Mala Persona

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Chan llegó temprano ese día.

Sus compañeros y profesores seguían sorprendidos por su cambio, y algunos no se lo creían del todo.

Tenían sus razones de no hacerlo, pero eso no evitaba que se sintiera mal cuando las personas aún huían de él. 

—Dámelo.

Levantó su cabeza al escuchar esa voz familiar, y se encontró con una escena que ya había visto antes, pero esta era la primera vez que se le retorcía el estómago con disgusto y decepción.

Su amigo, Hansol, quitándole el dinero a un muchacho más joven.

Sus amigos solían hacerlo cuando necesitaban o querían comprar algo, el mismo Chan también ha sido partícipe de dichas acciones.

Frunció su ceño al notar como ese chico desconocido temblaba ligeramente, mientras le extendía a Hansol su billetera.

Lo que hubiera hecho anteriormente sería solo seguir de largo o unirse al mayor para burlarse de aquel niño.

Pero en eso recordó a Jun.

Últimamente el mayor rondaba sus pensamientos cada vez que se portaba mal o quería hacer algo que sabía no estaba bien. No como una conciencia. Era más que todo imaginar que pensaría el mayor si viera lo que estaba haciendo. ¿Estaría de acuerdo o decepcionado?

Y mirando la situación a mano, ¿No sería Jun la persona que interfiriera con esa clase de abuso?

Está muy seguro que su tutor/amigo no permitiría que le hicieran daño a alguien.

Sin pensarlo mucho, se dirigió hasta esos dos.

—¡Hansol!— Llamó, captando la atención de su amigo, quién le sonrió- ¿Qué crees que haces?

—Chan— Saludó el más alto, sacudiendo en una mano la billetera— Hoy me toca pagar el almuerzo, así que mi amigo me estaba colaborando.

El rostro asustado del más joven, y el burlón en su propio amigo, le hizo sentir mal.

¿Realmente así se comportaba habitualmente?

En un arrebato, le quitó el dinero a Hansol, y se lo entregó al otro presente.

—Toma, vete a tu clase— Le dijo, haciendo que los demás le miraran con ojos muy abiertos.

—Gra...gracias...

Una vez quedaron solos, Hansol le miró desconcertado, con una ceja alzada.

—¿Qué fue todo eso, Lee Chan?— Preguntó, y se cruzó de brazos.

—¿Qué?— Inquirió, imitando la pose de su amigo— Le estabas robando al pobre chico, yo solo le devolví su dinero.  

—¿Y eso que?

—Eso está mal— Respondió con obviedad, y se sintió extrañado al tener que explicarlo— Literalmente le estabas robando.

Ahora si, el americano le miraba como si hubiera perdido la cabeza.

Chan sabía que ir al psicólogo le estaba haciendo bien. Ahora si sentía remordimiento por malas acciones que él sabe que hizo en el pasado, y no quiere que otros las repitan.

Muchas mañas y actitudes las aprendió de sus amigos.

Jeonghan, Minghao y Hansol.

Ellos eran muy importantes para él, y los apreciaba. Pero ya no podría tolerar su abuso por las demás personas, desde ahora, ya no permitiría que ellos le influenciaran en lo que sabía era correcto y no.

GOOD BOY [Juno]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora