¿Ella es la princesa perdida?

3. 1- Siguiendo al zorro blanco

Seguí el paso a esa zorrita con las 3 colas. Era muy curiosa, me veía a los ojos y desaparecía, después volvía a aparecer de mi otro lado, así me la pasaba con ella, jugando de una lado para el otro.

Aún escuchaba a Tristán y al otro sujeto peleando, cada vez que seguía a la zorrita los escuchaba menos, hasta que ya no lo hacía. Levanté mi mirada al cielo y ya era de noche, ¿qué ha pasado? ¿Tanto tiempo estuve corriendo? Si tan solo fueron como 10 minutos, no pudo ser tanto.
Sabía que no debía de gritar el nombre de Tristán, seguramente algún otro ser aparecería al frente de mi, pero no sería de esos animales bonitos, podría ser algo malo.

¿Qué más podía hacer?

Estaba realmente asustada. La zorrita me miro y emitió un sonidito. El bosque se empezó a mover y puf...Me encontraba en el lugar de inicio.

-¿Cómo es que...? - Comencé a decirle.

-Jenner- Volteo. Era Tristán - Lamento que vieras eso, ese tonto me distrajo demasiado.

Pensé que lo vería muy asustado o enojado, en cambio, lo veía cansado y feliz.

-¡Aaaaag, me las pagarás!- veo que habla al otro lado del bosque, cerca de un manzano.

-Sí, sí. Lo siento, sólo fue mi presentación. Además quería que vieras mi nueva transformación, nunca lo viste venir ,¿verdad? - Escucho a alguien decir en esa dirección pero no veo a nadie.
De la nada aparece un hombre en frente de mi.
Es un chico pelinegro...ba-bastante alto, me hace sentir cohibida, más con esos ojos verdes.

-Con que eres la famosa Jenner Anderson,¿uuhm?- levanta su ceja izquierda después de decir ese "¿uuhm?".

- S-sí. Soy yo- digo todavía con pena.
Después se va enseguida cuando se dio cuenta que estaba muy cerca.

- Déjala en paz, Jordan. La haces sentir incómoda. - Tristán se para a ladito de mi.

"Otra persona igual me hace sentir así", pienso. Se inmuta Tristán y se mueve dos pasos hacia a izquierda.

-Pe-perdón.

-Al parecer era cierto la profesía. Tristán Fuhrer enamorado- Este tal Jordan tal vez sea un tipo de demonio o algo, porque debajo de él hay un tipo de niebla negra.
- No soy un demonio, lindura. Soy igual que ese tipo que tienes a tu lado .

-¿Eres un guardián?- Digo un poco sorprendida. Miro al castaño y él sólo...¡Está comiendo!

¿¡Está comiendo unas bayas?!

-¿Cómo es que en momentos como este te pones a comer?! - lo reprendo.

- Ay, perdón- dice casi llorando- pero los vi tan rojitas y redonditas.

-Mmmh...- nos quedamos viendonos. Y yo solo- jajajaja, ¿puedo probarlas?.

Se le ilumina la cara y me entrega unas. Las miro, sí se ven apetitosas.
Me meto dos a la boca...y....

-¡Oh, por dios!, ¡son muy...asquerosos!- los escupo - aahhhsgdgdhdghd, saben muy mal.

- JAJAJAJAJ, claro que iban a saber mal, si es lo que deseas.- veo a un Jordan todo muerto de risa.

-¿Qué? No entiendo.

-Es que, Jen. Estas bayas son mágicas, debes imaginarte como quieres que sepan y sabrán así.

-¿Cómo esperas qué haya sabido eso en un principio?

-...

-JAJAJAJA- Jordan no de deja reír, está en el piso carcajeando.