Capitulo final: El comienzo de todo.

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Después de unos  meses de salir oficialmente con mi Sasuke, se lo dije a mi papá, el se lo tomo realmente bien, no paraba de decir que siempre lo sospecho, aunque era una vil mentira. Desde entonces, estoy con mi azabache preferido. Llevamos 5 años juntos, ya terminamos nuestras carreras y ahora nos encontramos trabajando, claro que cada quien en algo diferente, pero eso no nos afecta en nada, pues sabemos que solo tenemos ojos para el contrario. Pero eso no es suficiente, no para mí, quiero sentir a Sasuke mío de todas las maneras. Así que voy a dar el siguiente paso. ¡Le voy a proponer matrimonio dattebayo!.

- ¿Estás loco? - Decía directamente mi mejor amigo Shikamaru, desde la secundaria era muy directo.

- ¡Para nada! ¡De verdad le voy a proponer matrimonio a Sasuke! ¡Es mi destino estar con el, por el resto de mi vida! ¡La vida misma me lo pid- El amigo del rubio lo detuvo antes de que esté hiciera una tontería.

- Bien, ya entendí... ¿Cómo se lo vas a proponer? Digo el cocina, el hace el aseo, el es el primero en todo prácticamente.

- Shikamaru, no me estás ayudando en nada. Pero tienes razón, hay algo que puedo hacer. - El otro pelinegro inclino su cara en signo de interrogación. Y el rubio continuo. - Lo voy a llevar de vacaciones, hace mucho que no salimos juntos, por el trabajo o por proyectos de Sasuke. Entonces lo llevaré por dos semanas a Wawai, y con una cena romántica le pediré que se case conmigo. - Decía el rubio muy segurp de si mismo.

- Debo de admitir que es un buen plan, te felicito por fin usaste ese pequeño cerebro que tienes. - Decía burlonamente el pelinegro.

- Si lo se gra- Y de un grito llamo la atención de muchas personas, entrando en cuanta lo que acaba de decir su mejor amigo. - ¡¿Que dijiste?! ¡Yo siempre uso mi cerebro para que sepas! - El rubio se paladecio al ver la hora y recordando que el azabache le dijo específicamente que no llegara tarde. - Maldición, debo irme Shikamaru. -

- Bien, adiós. - "Esos dos, han crecido mucho desde entonces...". Fue lo único que se le cruzó por la mente al azabache de cabello largo.

Ya en casa, dudo de entrar, pues no había llegado tarde, pero sabía que se encontraría con un muy enojado azabache. Pero no fue así, entro y todo estaba oscuro, se apresuró, y lo que descubrió fue un camino de velas, una mesa grande con comida esquista. Con su comida favorita y la del azabache. El último estaba vestido de traje y tenía una rosa en la mano, este parecía muy nervioso, y se decidió hablarle.

- ¿Sasu? ¿Que pasa?...- Iba a seguir preguntando pero el azabache lo detuvo.

- Eres un Dobe, un despistado lo suficiente para creer que no te correspondía en secundaria, eres un hiperactivo, y siempre haces todo sin pensar dos veces, pero... - El rubio al recordar la "confesión" del azabache en la azotea se ruborizo y más ahora que estaba pasando lo mismo justo ahora. Se puso nervioso cuando vio como el azabache se arrodillaba ante el, esto solo hizo que pensara una sola cosa, en su azabache pidiéndole matrimonio, Shikamaru tenía razón siempre era el primero en todo, pero eso no le importaba le gustaba que su azabache por su personalidad, siempre fuera el quien decidiera un paso muy importante. - ¿M-Me concederías casa-arte conmigo, Dobe? - Pero se puso nervioso y algo triste al no recibir una respuesta, pero se sorprendió al ver qué el rubio también se arrodillaba a su misma altura.

- ¿Sasuke Uchiha, me harías el honor de casarte conmigo? - Dijo con una hermosa sonrisa, al saber más o menos la respuesta. Las lágrimas comenzaron a caer de lo hermosos ojos onix del azabache.

- ¡Por supuesto Dobe! - Dijo abalansandoce a su ahora pareja de por vida.

- Entonces también acepto casarme contigo Teme. - Dijo también dejando salir algunas lágrimas.

Esto no era el final de algo, apenas era el principio de todo, desde unos jóvenes enamorados que no decían lo que sentía por miedo al rechazo, hasta unos adultos enamorados que decidieron juntos estar por el resto de sus días, que sabían que iba a pelear, que iban a tener malentendidos, pero también sabían que cada vez que peleaban iban a regresar unos a otros. O esas son las últimas palabras de está historia.



Mi primer amor (Narusasu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora