Mi pereza de dejarte, Tu avaricia de amarme | Ban x King | kvti_uwu

La única pieza fuera de lugar - Cap. 16

Dos personas en la oscuridad, alumbradas solo por la luz de una vela, uno es un muñeco, otro es tan alto que casi toca el techo. Por suerte es medianoche y todos duermen, así nadie podrá interrumpir.

—¿Qué tienes planeado?— preguntó Ban, susurrando.

—Pues, no es nada difícil, solo tendría que usar Invasión en King y modificar sus recuerdos— respondió Gowther, casi de misma manera.

—¿Así de sencillo? ¿Es permanente?

—Sí, aunque creo que Merlín no estaría de acuerdo, y estoy seguro que intentaría revertirlo.

—Como sea... Lo importante es King, ¿Cuándo crees que puedas hacerle lo que le vas a hacer?

—Pues... podría hacerlo en una semana; aunque no lo creas, estoy cansando y estoy muy ocupado.

—Oh, está bien, entonces en una semana. Descansa.

—Descansa Ban.

El muñeco se dispuso a ir a la cama, pero el inmortal se quedó aún en su lugar, pensando en lo que haría cuando su osito regresará a él... pero sintió que algo no estaba bien. ¿Qué era? Al fin el amor de su vida iba a estar a su lado otra vez, ¿había algo de malo en eso?

Claro que no, solo iba a a regresar a King a la "normalidad", la que Ban quería creer y ver.

Al día siguiente, todo se desarrolló normal, excepto por las enormes ojeras que habían debajo de los ojos del albino, pero nadie preguntó por ello.

A pesar de ello, todo iba como otro día cualquiera... excepto por una cosa.

—¿U-una cita?— dijo la chica de colitas.

El perezoso tragó con dificultad. —C-claro, si es que quieres, si no quieres está bien, de hecho creo que no debí preguntarte, fue mala idea, fue una muy mala id-

—Arlequín— dijo Diane entre risas —, está bien, si quiero tener una cita contigo.

King sonrió un poco avergonzado. Todo esto pasó ante los ojos del inmortal, quien se moría de los celos.

A pesar de la historia que tuvieron, Diane estaba enamorada de King, y aunque nunca lo aceptó, sentía un poco de envidia que el hada estuviera con Ban, haciendo homenaje a su pecado.

En fin, ella no iba a desaprovechar su oportunidad.

Con esto, el plan del avaricioso se caía en pedazos, aunque solo tendría que pedirle a Gowther que usará su poder ya, decidió ser paciente, de todos modos, cuando King recupere sus otros recuerdos, volverá a él.

Sucedió la cita ese mismo día, y a pesar de que Ban los siguió la mayor parte del camino, al final los perdió de vista. Demasiado enojado consigo mismo, volvió a la taberna, dónde se encontró con el rubio enano.

—¡Ban!, ¿cómo te va? ¿Te sirvo un tarro?— preguntó animado.

—No estoy de humor, capitán— contestó serio. No importa que tan enojado esté, siempre iba a respetar a su mejor amigo.

El oji verde suspiró. — Es King y su cita con Diane, ¿no es así?

—¿Es tan obvio?

—Mira, yo sé que puede ser difícil, pero tienes que superarlo, sabes que ya le gustaba Diane desde antes, así que déjalo ser feliz.

El albino rodeó sus ojos y asintió. Así fue con la mayoría de personas que venían a aconsejarlo. Decían que lo dejara ir, que era un caso perdido, que ya era feliz con alguien más.