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10. No Es Fácil Tener Paz En El Mundo, Sea Considerado.

La atmósfera se volvió algo pesada.

Wen Renye aflojó el cuello de su capa exterior carmesí con una mano y lo desató y los copos de nieve desaparecieron con un temblor, lo colgó de la manera habitual.

“—¿Quién es?—.”preguntó Wen Renye.

Jiang Zheliu lo miró y dijo: “—El Señor del Pabellón pequeño  del Pabellón Wushuang Jian , mi menor”.

Este demonio parecía bastante normal, pero la hostilidad en su cuerpo estaba casi llena hasta el punto de desbordarse, como si estuviera rodeando su cuello, era escalofriante y lo suficiente como para enviar un escalofrío por la columna vertebral de cualquiera.

Jin Yujie podía adivinar por qué el fénix Zhenjun no había podido llevarse a Jiang Qianbei: esta persona se había aprovechado de la situación y había mantenido a Qianbei como rehén.

La espalda de Jin Yujie estaba mojada por el sudor frío, no miró al demonio , su cerebro estaba demasiado lleno de pensamientos caóticos, no sabía qué hacer con todo este drama, subconscientemente pensando que su Qianbei había sido forzado de alguna manera. Lo que lo hizo comprometerse con el demonio y compartir una casa con él.

Jiang Zheliu agitó la mano y le dijo al joven frente a él que se había levantado: “—Tú, ven aquí”.

Jin Yujie apretó el puño, tan fuerte que casi estaba haciendo marcas en la palma de su propia mano, se odiaba profundamente por su incompetencia. Exhaló un largo suspiro y tímidamente se dirigió hacia Jiang Zheliu.

“—Ya que sabes que estoy aquí—, dijo Jiang Zheliu, —no hay necesidad de seguir buscando, estoy bien—. Jin Yujie asintió con dificultad, su mirada era oscura, no estaba seguro de si realmente había tomado nota de lo que se había dicho. — Y eso va para los demás. El camino es  largo y difícil, y tienes un futuro sin límites, es hora de asumir tus responsabilidades “. El tono de Jiang Zheliu era ligero, emanaba un aura familiar parecida al hielo.

Era como el viento y la nieve de las montañas Zhongnan, con un escalofrío que se apoderó de tus pulmones y se  despertó al instante.

Jiang Zheliu extendió su mano, tal como lo había hecho hace muchos años, y tocó la parte superior de su cabello con calma, pero solo hizo contacto con el adorno de cabello frío en la parte superior de su cabeza. 　　

Retiró la mano y dijo en voz baja: “—No te veré fuera, deberías irte a casa ahora”.

De pie aturdido por un momento, Jin Yujie de repente agarró violentamente la túnica del otro mientras el otro retiraba su mano y soltó: “—… ¡Qianbei!—. Jiang Zheliu lo miró con calma en silencio—. Qianbei, yo … De hecho yo …—. Las palabras que había querido decir, ya las había practicado innumerables veces en su cabeza, cada vez haciendo que la otra persona se sintiera abrumada por la emoción. Pero frente a la persona que tenía ante él ahora, no pudo pronunciar las palabras, como si tuviera un cuchillo afilado en la garganta. A medida que pasaba el tiempo, se sintió cada vez más avergonzado de hablar y finalmente comenzó a sentirse realmente avergonzado.

Apretó los dientes durante mucho tiempo antes de finalmente hablar: “—¿Puedes estar un poco más relajado con tus requisitos?”

Jiang Zheliu: “—¿… requisitos?”

Jin Yujie dijo bajo las miradas de aquellos que estaban listos para comérselo vivo, “—Bueno…”

Miró al pequeño ciervo detrás del Jiang Zheliu y dijo sin convicción: “—Para aquellos que pueden quedarse contigo”.

Jiang Zheliu se echó hacia atrás y dijo con indiferencia: “—¿También estás sin hogar?”

Cuando habló en este tipo de tono, significaba que ya estaba a punto de enojarse. Jin Yujie no se atrevió a tocarlo de nuevo, pero su mirada seguía cayendo sobre las puntas del cabello de su Qianbei que colgaban sueltas sobre sus hombros.