𝑫𝒊𝒗𝒊𝒏𝒂 𝒍𝒊𝒕𝒆𝒓𝒂𝒕𝒖𝒓𝒂. 𝑩𝒐𝒌𝒖𝒕𝒐 𝒙 𝒓𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓
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Al voltear mi visión logré ver a una mujer hermosa a mi parecer, no lograba quitarla de mi panorama de visión. Debía de lograr hablarle, pedirle su número o simp...
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𝓑𝓸𝓴𝓾𝓽𝓸
— No puedo creerlo Akaashi ¿viste a esa chica? — Decía el peliblanco mientras caminaba con su amigo
— Sí, Bokuto-san, sí la vi — Decía el otro.
— Guau, era muy hermosa... ¿en que clase irá? ¿Tú lo sabes Akaashi? —
— No lo se Bokuto, si supiera te lo diría — Bokuto se desanimo por la respuesta del otro — ven tenemos que entrenar —
— ¡Si vamos! — Como por arte de magia el peliblanco se le esfumó por completo todo rastro de tristeza y lo invadió una alegría extrema.
Ambos amigos fueron al sitio donde practicaban con sus demás compañeros de voleibol.
— ¡Hey, hey, hey! — Bokuto llegó con toda su emoción y alegría junto a sus compañeros, tratando de motivarlos también.
— ¡Oh! Bokuto-san, estás aquí, ten una botella de agua y usted también Akaashi-san — Le dijo Kaori extendiéndole una botella de agua de aproximadamente 500 ml.
Ambos agradecieron y tomaron un pequeño sorbo. Comenzaron a realizar un pequeño estiramiento para practicar con la seguridad y mayor movimiento.
Comenzaron a trotar al rededor de la cancha, para calentar el cuerpo. Solo unos 10 minutos, no hacía falta más.
— Y ¿Qué piensas hacer? — Le pregunto Akaashi a Bokuto que estaba a la par trotando.
— ¿Respecto a que? — Le devolvió la pregunta
— Sobre la chica de la biblioteca, ni siquiera sabes su nombre o en qué salón está — Bokuto se desilusionó un poco con las verdades que sacaba Akaashi.
— No lo sé... — Bokuto bajo sus hombros de manera triste.
— Podrías volver a la biblioteca mañana, a lo mejor y este ahí — Respondió devolviéndole las esperanzas de un golpe, como si fuera magia.
— ¡Si! Eso haré — A Bokuto se le notaba la alegría, del modo en que superaba a Akaashi y a sus otros compañeros en el trote.
Bien, ahora tocaba el pequeño partido de voleibol para practicar. Bokuto se asimilaba a una máquina, solamente falló en un tiro, y en vez de colocarse triste les dio ánimos a sus compañeros y siguió alegremente.
"Esto es extraño"
Pensó la mayoría. Y razón tenían, Bokuto nunca se comportaba así, hasta Akaashi se sorprendió por su comportamiento, aunque él sabía la razón.
Apenas dieron las siete de la tarde Bokuto agarro sus cosas y se dirigió a la salida. Y apenas llego al marco de la puerta grito.
— ¡Hey, hey, hey! Mañana iré a la biblioteca — Él extendió sus brazos al aire, demostrando su alegría.
— ¿Qué le sucede? Primero no se deprime, después se va temprano y primero que todos, para después decir que va a ir a la biblioteca. Esto es muy raro — Hablo Tatsuki y los demás asintieron ante las palabras.
Bokuto pensaba que si se dormía temprano la vería más luego. Esa era su lógica pero, no le funcionó tan bien como esperaba.
Los pensamientos de él le recorrían de arriba a abajo, al final se durmió, pero no logro descansar.
