Jeno (Nomin)

Capítulo 8

Jeno caminó hacia atrás, mientras conducía a su compañero a la cama. El olor de Jaemin le decía que estaba inseguro, incluso asustado. Era por este loco mundo en el que él vivía. Tenía que serlo, y estaba decidido a mostrarle que las montañas no eran el lugar duro y violento, que su compañero pensaba que era.

La familia Lee tenía muchos buenos momentos, mucha risa, amor y lealtad. Estaba seguro de que Jaemin podría ser feliz aquí, si sólo su pareja lo intentaba.

Pero por ahora, quería mostrarle a Jaemin lo mucho que el ser humano significaba para él, para darle a su pareja una razón para querer quedarse. En vez de poner a Jaemin en la cama, se movió más allá y se dirigió hacia el asiento de la ventana. Se sentó primero, luego a Jaemin entre sus piernas. Desde este ángulo de la casa, no se veían cadáveres ni piezas de criaturas, sólo la nieve, los bosques y la brillante pálida luna.

—No puedo esperar hasta la primavera—Dijo.—Las montañas parecen cobrar vida, con vibrantes colores, y el olor... es increíble. Nadamos en el lago, hacemos barbacoa, y hogueras. Es como un mundo totalmente diferente, cuando la nieve se derrite y la cálida brisa regresa.

—Suena maravilloso—Dijo Jaemin. —Pero todavía hay muchas amenazas.

—También hay en el mundo humano—Señaló. —Robos de coches, tiroteos, allanamientos de casas. Tu mundo es igual de peligroso, Jaemin. Pero al menos aquí, conmigo, estarás protegido.

Pasó la mano por el brazo de Jaemin, y este se volvió, presionando su cara contra su pecho. Continuó acariciándolo, necesitaba tocar a su compañero, oler su aroma y tomar consuelo de su ligero peso contra él.

—Pensé que podría manejar esto—Dijo Jaemin. —Me dije que una aventura con un tipo rico, no sería tan malo.

Una de sus cejas se alzó. —¿En serio?

Jaemin se rió entre dientes. —Sólo estoy siendo honesto.

—¿Y ahora? —Movió su mano del brazo de Jaemin a su cadera, deslizando sus dedos sobre la suave piel de su compañero. Mientras su mano viajaba, la polla de Jaemin se endureció.

—Un alimentador puede arrancarte la garganta.

—Una bala también puede acabar contigo—Dijo. —Lo único que te pido, es que nos des una oportunidad. Nuestro hijo o hija, está creciendo dentro de ti, y sé que eso no sólo es aterrador, sino alucinante—Apoyó su mejilla, en el cabello de Jaemin. —Pero tengo la sensación, de que serás un padre increíble.

—No como mi padre. —Dijo Jaemin y oyó el tono de tristeza en su voz.

—Tampoco como el mío. —Se sentó allí y le dijo a Jaemin sobre la crueldad de Hyunsuk, su locura, y su muerte. Cuando terminó de hablar, Jaemin lo miraba con horror en sus ojos.

—Mi papá es un verdadero idiota, pero nunca me golpeó.

— ¿Y tu madre? —Preguntó.

—Mi mamá se fue, cuando tenía seis meses. Mi padre me culpó. Creo que es por eso que se convirtió en un alcohólico, porque no podía superar su partida, o el hecho de que estaba atrapado criándome. Juega como loco y folla todo lo que no está clavado al suelo, y siempre me miraba con odio en los ojos.

—Maldición, eso es realmente un fastidio—Dijo. —Quiero decir, ¿cómo demonios culpas a un niño, por una decisión tomada por un adulto? No fue tu culpa que tu mamá se fuera. Esa era mierda entre tus padres, y tu padre no debería haber puesto esa culpa en ti.

Jaemin resopló. —¿Ambos tenemos padres jodidos y crees que lo podremos hacer mejor?

—Sé que lo haremos—Lo levantó y ayudó a Jaemin a montarse en su regazo. Pasó las manos por la espalda de este y las apoyó justo encima del culo de su compañero. —No nos enfoquemos en de dónde venimos, sino a dónde vamos, ¿de acuerdo? Este será un nuevo comienzo para los dos.