Capítulo 4

781 40 0
                                    

Después de que su padre se fuera, el niño se dedicó a limpiar y ordenar su pequeño "hogar", limpiaba la manchas de su propia sangre en el piso, tratando de moverse lo menos posible, la heridas seguían doliendo y palpitaban bruscamente, esto asustaba a Gael por la ignorancia de la razón de esto.

Ya casi terminaba de limpiar pero, el repentino ruido de risas y gritos infantiles le hicieron dirigirse a una ventana y observar a los pocos niños de su comunidad jugar risueños, eso mataba de la envidia a Gael, su padre nunca lo dejaba salir de esas cuatro paredes, algo que al pequeño no le gustaba pero, tampoco quisiera desobedecer a su progenitor.

El niño se quedó embobado, viendo a los infantes correr entre risas y gritos de alegría sobre la calles de ese lugar, pasaron los minutos y él seguía viéndolos con una sonrisa casi invisible sobre su angelical rostro.

Al poco tiempo terminó de limpiar todo, esperaba que su padre le dijera lago grato por dejar la casa limpia, aunque eso era mucho pedir, ya con todos sus deberes hechos, fue hacia la sala de estar y encendió la TV, puso sus dibujitos favoritos y se acomodó en el sofá, esperando la llegada de su Eric.

El tiempo pasó y su padre había llegado, acompañado de otros hombres, los cuales el niño supo eran sus amigos, estas personas desconocidas para el pequeño traían consigo unas bolsas plásticas, estás contenían botellas de vidrios, claramente era licor, pero Gael, a causa de su ignorancia de niño no logró comprender el contenido presente en ellas.

El niño se levantó del sofá y fue hacia la puerta con una sonrisa, para recibir a su padre.

Los hombre vieron detenidamente a Gael, eran dos, uno era Martín, un tipo de unos 28 años, robusto y alto, el otro era Emilio, de la misma edad de Martín, delgado y estatura promedio, a la par Eric de este se acercó al niño de manera amenazante.

_Ve a mi habitación, enseguida y no salgas de ahí, hasta que yo lo diga, entendiste?_ dije Eric, en voz baja pero, sin dejar de soñar autoritario, agarrando fuertemente al menor de hombros.

Gael asintió agitadamente, corriendo hacia la habitación del mayor, estaría mintiendo si dijera que no tenía miedo, el infante estaba asustado, podía sentir lo irritado que estaba su papá.

El niño tenía hambre, no sabía cocinar y el cereal se le había acabado, no había comido nada desde hace 3 días y ya no aguantaba, tampoco es como si su alacena estuviera llena.

Escuchaba las risas roncas y las voces gruesas de los amigos de su padre. El niño se llevaba aguantando la ganas de ir al baño un buen tiempo, no estaba seguro de poder aguantar más.

Sin aviso alguno, un líquido en tonos amarillentos empezó a salir del pequeño, mojando la cama en donde se encontraba, el líquido dejo de salir del interior de Gael y este estaba notoriamente asustado, había mojado la cama de su padre y sabía que no se salvaría de la paliza que este le daría.

Gael empezó a llorar incontrolable, su padre se molestaría con él, pasaron los minutos y el menor ya estaba durmiendo plácidamente en aquella cama, el tanto llorar lo había dejado agotado y con dolor de cabeza fuerte.

Ya eran altas horas de la madrugada, los amigos de Eric se habían marchado y el mayor se dirigió a dormir a su habitación, sin recordar que un pequeño cuerpo se encontraba reposando ahí, sin cuidado se recostó en la cama, sintió el cuerpo de su hijo a la par que el colchón mojado, enseguida dedujo lo sucedido y su ira subió de manera inhumana y el alcohol que consumió ayudaba esto.

Gael al sentir movimientos fuertes despertó, recordando al instante lo que había hecho, el pánico inundó su tembloroso cuerpo al ver a su padre, el cual tenía una cara indescriptible, eso causaba terror en el niño.

Eric tomó al pequeño del cuello acercando la cara de este a la de él, el mayor apretaba demasiado fuerte el cuello del menor, Gael ante tal presión en su garganta puso sus manos en el brazo del Eric tratando de alejarla de su cuello, el más grande respiraba fuertemente por la boca, llegando a ser captado el olor a licor que desprendía su cavidad bucal.

El primer golpe llegó

_Papi, por favor, ¡perdóname!_ decía el menor gritando horriblemente, recibiendo los brutales golpes de su padre, dejando su rostro y cuerpo lastimados, y eso excitaba a Eric.

_Papá, ¡por favor!, ¡¡te lo ruego!!, ¡para, me duele, papi!_ gritaba el más débil rogando que parara de agredirlo.

_Esto es lo que merecen los niños malos, Gael, has sido un niño muy malo y a papi no le gusta_ decía Eric, desabrochandose el pantalón, mirando al menor de manera lasciva.

_Papi, ¡perdóname!, por favor, papi, seré un niño bueno, te lo prometo, papi_ decía Gael, arrodillado pidiendo piedad a su padre.

_Está bien, mi niño, los niños buenos obedecen a sus papis en todo lo que ellos le piden, Gael_ dijo el mayor empezando a desprender de sus prendas a el menor, manoseando el pequeño cuerpo.

Is This Happiness? (gay) (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora