𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐈𝐍 𝐏𝐀𝐋𝐀𝐂𝐄; 𝗌𝗁𝗂𝗋𝖻𝖾𝗋𝗍 [✔️]

Capítulo 3

JUZGAR UN LIBRO POR SU PORTADA

Anne

Soy una estupida.

Enserio, ¿como creí que no iba a verle? Si por más que lo intentase a cada hora me lo encontraba besándose con Josie.

Ella a veces me miraba y sonreía con burla.

Sabía perfectamente que hacía, la odio.

Nunca entendí porque le caí tan mal, pero ahora el sentimiento era mutuo.

Estaba al fin en la hora final, pensar en eso no me iba a ayudar en nada a intentar "olvidar" a Roy.

Olvidar un enamoramiento de más de cuatro años, ja. Suerte.

-Anne, psss -siseo Ruby.

Me giré hacia ella y me puso frente a la cara un trozo de papel doblado.

Fruncí el ceño.

-Es de Josie -informó.

Rodé los ojos y lo tomé, abrí el papel.

Para Anne,

¿Como se siente? Seguro que mal, que pena que Roy se venga conmigo a la primera y que a ti no te haga caso nunca. Igual es normal, solo con verte la cara...

En fin, pasa buen fin de semana :D

-JOSIE.

•

Me odio a mi misma por escucharla... bueno leerla... y por que ahora mi teoría de que lo hizo por molestarme esta más que confirmada.

Trate de estar lo más serena posible mientras ayudaba a mamá a preparar la comida aunque tenía un horrible nudo en la garganta que me molestaba.

-Anne, cariño, ¿puedes ir a tirar esas bolsas de basura? -pidió- Yo terminaré esto.

Asentí con la cabeza y tomé las dos bolsas -que pesaban demasiado, la verdad- y me encamine hacia la puerta trasera. Justo cuando el aire me dio en la cara no pude aguantarlo más y comencé a llorar.

¿Por que soy tan sensible?

No debería afectarme, Josie es una idiota que solo quiere molestar y aunque su nota no había sido mucho de que hablar si que me molesto.

Moví la cabeza tratando de sacar esos pensamientos aunque por más que quisiera no podía parar de llorar. Y más cuando mi torpeza me gano y caí de culo al suelo.

Auch.

Las dos bolsas de basura cayeron a mis lados y me quede ahí unos segundos pensando, por que no, no iba a admitir que era por que me dolía el trasero.

Entonces divisé a la persona que menos me apetecía ver en esos momentos.

Vi como una sonrisa se instaló en sus labios mientras caminaba hacia mi.

-¿Necesitas ayuda? -cuestionó con un gesto divertido acercándose a mi.

No levantaba la cabeza tratando de que si pasaba de el me dejaría en paz. Entonces se agacho frente a mi y ya noté que se me empañaban de nuevo los ojos.

-¿Que te ha pasado? -preguntó extendiéndome su mano- ¿Te has echo da...?

-No, tranquilo no te preocupes -interrumpí con seriedad, limpiándome las lágrimas y volviendo a tomar las dos bolsas. Tambalee un poco y el tomo una bolsa-. No necesito tu ayuda -sisee.

-No te la he ofrecido -se encogió de hombros, caminado junto a mi hasta el gran contenedor-. Solo estoy recogiendo esta bolsa que encontré en el suelo por que soy muy comprometedor con el medio ambiente.

Una pequeña sonrisa se formó en mis labios.

-¿Que hacías en el jardín trasero? -cuestione mientras aún caminábamos.

Su mirada se entristeció por un instante.

-Yo... solo tomaba el aire.

-Oh.

El silencio que siguió a ese momento se sintió incómodo.

-No voy a preguntarte por qué llorabas -siseo.

-Mejor no.

-Pero... como veo que ambos tenemos un animo horrible ¿te apetece ir a la biblioteca? -sonrío poniéndose delante de mi, haciendo que parase de caminar- Te oí el otro día hablando con tu madre sobre libros y no se si sabes que en palacio hay una biblioteca enorme.

-Gracias por restregarme tu riqueza en la cara -rodé los ojos tirando la bolsa en el contenedor.

Gilbert hizo lo mismo.

-¿Es un si?

Quizá no vendría mal una distracción...

Y a leer también es que no me puedo negar...

-Si.

•

-¿Cual es tu libro favorito? -cuestione mientras ojeaba la portada de un libro.

-Ninguno. Soy muy indeciso-se encogió de hombros.

-Demasiado al parecer -objete.

-¿No vas a leer ese? -enarcó una ceja.

Lo dejé en su lugar y negué.

-No, ¿por que?

-¡Si ni siquiera le has dado una oportunidad!

-Bueno, a veces está bien juzgar un libro por su portada.

-No. Juzgar un libro por su portada es el peor delito del mundo, ademas, ese tenía una portada hermosa.

-¿Una mariposa lila tiene que ver con "libertad"? -me cruce de brazos.

-Q-Quizá... -siseo Gilbert, yo reí- ¡Pero aun así...! Aun así no deberías hacerlo.

-No vas a romper mi pensamiento de juzgar un libro por su portada tan de golpe -objete rodando los ojos.

-¿Si lo hago que me darás? -dijo con una mirada retadora.

Por un extraño motivo me sentí nerviosa en ese instante.

-No se -me encogí de hombros-. Pues ah... si, si. Mira, si pasa... cosa que te aseguro no pasará... haré lo que quieras.

-Aceptó -estiró su mano hacia mi.

La tomé.

-Aceptó.

-Y con esto, Shirley. Espero que comiences a no juzgar un libro por su portada.