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Sakura permaneció inmóvil, ella estaba incrédula ante el hecho de que Itachi Uchiha un hombre aún más cruel que Sasuke la hubiera rescatado de las garras de una fría muerte.

—No...no puede ser verdad. — dijo al tiempo que miraba nuevamente la capa que yacía sobre si cuerpo desnudo...y entonces hizo eco en su mente, desnuda...ella estaba completamente desnuda, presa del pánico ella dirigió una de sus manos a su zona íntima, no sabía mucho del tema pero recordaba bien lo que Ino solía decir, el dolor después de la primera vez y cierta incomodidad.,

¿Eso era lo que ella esperaba encontrar al tocarse?

Suspiro aliviado cuando no noto ninguna molestia, quien fuera el que la salvó no había abusado de ella.

Sakura recorrió la cueva con la mirada en busca de su ropa, o lo que ella llevaba tiempo catalogando como ropa, una bata sumamente grande, sucia y vieja que cubría su cuerpo hasta un par de dedos abajo de las rodillas, Sakura recordó entonces toda la ropa linda que su madre solía comprarle siempre con el símbolo de los Haruno bordado en la espalda.

Una lágrima emanó de sus orbes, extrañaba a sus padres, extrañaba su vida, añoraba volver a la aldea prontamente, resguardarse en los brazos de sus padres y de alguna forma superar el trauma que Sasuke evidentemente ya había creado en ella.

Cómo pudo se puso de pie, a país cortos y lentos ella comenzó a buscar en aquella cueva algo con que cubrir su cuerpo, sonrió al ver una mochila, rápidamente se acercó y comenzó a sacar lo que había dentro, su felicidad aumento cunado vio algunas barras de cereal, dos botellas de agua, un kunai, y un conjunto de ropa que costaba de un pantalón y una sudadera, rápidamente se vistió con las prendas, las cuales le quedaban sumamente grandes, también encontró calcetines, tenía algunas heridas en la planta de los pies así que le dolió un poco colocárselas, se comió una barra, guardo las cosas dentro de la mochila y volvió a colocarse la capa, ella se aferró con fuerza a la tela, para después dirigir su mirada a esta misma, la capa era enorme, o tal vez ella era diminuta en comparación al hombre a quien pertenecía la prenda.

Después de descansar un poco, ella recordó lo que dijo el hombre que acompañaba al Uchiha, pensó en Sasuke, no sabia cuanto tiempo estuvo inconsciente, aun estaba bastante débil, si Sasuke la estaba buscando seguramente la encontraría. No tenía oportunidad.

Sasuke la encontraría y volvería a encerrarla en una estúpida habitación por lo que le quedará de vida e incluso hasta que su cuerpo putrefacto fuera devorado por los parásitos provenientes de su mismo cuerpo.

Sakura comenzó a reír después de que una absurda idea cruzará por su mente provocando un eco de su risa el cual recorrió toda la cueva, y de la nada sus lagrimas comenzaron a salir, fue como si después de tanto aguantar su mente de la nada hubiera colapsado. La muerte de Naruto, los tratos y palabras de Sasuke, el acoso del tipo con los dientes afilados. Sakura se sentía vulnerable, no tenía poder alguno, era tan débil.

Su vida había cambiado por completo en un abrir y cerrar de ojos.

Ella pensó en sus padres, y en lo mucho que le gustaría regresar a la aldea pero al mismo tiempo fue realista, estaba muy débil y no tenia ni idea de en donde estaba, afuera de la cueva estaba obscureciendo, hacia frio, y lo único que tenia para comer eran dos barras de cereal.

-Debí esperar a Sasuke. - a pasos lentos y tambaleante Sakura se acerco a la entrada de la cueva, el aire helado golpeo su rostro.

Ella dejo caer la capa, y continúo caminando perdiéndose en la oscuridad, Sakura había tomado una decisión, ella se entregaría a la muerte, así que solo caminaría hasta que el cuerpo se lo permitiera, cerro los ojos pues de nada servía llevarlos abiertos, la obscuridad era abrumadora. Lo mismo daba ir por ahí con los ojos cerrados.

Sakura comenzó a sentir sus manos entumecidas debido al frio, y de la nada los pies mojados y el piso resbaloso, pensó que tal vez había llegado a la orilla de algún rio, podría morir ahogada, así que ella continuo hasta que agua helada le llegó hasta la cadera, y después hasta el cuello.

Sakura se sumergió y se dejo llevar por la corriente después de haber dado una ultima bocanada de aire. Pensó en que la muerte no era tan mala, pensó en su vida, en todo lo que había hecho y lo que no. Y al final de todo, pensó en Sasuke, en sus primeros días siendo equipo, en las risas de Naruto, en el bosque de la muerte y en como Sasuke le arranco los brazos a ese tipo que la golpeo por intentar protegerlos.

Sakura pensó en todo el amor que le tenia al Uchiha, y en como no pudo salvarlo de la obscuridad.

Sakura soltó todo el aire y comenzó a tragar agua, esta dispuesta a ahogarse, cuando sintió como algo la saco del agua, después solo vio fuego rodearla.

-Sasuke.- dijo al ver que lo que la había sacado del agua era AODA, la invocación de Sasuke.

Después un golpe en la nuca y mas nada.

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Con pesadez Sakura abrió los ojos, la garganta le dolía, intento moverse, pero le fue imposible, ella volvió a cerrar sus ojos, estaba en un estado de seminconsciencia, donde iba y venia de sus sueños a la realidad.

Ella no podía distinguir lo que era real y lo que era un sueño, llego al punto de dejarse llevar por sus alucinaciones y el dolor de la realidad.

Fue así que entre ese ir y venir ella se aferro a los labios de Sasuke después de que este se acercara a ella, y a diferencia de los besos que el le había dado, este fue diferente, y es que fue justo como siempre fantaseo que seria, un beso lento, tierno, cálido, el corazón de Sakura latió como solía hacerlo en el pasado, esos sin duda era parte de un delirio y es que después de eso un fuerte dolor en su cabeza la hizo desear la muerte.

¿Cuánto tiempo llevaba en ese estado?

Ya no lo sabía, es más comenzó a creer que había muerto dentro del rio y todo lo que pasaba a su alrededor era parte de un castigo eterno por quitarse la vida. Y es que nada de lo que pasaba tenía sentido.

De pronto un pinchazo en su brazo, un tubo en su garganta, electricidad recorriendo su cuerpo intentando reanimar su corazón, dolor en su cabeza, y todo se repetía, una y otra vez.

-Muerde con fuerza. - Escucho la voz de Sasuke, después sintió como le metían a la boca lo que parecía ser un brazo, seguro eso no era real. No tenía sentida. - Muerde.

Y ella si lo hizo, el sabor de la sangre en su boca le provocó asco, pero al mismo tiempo comenzó a sentir como la energía volvía a ella poco a poco.

De la oscuridad a la luz, y ella volvió.

Estaba recostada sobre una cama, las sabanas eran de color blanco y tenían una que otra mancha de sangre, Sakura se incorporo lentamente, se mareo un poco pero ya no se sentía tan débil como cuando despertó en la cueva después de que Itachi la salvara, Sakura recorrido el lugar con la mirada, parecía haber vuelto a la guarida, solo que esta habitación era diferente pues estaba llena de artefactos médicos y cosas de medicina, se quejo de dolor cuando estiro su brazo y es que la aguja de la canalización la lastimo, al parecer le habían puesto un suero, además que estaban monitoreando sus signos.

Sasuke la había salvado.

Y entonces Sakura se tocó los labios, recordó los besos de Sasuke, parecía haber sido real, podía sentirlo, de pronto la puerta se abrió, Sasuke ingreso, su mirada se fijo en Sakura.

-¿Qué intentabas hacer?-Cuestiono con voz ronca, Sakura tenia miedo, el estaba muy cerca de ella.

-Quería morir, quería que fuera mi elección.

-Te he dicho que solo yo decidiré cuando, como y donde morirás.- Sasuke la tomo de las mejillas, fue un agarre firme.- Mírame cunado te hablo.

Sakura no quería mirarlo,

-Sakura....

Ella obedeció, lo miró fijamente.

-Si no quieres que lo intente nuevamente, entonces no me dejes sola, no quiero estar sola.-Dijo en un susurro.

Sasuke sonrió, ahora ella le pertenecía, de una extraña y enferma forma, ella le pertenecía.

Puccalovelin. 

EstocolmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora