Esponjoso problema (Re Subido)

Lección 16 Los celos no traen fortuna

Dazai era consciente de que después de años de coquetería e infidelidades le seguirían cobrando factura en su presente. 

Era su culpa que el apasionado y poco conocedor del amor, Chuuya se hubiera vuelto el nervioso celoso que hoy día tenia. Durante su tiempo en la Port Mafia fue incansablemente mujeriego, no dudaba en seguir unas caderas o senos bonitos, la mayoría de las chicas no tenia la culpa, desconocían que el castaño de hecho tenia pareja. 

Como si no pudiera ser peor también seguía a los hombres, sobre todo a los pelirrojos, el mismo Oda había sido su mayor amante por años, todos los rumores y aventuras de Dazai tarde o temprano llegaban a oídos de Chuuya, quien después de algunas discusiones dejo de pelear y conformarse con ser la pareja oficial de Dazai a sabiendas que incluso las mujeres del burdel se reían de el porque compartían al mismo hombre. 

Esos años habían moldeado y carácter paranoico y celoso de Chuuya, quien actualmente se seguía preocupando y molestando cuando Dazai hablaba con una mujer....u hombre lindo. Dazai no podía culparlo o reprocharle, llevaba dos orgullosos años centrándose solo en el, pero no podía borrar fácilmente el que lo había engañado con media Port Mafia. 

- Lo que a mi me sorprende es que no tengas todas las ETS en ti bastardo- anuncio Chuuya atacando su helado de frutos rojos con la cucharilla, su pareja se lo había comprado como parte de su paseo por el parque, pero se había puesto muy molesto cuando Dazai charlo animadamente con la señorita que les despacho. 

- Cariño...solo pedí nuestros helados, le dije por favor y gracias. Mera cortesía- respondió Dazai soltando un largo suspiro y recordándose que todos los celos que sentía Chuuya eran directamente su cosecha. 

- Le sonreíste- 

- No puedo pedírselo de mala forma. Seria muy grosero- el detective suspiro deseando poder agarrar a bofetadas a su "yo" del pasado - Si te molesta tanto la próxima pide tu las cosas, yo estaré detrás de ti callado y admirándote en silencio- ofreció Dazai tomando un bocado de helado. Desde entonces lo único que podía hacer era hablar con Chuuya, aclarar cualquier tipo de malentendido y proponerle soluciones. 

El pelirrojo suspiro con pesar buscando la mano de su pareja quien no dudo en depositar un beso en sus nudillos. 

- No quiero ser tan posesivo....o celoso, pero no puedo evitarlo- 

- No es tu culpa, fueron mis actos los que te han llevado a desconfiar. No se ni como seguimos juntos a este punto. Pero voy en serio contigo y no quiero ser como antes- con rapidez, se permitió darle un beso en la sien. 

- Haré lo que pueda por reparar nuestra relación, confía en mi ¿si?- 

- Confió en ti, aun cuando haz pisoteado mi confianza lo hago, ciegamente- fue lo que respondió Chuuya mostrando una sonrisa melancólica. Fue difícil ser la burla de varios compañeros suyos, aun mas cuando Dazai desapareció de la organización. Los rumores en aquel entonces decían que se murió, que se fue a otro país, que se suicido con su amante Oda Sakunosuke o que se fue a perseguir a su verdadero amor. 
"Ni siquiera eras un juego para él", "Se harto finalmente de ti y huyo", "Sakunosuke era su gran amor y murió junto a él, dejándote solito". Eran varias de las cosas que había tenido que soportar a la partida de Dazai, junto a su propia ira por el abandono y la explosión de su auto.

Lo cual era una tontería porque él sabia perfectamente que Dazai se fue porque se le dio la gana. Dazai se harto de la mafia después de ver morir a su mejor amigo por las tretas de Mori.
Chuuya sabía, que su hogar era la Port Mafia, pero no para Dazai. Su novio necesitaba estar lejos de las emociones negativas que rodeaban la mafia o terminaría por volverse loco.