Midnight City

1.Uno

"El hombre de negro huía a través del desierto y el pistolero iba en pos de él "

Eso fue lo primero que leía mientras iniciaba mi viaje, era extraño y un poco curioso que estuviera en la misma situación que la frase dictaba. Iba hacia mi largo y desconocido destino.

He pasado toda mi vida viviendo en Albuquerque, Nuevo México, pero hoy inesperadamente me voy, así de simple sin más, nunca me había sentido tan vacío al tomar esta desición tan importante. Por eso es que leo a Stephen King, me reconforta y aveces pienso que al este inculcarme mis mayores miedos me hace expulsarlos como en este momento.

Sigo leyendo "El Pistolero" mientras que pienso en mamá, está muy sola allá en Albuquerque, solo me tenía a mi porque mi hermano (con el que nunca me entendí y conocí, de verdad,era muy pequeño) se encuentra en Nueva York; exactamente mi siguente destino. Y sobre mi padre, digamos que falleció hace tiempo, lo que dejó a mamá devastada, esta ni hablaba, sólo se quedaba mirando hacia el suelo, pensando.A menudo intentaba calmar sus pesadillas y otros temores nocturnos; hasta que volvió a ser la de siempre, espero que me perdone por cambiarme de oficina y además por irme de mi hogar. Espero, sobre todas las cosas que no caiga en depresión otra vez.

Giro mi cabeza del costado de la silla del avión que está en pleno vuelo, las azafatas van de un lugar a otro sirviéndole a los demás pasajeros de la nave como si fueran parte de la nobleza. Cuando siento un pequeño toque en mi hombro izquierdo.

-Perdona, ¿Este es el asiento trece-veintiuno?- dice un hombre alto, corpulento y de tez muy oscura.

Lo miro de reojo, casi como si estuviera entredormido.

-Si, claro - me fijo debajo de mi asiento- si, es aquí.

-Gracias - dice sonriendo.

Se sienta a mi lado automáticamente .Me quedo en silencio unos minutos leyendo "El Pistolero", hasta que el hombre rompe el silencio.

-Hey, compañero, ¿ese es el primer libro de "La Torre Oscura"?- Pregunta haciéndome enderezar del asiento,sobresaltado.

-No cabe la menor duda-respondo- Te gusta leer a King?

Este se pone la mano en la boca y se empieza a reír, observo que es joven. No pasará de los veintitantos como yo.

-Qué pasa?- le pregunto haciéndome sonreír y contagiándome la risa, un poco.

Este para de reír, pero sigue sonriendo.

-Mi padre lo hacía, hasta que nos dejó a mis hermanos y a mí-replica- siempre fui más de la calle.

Pienso en lo mismo que le pasó a mi padre años atrás. Antes de seguir hablándole, este me muestra su puño.

-Nunca fui de modales. Pero no nos hemos presentado. Mi nombre es Matt Keaton; Pero llámame K-Pax. Es un nombre poco peculiar.

Sonrío y choco mi puño contra el suyo. Me cae bien, es simpático.

Giro y vuelvo al silencio, pero este me vuelve a hablar.

-¿No me dirás tu nombre?- dice, levantando su ceja- ¿En serio, Negro?

Me dispongo simplemente a guardar el libro, cruzar los brazos y seguir la conversación.

-Me llamo John Walker -respondo- pero desafortunadamente no tengo un apodo genial y poco convencional.

-Buena esa-dice K-Pax, sonriente de nuevo-oye iré por un refresco.

K-Pax se levanta y va a por lo suyo, mientras yo me propongo solamente a mirar por la ventana. El cielo está oscuro, el sol ya se había escondido en el horizonte hace horas. Veo mi reloj de pulso y descubro que son las 10:40 pm, para mi sorpresa solo falta una hora para llegar a la ciudad, calculo que en medianoche.