~Sweet Coffe~ (Cha Eunwoo)

☕08☕

—¿Que no lo ves Eunwoo?, Te ame. Pero te fuiste y me dejaste por ella.

—Sahaira déjame explicarte.

—Señor Lee, ¿Que desea comer?.

—Zoé yo...

—¡Ya ves a ella si le contestas!, ¡¿Y a mi?!, ¡Un año Eunwoo!, ¡Un año que te espere!.

—Señor Lee ¿Desea algo más?, ¿Un beso en los labios?.

—¿La besaras Eunwoo?, ¿Y los años que llevamos siendo pareja?.

—Sahaira nosotros no...

—¡Callate!, ¡Me voy!, ¡Adiós Eunwoo!.

—¡Sahaira esperaaaaa!.

—¡Señor Lee y ¿el beso?!, ¡Señor Leeee!.

—¿Tengo algo en la cara señor Lee?—volvio en si al escuchar la voz de Zoé.

No respondió.

—¿Está rico el desayuno?, Pensé que extrañaría Corea por esa razón le pedí a mi hermana que hiciera Kimchi, y compré ramen—¿Porque le sonreía de tal manera?—Debe comer señor Lee, anoche no ceno.

—Gracias—con aquel sabor amargo en su boca comenzó a comer.

Miraba con determinación a Zoé Pacheco, su traductora. Estatura, 1:60, cabello corto, usa anteojos, tiene una voz chillona, preguntona, no guarda silencio, no puede estar quieta, le gusta el K-Pop. Algo distraída y un poco torpe, recordando el pequeño incidente de hoy en la mañana.

No entendía porque esa pequeña chica estaba encima de ese mueble intentado tomar algo que no estaba segura que era, dió un mal paso provocando que su equilibrio fallara. Si no fuera por el ahora mismo estará en el hospital.

Claramente no podía ser ella.

Luego venía a su mente Sahaira. Estatura, 1:70, cabello largo, ojos color cafés oscuro, voz de angel aunque claramente descontando cuando canta, no es preguntona, algo dramática pero nada más haya de lo normal, gustó de música, clásica. Alguien con quién podría estar hora y horas leyendo un libro que estaría sin hacer ruido y quieta. Algo que Zoé no podría.

Si.

Zoé no era Sahaira.

Que tonto fue al pensar en algo así.

¿O no?.

—¿Que haremos hoy señor Lee?, ¿O mejor prefiere descansar?—¿Porque estaba tan interesaba en su vida?.

Sahaira hacia lo mismo.

—No haremos nada, así que por favor si no se irá. Guarde silencio, necesitó trabajar—Zoé frunció el seño ante las palabras del señor Lee.

¿Acaso había viajado hasta aquí, para trabajar?.

Genial.

—Esta bien señor Lee, como usted deseé—Dongmin frunció el seño ante tal respuesta.

¿No se pondrá de necia otra vez?.

¿No le preguntara porque?.

¿Estaba enferma?.

No dijo nada, simplemente vio como Zoé colocaba sus audífonos y comenzaba a escribir en un libro, especialmente una libreta. No le tomo importancia y siguió trabajando.

¿Quien trabaja en un viaje?.

Yo no lo haría, si voy aún lugar diferente es para divertirme.