒄𝒆 𝑫𝒆𝒍𝒊𝒄𝒂𝒅𝒐 [✓]

🎠 seis ✓

— ¿Seguro que estás bien? — preguntó Samuel por tercera vez en los últimos 20 minutos. Rubén había estado vomitando toda la mañana pero este insistía en que algo le cayó mal.

Levantándose del piso respondió.

— Sí, tranquilo, solo fue algo que comí, de seguro no lave bien las fresas de ayer — terminó de decir con una media sonrisa

— No me parece que sea algo tan simple, ¿sigues con los mareos? — Rubén asintió — ¿Desde cuándo empezaron?

— Desde mi último...celo — su voz se fue haciendo más baja por cada palabra que decía — ¿Tú crees que...?

— Llamaré al doctor.

— 🎠 —

— No hay nada de malo, a menos que el o la chiquilla que crece dentro de su vientre no sea deseado o deseada — terminó por decir el doctor Raúl guardando sus cosas

— ¡¿Qué?! — gritó Rubén

— Doctor, nosotros usamos protección siempre que lo hacemos.

— Y díganme, ¿revisaron la caducidad?

— ¿Caducidad?

— Aparte, recuerden que no todo es 100% efectivo.

Y ya no dijo más, el doctor salió de la casa dejando a la pareja sola en aquella inmensa mansión. Samuel se quedó viendo a la nada por la ventana hasta que escuchó un sollozo.

— ¿Qué vamos a hacer? — preguntó para después comenzar a llorar.

Cosa que Samuel entendía perfectamente, tener hijos era algo de lo que anteriormente habían hablado, pero estaba en sus planes a largo plazo. Tener un bebé en estos tiempos era muy complicado, las cosas no son como antes que se podían conseguir las cosas en cualquier tienda o supermercado, ahora cosas como pañales, toallitas o si quería ropa para bebe están muy limitados, la falta de omegas hace que bebés no lleguen al mundo, las empresas colapsan y ya no les queda nada que hacer.

A demás correrían el riesgo de que, si su hijo o hija es omega está en riesgo de que cualquier alfa o beta llegue a hacerle daño o peor aún, quitárselo.

— Tranquilo, tranquilo...estamos seguros aquí, ¿recuerdas? Te lo prometí, nadie te hará daño mientras yo esté junto a ti.

Después de eso Rubén estuvo más tranquilo, y la idea de tener a un bebé en la casa le parecía más alegre, así tendría compañía además de los animales cuando Samuel tiene que salir.

Ahora le emocionaba darle la noticia a sus conocidos...o al menos a los que quedaban.

Si si, se vienen bebés. Pero, no esperen a Brayan

LOSIENTOOKEY??!

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