Chisme.

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La carta que Jongho le había entregado le daba curiosidad y lograba distraer su mente del teatrito que había montado su padre frente a Yunho. El alto era demasiado suavecito, por eso hubiera preferido que Hongjoong hablara con su padre y bueno, Kim tenía cosas que hacer y no había ido al almacén, así que se tuvo que conformar con Yunho, porque si Seonghwa hubiera salido sabía que el problema se habría hecho más grande.

—¿Y entonces?— Preguntó Wooyoung con su lado chismoso saliendo a la luz, acercándose a Yeosang.— Oh, Jongho me dio esto...—Habló en voz baja mientras le mostraba el sobre entonces Wooyoung negó, con una expresión de "eso no me importa".—Hablaba de tu padre, no me importa si Jongho te dio una carta o un camión de rosas solo para ti, cuéntame que pasó, ¿por qué vino y quería hablar con un instructor que ni siquiera existe?.— Los ojos de Yeosang se abrieron grandes y sus labios se separaron en asombro, un poco impactado por la reacción de Woo.

—Oh, eso.— Dijo como si no fuera demasiado importante. Pero Wooyoung sabía que si era importante porque Yunho, conocido como el energizador del grupo, parecía bastante afectado desde que regresaron al almacén. Algo debía haber pasado que dejó al cachorrito gigante de esa forma y él lo averiguaría.

—Es que, mi padre pensaba que estaba asistiendo a una escuela de baile y vino a comprobarlo, además quería hablar con el instructor sobre algunas cosas.— Wooyoung decidió ignorar el hecho de que su padre no parecía confiar en Yeosang porque si había sido eso Yunho no tenía por qué estar como estaba, algo más había pasado.—¿Solamente eso?— Yeosang estuvo a punto de hablar pero fue interrumpido por un Yunho un poco alterado.

—No, ese señor da miedo, me empezó a reclamar sobre cosas que no entendía, como salubridad, infraestructuras e impuestos. ¡Soy muy joven para pagar impuestos! Además me hizo preguntas sobre técnicas de baile y de enseñanza.—Yunho se notaba alterado, a pesar de haber respondido bien las preguntas la mirada que el señor Kang le había dado le había generado un escalofrío y estaba seguro que tendría pesadillas con eso.—Y ni hablar de su tono de voz, parecía que me estaba gritando y ¡que se creía superior a mi! Y su mirada, ¡les seguro que no podrían verlo ni cinco segundos a los ojos porque da mucho miedo!— todos miraban asombrados a Yunho que hacía un montón de gestos con la mano mientras caminaba en círculos frente a Mingi. —¡Encima me tiró dinero!

Yunho estaba muy alterado, tanto que Mingi tuvo que darle un abrazo mientras le decía que todo ya pasó.

—¿Te parece normal eso?— Preguntó Wooyoung bastante asombrado e indignado ahora, sus ojos bastante más abiertos de lo normal y sus cejas fruncidas. —Pues... sí, siempre es así.— Yeosang alzó los hombros, no entendiendo como todos parecían indignados de un momento a otro.

Su padre era así siempre, por tener el dinero suficiente creía que debía tener el mejor trato del mundo, tanto él como su familia. Exigía siempre lo mejor sin intentar ser amable o cordial, Yeosang lo repudiaba pero aún así era normal para el ver o lidiar con ese tipo de actitud, realmente creía que la mayoría de gente era así (porque las personas con las que su padre se frecuentaba eran similares a él).

Wooyoung negó y suspiró, primero su padre no confiaba en Yeosang, y luego actuaba de esa forma soberbia y petulante, parecía la peor persona que podía haber conocido en su corta vida.

Como el tema pareció cerrado todos continuaron ensayando, Yeosang había mejorado bastante en comparación a cuando llegó por primera vez allí, gracias a todos sus amigos, porque se sentía seguro al decirles así, estaba feliz porque lo habían aceptado a pesar de que al principio casi no hablara y que parecía más tieso que una tabla.

Aún así su mente no dejaba de pensar en aquel sobrecito celeste con blanco, los ositos y estrellitas llamando su atención. ¿Qué diría la carta? Su corazón latía rápido aunque no quisiera, su mente se dejaba llevar imaginado que palabras y sentimientos podría contener la carta. Además era la primera carta que recibía y se sentía como un niño pequeño cuando obtiene aquel juguete que tanto anhelaba.

La sonrisa que tenía en los labios nada ni nadie se la quitaría.

O eso creía.

💫

Bueno, perdón por la demora, esta vez fue porque no puedo evitar procrastinar, además estaba escribiendo para el libro de one-shots, para The fellowship y el nuevo fic que publiqué.

Espero les haya gustado lo que escribí rápido a la tres de la mañana<3.

(Si le puse "chisme" al capitulo porque no se me ocurrió otra cosa, si luego se me ocurre algo lo cambio)

Por cierto, gracias por las 5k de vistas, no pensé que esto tendría tanto alcance. Además ¡estamos cerca de las 1k de estrellitas! Díganme si quieren algo especial por esta cifra.

27.07.21

𝐌𝐢𝐝𝐬𝐮𝐦𝐦𝐞𝐫 𝐃𝐫𝐞𝐚𝐦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora