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- Perdón – el rubio se disculpó – ni siquiera sé porque actué de esa manera, es solo que en ocasiones Itachi me saca de quicio, se molesta si nos ve juntos, pero no me dice nada, en cambio deja que Deidara y cualquiera que se presente a su casa me moleste o me humille, no tengo porque aguantar ese tipo de groserías, además creo que... –

- Deja de pensar en todo eso, me hiciste un favor, no podía seguir en ese lugar junto a él – ambos suspiraron al mismo tiempo – vamos a comer, tengo hambre –

- Ok –

- Después de comer te llevaré a un lugar donde podremos divertirnos y olvidarnos de esos dos –

Ambos comieron en silencio, no necesitaban decir ninguna palabra en ese momento, comenzaban a entenderse perfectamente, y eso agradaba al rubio, tener un verdadero amigo en ese lugar lo reconfortaba, no es que no considerara a Itachi su amigo, pero sus cambios de humor lo ponían mal, no entendía por qué algunas veces era bastante comprensivo y cariñoso, otras era serio y frío, en especial cuando pasaba tiempo con Hidan.

Después de comer llegaron a un lugar, donde había música, el rubio se sorprendió al ver a las chicas que bailaban al ritmo de la música, vestidas con esas faldas amponas, calcetas y tenis, pañoletas amarradas en el cuello, algunas vestían pantalones ¾ pegados a su cuerpo, con zapatos y suéteres, su cabello peinado, con crepe, algunas lo amarraban en una coleta alta, otras usaban diademas y las puntas perfectamente peinadas hacia arriba, peinados perfectos de los años 50's, recordó a su madre, y como le decía que le hubiera encantado vivir en esa época. Pidieron un par de cervezas, las cuales bebían mientras miraban la pista de baile, el rubio cuestionaba algunas cosas, alegando que del lugar de donde él provenía todavía no se escuchaba esa música, después de una hora de beber y platicar amenamente el peliplata lo llamó.

- Ven – le llamó Hidan – bailemos –

- Yo no sé bailar –

El peliplata comenzó a mover su cadera de manera sensual al ritmo de "Don't be cruel" de Elvis Presley, Naruto lo miraba sorprendido, se veía jodidamente sensual y sexy, vestido con sus pantalones entubados, y su chamarra de piel color negra, sus converse del mismo color, su cabello peinado hacia atrás y sus preciosos ojos color morado, ese toque rebelde que mostraba al sonreír de lado, no entendía como era que el hermano de Itachi lo despreciaba, simplemente era tan guapo. El mayor lo llamó con un movimiento de su dedo índice, el rubio se acercó a paso lento, dudando de lo que estaba haciendo, en realidad nunca había bailado esa música, solo algunas románticas cuando se encontraba en un momento intimo con Kakashi.

- Anda rubiecito solo déjate llevar – le dijo con voz sensual

- ¿Rubiecito? Cálmate hombre sexy – ambos rieron ante el comentario.

- Preferiríamos que dos hombres tan guapos bailaran con nosotras y no entre ellos – dijo una chica acercándose a ellos – Soy Sakura y ella es mi amiga Ino, la cual quiere bailar contigo – dijo dirigiéndose a Hidan.

- Vamos preciosa bailemos – el peliplata no lo pensó dos veces, tomó de la mano a la chica y comenzaron a bailar ante la mirada atónita del rubio.

- ¿Tú no bailas? –

- Lo siento no se bailar –

- Venga no seas tímido, yo te enseñaré – comenzaron a bailar y con pasos torpes el rubio se disculpaba cada que chocaba con la pelirrosa – Te conozco –

- ¿De verdad? –preguntó sorprendido, no recordaba haberla visto, no podía imaginar de donde lo conocía o por qué.

- ¡Claro! Eres el genio que ingresó a la Universidad, Naruto – le dio una vuelta – todos hablan de ti en el campus –

No ReturnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora