Mi miedo , mi salvación

¿En qué momento?

Santo Cristo de todos los momentos horrible en la vida, ¿pero que acaba de pasar? Salí corriendo de la cafetería tan rápido que hubo varias veces en que pensé que se me iba a desprender el pie, puede sonar exagerado, pero los tacones caros no están en mi lista de zapatos cómodos.

Menos mal que me había comprado el agua, porque de lo rápido que baje termine hiperventilando de una manera descontrolada, como habíamos acordado ahí estaban Liza y Luisa en la fuente hablando con unos chicos, que principalmente de iban por Liza que les seguía todo el cuento, mientras que Luisa se limitaba a hacer comentarios cuando era necesario y a hablar con un chico de vez en cuando.

Cuando por fin logre ir a la fuente estaba todavía con la respiración agitada, pero pude controlarla en el camino, uno de los chicos que estaba hablando con Liza se giró hacia mí y me saludo con una gran sonrisa a la cual correspondí muy educadamente.... Nah, era uno de mis amigos de Colombia, habíamos sido vecinos desde pequeños y nuestras madres eran amigas desde el embarazo, por lo cual crecimos siendo casi hermanos.

- Solo te diré una cosa, tienes vibras extrañas y eso me da mala espina - me dijo Steve dándome un codazo en la costilla.

- Créeme que me han pasado cosas muy raras en mi vida, pero esta no estaba en la lista de posibles momentos que me podían pasar - le dije entre jadeos porque aún se me dificultaba respirar.

Sip, en definitiva tiene más suerte el chucho que tu amiga

Ay, por favor conciencia , deja de ser tan chismosa, a veces deberías bajarle dos a tus palabritas sin sentido.

- Ok tengo varias teorías con respecto a tu cara ahora - me dijo divertidamente - o te asustaste por nada, o, se te olvido apagar el gas de tu apartamento y ahora lo van a encontrar prendido.

Suspire antes de ponerle mala cara - Primero que nada, yo no me asusto por nada, segundo, yo si apago el gas porque no tengo un retraso mental tan grande como para sacrificar mi casa de una manera tan sin sentido.

- Ok, yo solo hacia teorías, no te enfades chikistriquis - se rio ampliamente de una manera áspera, que a la mayoría de francesas de mi instituto les encantaba.

- Búrlate, y le digo a tu mamá que de chiquito tú fuiste quien le daño la pared - sonreí de una manera malvada a lo que él puso una cara de terror y puso las manos en señal de rendición.

- Ey, ey, pero estaba bromeando, además yo no lo hice - me guiño un ojo y me paso el brazo por los hombros a lo que yo acepte el abrazo.

- Aja, y yo no acabo de besar a un chico por equivocación.

Pero como es que se puede ser tan distraído para esta bobada

No puede ser.... NO PUEDE SER , PERO QUE ACABO DE HACER , por favor que sea una broma y solo sea yo hablando en mi mente, esto no me puede estar pasando a mí, VOY A MORIRR.

- ¿Que tú qué? - me miro con los ojos como platos, empezó a reírse tan fuerte que se puso rojo, tanto que pensé que iba a estallar.

A diferencia mía, él era blanco con los ojos color miel, que, con la luz del sol le brillaban de una manera hermosa, debo admitir que en el algún momento pensé sentir algo por él, pero luego me di cuenta de que no eran sentimientos si no una confusión, pero eso había pasado hacía ya muchos años y nunca se lo conté.

- Pe-pero, en que mom-mento ha pasado eso - me miro mientras recuperaba su respiración con una mano en su estómago.

- FUE TODO MUY REPENTINO - le dije mirándolo hacia arriba ya que era demasiado alto, para hacerles una idea: Yo 1.58, Steve 1.90. Sip, un completo gigante y guardaespaldas.