Capítulo 8.

667 53 17
                                    

POV Anastasia.

Me quedé inmóvil tras lo sucedido. ¿El piloto Sebastian Vettel, el cuatro veces campeón del mundo, quiere pasar la tarde conmigo, con una corriente y usual fotógrafa como yo?, había una parte de mí que todavía no se creía lo sucedido, ¿estaré soñando despierta?, ¿cómo puede ser que esto me esté sucediendo a mí?, ¿estas cosas no suelen pasarle a las modelos, a las grid girls o a las famosas esas que salen por televisión? Me pellizqué enérgicamente en el dorso de la mano izquierda, a lo que respondí con un gesto de dolor. Vale, definitivamente estoy despierta y en el mundo real. Sentí la mirada de Mónica fulminarme por detrás, por lo que instintivamente me giré hacia ella.

- Vaya, vaya, ya veo que no soy la única que liga con los pilotos - se burló mientras tenía una de sus cejas enarcadas.

- No... no es lo que parece, sólo estábamos charlando - aclaré nerviosa y a la vez incrédula. Ni yo misma me creía lo que acababa de decir.

- Ya... - espetó la pelirroja con una media sonrisa - de todos modos, déjame advertirte que Seb no es ningún príncipe azul - dijo Mónica dejándome sin habla, ¿qué quiso decir con eso? - en fin, vayamos a enseñarle las fotos a mi madre a ver qué le parecen - propuso ella mientras recogía todo lo que habíamos montado esta mañana para la foto.

Yo me limité a asentir con la cabeza... era raro pero, todavía mi cuerpo estaba asimilando lo vivido con anterioridad, y por ello era casi incapaz de articular palabra. Se podría decir que me había comido la lengua el gato... O tal vez un alemán. Aunque no literalmente, claro.

(...)

Cerca del mediodía, Mónica y yo nos acercamos al despacho gigantesco de su madre, donde habíamos estado a primera hora de la mañana. Al situarnos enfrente de su puerta, acerqué la mano con la intención de depositar en ella un par de golpes con los nudillos, pero Mónica decidió abrir la puerta y entrar como si nada. Cuestión de confianza, supongo.

Al vernos, Teresa nos dio la bienvenida con simpatía, tomamos asiento y extrajimos las tarjetas SD de nuestras cámaras con la intención de enseñarle las fotografías que habíamos hecho a los pilotos en el circuito. Al pronto, las empezó a visualizar en la pantalla de su ordenador, y la giró parcialmente para que, a su misma vez, tanto mi compañera como yo pudiésemos ir observándolas. Yo, más que en las fotos, me fijaba en el rostro de Teresa con tal de averiguar si le estaban gustando o no, y ciertamente, su cara me retransmitía buena vibra. Aumentaba su expresividad a medida que iba pasando, y empezó a comentar por lo bajini lo que las sensaciones que les causaba.

- Vaya... están geniales... pero mucho... ¡oh, estas me encantan! - dijo efusiva y aumentando el tono de voz repentinamente, a lo que miré a la pantalla de forma inmediata. Se refería a las fotografías que había realizado yo personalmente - esta perspectiva desde el suelo me parece super rompedora, sencillamente fantástica - comentó alegre.

- ¿Te gustan? - preguntó enérgica su hija, deteniendo mi intención de hablar en esos momentos - pues ha sido idea de ambas, aunque Anastasia es quien ha hecho las fotos - y entonces la miré incrédula. ¿Qué? no es posible lo que ha dicho, ¡qué cara dura...!

- ¿De veras, Anastasia? - preguntó Teresa hacia mi persona con el fin de verificar lo mencionado por su hija. Solté un disimulado suspiro y no tuve más remedio que seguir la corriente. No me interesaba en esos momentos ponerme en contra de su hija... había mucho en juego, mi futuro laboral para ser exactos.

- Sí, así es Teresa - dije un poco a regañadientes - se nos ocurrió la idea a ambas y yo las ejecuté.

- Sabía que haríais un buen trabajo, sí señor - expresó mi jefa alegre. Si tu supieras... El talento artístico de su hija era, por el momento, bastante mediocre.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 18, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Fernweh: a tu lado (by your side) | Sebastian VettelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora