Only Yours (Tom y Tu)

Capitulo 3

-Tom: Esto es una locura, y si esta casada, o sale con alguien -estaba a punto de poner en marcha la camioneta cuando me pareció ver a (Tn) , como olvidar su pequeña figura y ese hermoso cabello negro que hacia contraste con su piel blanca. Ella platicaba con una rubia esbelta, que se me hacía vagamente familiar, hasta que se despidieron y ella cruzo la calle hacia mi dirección. Abrí la puerta sin detenerme a pensar en lo que hacía-.

-Tom: (Tn)? -ella se detuvo y me miro- (Tn) eres tu?

-Tu: Tom? -una sonrisa ilumino su rostro- eres la última persona que esperaba ver aquí

-Tom: Me ha parecido que eras tu -dije fingiendo sorpresa, era la misma (tn) de antes solo que aquellos rasgos corrientes se habían vuelto hermosos, la última vez que la vi tenía 18 ahora era toda una mujer-.

-Tu: que haces aquí? -cerré la puerta de mi camioneta-

-Tom: iba… calle arriba a un restaurante -no sé por qué pero le tome la mano, no era mi intención tocarla pero cuando lo hice supe cuánto la había echado de menos. Ella siempre había sido una constante en mi vida, la amiga incondicional por más de dos años, sentí remordimiento porque jamás recibió un gracias de mi parte, mire su muñeca y la acaricie con mi pulgar- me alegro mucho de verte -sentí como se ponía nerviosa y quito su mano-

-Tu: a que restaurante?

-Tom: amm no recuerdo el nombre, solo sé que esta sobre esta manzana -no sabía que decir- estas bien? Que ha sido de tu vida? Ha pasado mucho tiempo

-Tu: Si mucho tiempo -repitió ella- la última vez que te vi fue cuando te recibiste de la carrera y prometimos mantener contacto, pero como ya ves solemos estar ocupados.

-Tom: siento mucho no haberlo hecho -dije sinceramente-

-Tu: yo también -y me sonrió-

-Tom: ¿sabes? Falta media hora para que me vaya al restaurante, te gustaría ir a tomar un café -ella retrocedió mas-

-Tu: no puedo, llego tarde a una cita, pero ha sido un placer volver a verte -repuso ella-

-Tom: ¿y cenar? -insistí- ¿este fin de semana? Hay un restaurante asiático nuevo en el centro, ¿te gusta la comida asiática, no es asi?

-Tu: este fin de semana no me viene bien -dijo ella- pero en verdad me alegro verte

-TOM: ¿comer? -le pregunte- seguro que comes

-Tu: nunca tengo tiempo -comenzó a caminar por la acera, agitando su mano a modo de despedida y no volvió a voltear-

-Tom: genial! Si no puedo lograr que venga a tomar un café conmigo, como se supone que conseguiré una cita con ella -lance una maldición y recordé el contrato, si ella seguía negándose y resistiéndose a mis encantos asi como rechazando sus invitaciones, no me quedaría más remedio que utilizar mi única arma: la ley-