My Sugar Daddy [Goyuu]

~Comienza El Juego~

La escuela era algo que Itadori odiaba con todo su ser pero también era aplicado en todas las materias. Tal vez sus calificaciones no eran perfectas pero estar por encima de la media era excelente.

Todos los días los pasaba al lado de Nobara y su novia Maki así como Junpei, su mejor amigo. Aunque las chicas cursaban carreras distintas, en las horas libres se paseaban por el campus o se juntaban para almorzar mientras que Junpei asistía a las mismas aulas que Itadori.

La hora de salida se marcaba a las 3 pm. Pero la mayoría de los estudiantes se quedaban hasta cerrar para aprovechar al máximo la gran biblioteca que les ofrecía la facultad.

En ese pequeño grupo sólo Maki podía pagar la universidad, los tres restantes contaban con distintas becas y a pesar de ser el año que era, aún existían personas que llegaban a verlos con cierto repelus pero a los chicos era lo que menos les importaba.

-¿Entonces conociste a otro hombre? -a Nobara le encantaba escuchar el día a día de Itadori, y él amaba hablar con ella, ambos vivían por y para el chisme cosa que Maki y Junpei no entendían muy bien.

-No sólo es "otro hombre" es "El hombre" -con una sonrisa que no podía borrar ni cuando comía.

-¿Y de quién se trata esta vez?

-Bueno, no sé si deba decirlo pero él tampoco me pidió discreción... -pensó unos momentos pero daba igual, eran sus amigos, nada saldría de ellos- Es Gojo Satoru.

Maki y Junpei mostraron su asombro cuando escucharon el nombre pero la chica de cabello café parecía desmayarse de la emoción.

-¡Mierda! Tienes que decirme como conoces a todo ese tipo de gente -sacudiendo a Itadori de un lado a otro.

-Bueno, solo sucede jaja

-Nunca será un "Solo sucede" Nanami y Gojo manejan una de las revistas de moda más influyentes del país -acercando el rostro del chico a ella bruscamente- ¿Sabes cuánto impacto tendrían mis diseños si son publicados ahí?

-¿Mucho? -apenas y pudo formular pues sus mejillas eran apretadas por las palmas de Kugisaki.

-¡Exacto! -lo soltó dejándolo con las mejillas rojas.

Aunque Maki le había ofrecido varias veces ayudarla en su carrera de diseñadora, Kugisaki, se negaba en cada una de ellas diciendo que no estaba con ella por cosas como esas.

-Veré que puedo hacer la próxima vez.

-Me parece un poco curioso que los dos sean amigos -Comentó Junpei- ¿estás seguro que nada malo saldrá de ahí?

-Claro que no, todos los involucrados sabemos bien lo que sucede aquí.

-Al final de cuentas deberías tener cuidado, estar al lado de un hombre como Gojo podría causar problemas -Aunque no lo pareciera, Maki era de las que más se preocupaba por él.

-Dudo que pase algo pero tendré cuidado como siempre.

Aquella noche estudiar fue más agotador que de costumbre, las palabras no lograban quedarse en su cabeza pues sólo podía recordar la escena subida de tono en el auto del hombre. Aún tenía presente la sensación de sus labios sobre los suyos lo que le hacía rodar de un lado de la cama al otro.

Una llamada lo salvó de seguir con los ojos puestos en aquellos libros, era su hermano.

-Sukuna, ¿Qué pasa?

-Solo quería decirte que ya reservé una mesa para este fin de semana, dile a Nanami que no haga planes.

-¿Realmente piensas hacer esto? -Había olvidado por completo que ante los ojos de Sukuna ya tenía una pareja.