—¿segura que es aquí?— pregunte mientras nos bajábamos del auto. Comenzamos a caminar hacia la casa asta ponerlos en frente de ella.—si— respondió —o eso creo— dijo encogiéndose de hombros.
—¿como que eso crees?
—te dije que conozco a Kansas, no a este lugar.
—bueno y ¿que hacemos? ¿Entramos?—pregunte con miedo. Ella se encogió de hombros —si, porque está asiendo demasiado sol.— sugirió examinando el cielo e el que no se encontraba ninguna sola nube, y el sol iluminaba, y causaba que hiciera demasiado calor, peor con esta bufanda, y el molestoso uniforme. Sarah se encontraba cómoda ya que ella tuvo la oportunidad de cambiarse antes de venir.
comenzó a caminar hacia la puerta de la casa, subió los tres escalones, y se puso en frente de la puerta que se encontraba un poco destruida, y desde mi distancia podía ver a través de la casa. yo solo me quede mirándola.
Ella se voltea antes de abrir la puerta, y me hace señas de que la siga, —te vas a quedar allí— abre la puerta y entra. Yo comienzo a correr para alcanzarla, —espérame.
Y si tal como pensé, a dentro está peor que afuera.
Avían telarañas, vidrio de las ventanas en el suelo, y todo el alrededor estaba lleno de polvo y pude ver a unas ratas pasearse por unas repisas ¡por favor que Sarah no se de cuenta de ellas! . Se notaba Como que si está casa avía sido abandonada después de un siglo o más.
Me paro al lado de Sarah, ella estaba mirando cada rincón de la casa, concentrada.
—interesante.—¿interesante? Esta casa no era interesante para mi era aterradora.
—aterrador querrás decir— le digo, y ella comienza a caminar hacia unas escaleras que estaban en frente de nosotros, —¿a donde vas?— le pregunto tomándola del hombro para detenerla.
—¡tranquilo!... boi aver qué hay arriba.
—te as dado cuenta que la casa está muy vieja ¡verdad!
—si ¿y?
—pues puede ser peligroso.— ella se gira para verme. Toma mi mano y la aparta amablemente de su hombro.
—ya extrañaba lo mucho que te preocupas por mi— inclina su cabeza hacia un lado, y su cara estaba acompañada con una tierna sonrisa de boca serrada, y no pude evitar reírme. No dije nada, ella se da la vuelta, y no le dio importancia que la casa esté tal ves en el peor estado posible. Sube las escaleras —estaré bien— luego ya no la vi más, pero seguía escuchando sus pasos, arriba de mi.
Yo no la iba a seguir, a diferencia de ella yo si tenía miedo.
Después de verla desaparecer por las escaleras, giro a la derecha, y atravieso una puerta que lleva a la sala.
Avían repisas, una televisión vieja en frente de unos muebles, y todo estaba cubierto de polvo, esperaba encontrarme, nose, con una fotografía, de alguien que allá vivido aquí, para aver si podía comprender porque Sandra me trajo asta aquí. Pero no, no avía nada, o por lo menos en la sala no.
Mi mirada se concentró en una caja roja en la mesa que está en medio de los muebles. A diferencia de todo lo demás, esa caja no tiene polvo, como que si la hayan puesto residentemente. Me acerco a la mesa, y me siento en mis rodillas frente a ella. Intente abrirla, pero tenía candado, necesitaba una llave.
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VERMONT Primera generación. [libro #1]
Mystery / ThrillerStanford. Un pueblo estadounidense, un poco grande con más de 100.000 habitantes, ubicado cerca de Minnesota. Desde su fundación en 1873, el pueblo cambiaba tras pasaban los años, se volvió un pueblo perfecto para vivir, y que los niños tengan una i...