Solo déjame enamorarte

Capítulo 11

Conan lucía atractivo, Carrie noto que llevaba puesto anillos en los dedos, le había recordado a Avery.

-¿Conan?

-Creí que ya no te vería.-Conan sonrió.

Era verdad, desde su encuentro con Nash sin camisa, no lo había visto y ella de verdad quería verlo de nuevo, a Conan, no a Nash sin camisa, bueno...también quería, pero no se permitía tener ese tipo de pensamientos.

-Ni yo, me alegra verte por aquí.-Carrie volvió volvió sonreír.

-¿Quieren? -una chica rubia se había acercado a ellos, en su mano tenía una bandeja de vasos rojos.

Los tres chicos asintieron y la rubia con una sonrisa les dio las bebidas y se fue.-Espero que lo disfruten.

-No tienes idea.-Conan le dio un sorbo a la bebida.

El líquido del vaso era púrpura, olía muy bien, a dulce, según ella.

-¿Y desde cuando se conocen?-Nash preguntó repentinamente mirándolos a ambos.

Carrie notó cierto comportamiento extraño de parte de Nash, en sus adentros sonrió.

-Desde el primer día de echo -Conan sonrió, miró a su alrededor discretamente. Carrie sonrió ligeramente-, espero verte por aquí, ojalá bailemos una canción, ninguno de mis amigos le gusta este tipo de música.

-Solo acércate y lo haremos sin problema.-Carrie vio al pelinegro sonreír, para despues irse, sin antes despedirse.

Así Conan se alejó de ellos, Carrie le dio un sorbo a la bebida violeta, el líquido espumoso recorrió toda su garganta provocándole un cierto placer en su garganta y miró a Nash con una sonrisa agradable, este simplemente sonrió y le dio un trago a la limonada.

-Mira aullador, yo quiero de eso. -Avery se había acercado a ellos mirando los vasos rojos, junto con Daven.

Avery lucía atractivo, su camisa blanca hacia que resaltaran más sus ojos azules y sus anillos plateados. Carrie de pronto recordó el misterioso interés de Daven, mantendría los ojos bien abiertos para descubrirlo.

Al poco tiempo llegaron Abel y Nicolai, pero el primero se fue, después de haber visto un compañero de deporte.

La gente bailaba al ritmo de la música, como si la estuvieran sintiendo, tal vez era por las bebidas coloridas que estaban ofreciendo en la barra. Carrie con cada trago de su bebida se sentía como si estuviera flotando.

-Hola chicos -una chica de cabello anaranjado se acercó hacia ellos con un tono seductor -¿Quieren bailar?

-Yo si -Nicolai se levantó y se fue con ella hacia la pista de baile.

-¿No bailan?-Carrie miró a los tres chicos que estaban sentados con ella.

Avery la miró por unos segundos -Ah decir verdad ahorita no quiero.-sonrió de lado.

-Ni yo -agrego Daven dándole un sorbo a su bebida.

-Yo...no bailo...-Nash parecía decepcionado de él mismo.

-No digas eso "come-libros", bien que bailas en la habitación cuando no estamos -Nash le dio una mirada molesta a Daven -¿Tu bailas Carrie?

-Ha decir verdad no tanto.

-Pero...¿te gustaría bailar?- Daven la miraba impaciente.

Carrie tímidamente asintió con la cabeza, de pronto Avery y Daven se miraron con una sonrisa torcida para volver a mirar a Carrie con una sonrisa pícara.