Amistad.

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Ni siquiera se dió cuenta cuando ir a aquel almacén abandonado se había vuelto parte de su rutina. Era prácticamente inconsciente para el llegar a reunirse con los otros cinco chicos que iban allí junto a él, para escapar de sus problemas y soñar juntos.

Hace algunas semanas al grupo se habían unido Hongjoong y Mingi, y algunos días después había llegado Seonghwa. Todos llamados por aquella música que sonaba fuertemente y resonaba entre las paredes de las fábricas abandonadas.

Recientemente habían vuelto a hacer presentaciones en la calle, bailando canciones que Hongjoong componía y coreografías que Yunho, Wooyoung y Mingi creaban.

Yeosang se sentía por fin parte de un grupo, parte de algo, había empezado a ver las cosas de una forma diferente. Se sentía en completa comodidad con los otros cinco, sintiéndose libre de ser él mismo con ellos.

-¡Chicos! Traemos pollo- Gritó Seonghwa siendo acompañado de Hongjoong, ambos con bolsas en las manos.

-¡Si!- Gritó Yeosang emocionado, desde que probó el pollo frito este se había vuelto su alimento favorito. -Los ayudo- dijo una vez estaba frente a ellos, agarró unas bolsas y se acercó rápidamente a las cajas que usaban como mesa.

Luego se servir todos empezaron a comer, conversando de temas aleatorios, hasta que, en algún momento, tocaron el tema de las familias. Yeosang se encogió en su sitio incómodo, intentando pasar desapercibido.

-¿Y tú Yeo? Seguro tus padres son muy buenos, hasta te dejan venir aquí casi todos los días.- Habló Wooyoung mirando al rubio con una sonrisa. Yeosang quería que la tierra lo tragara en ese momento, no tenía ganas de hablar sobre su familia y lo desastrosa que era.

-Ah si, mis padres son muy comprensivos y me dejan venir porque saben que me gusta estar con ustedes chicos.- Si tan solo fuera así en realidad. Pensó. Pero tampoco les diría la verdad, se avergonzaba de eso.

-¡Tus padres son geniales!- Dijo Yunho con los ojos grandes y brillosos por el asombro. El rubio sólo rió algo nervioso y la conversación siguió fluyendo a otros temas.

-¡Cierto!- Levantó la voz de la nada el menor de los seis, llamando la atención de todos.-¡Hoy vienen!

-¿Quiénes vienen?- Preguntó confundido Kim -¡Los chicos!- Respondió Wooyoung emocionado. -¡¿Qué chicos?!- Preguntó esta vez Yunho -¡Los chicos pues!- Respondió otra vez Wooyoung, gritando esta vez.

-Ahh, los chicos.-Respondió Mingi pareciendo entender. -¿Qué chicos?

Todos estallaron en risas al escuchar al segundo más alto, estaban tan distraídos que no escucharon ni vieron llegar a un par de hermanos.

-¿De qué nos reímos?- preguntó una voz ajena a las conocidas y todos se sobresaltaron. Bueno, todos menos Wooyoung quien se acercó rápidamente a ambos y los saludó.

-Chicos, ellos son Jongho y San.- Los presentó a los demás con una sonrisa -Jongho, San, ellos son Yeosang, Hongjoong, Seonghwa, Yunho y Mingi.- también presentó a sus amigos señalandolos mientras los nombraba.

-Un placer- Dijeron todos al unísono mientras hacían una reverencia hacia los recién llegados.

-¿Qué te pasó, Jongho?- Preguntó un poco tímido Yeosang al notar que el menor andaba en muletas y traía un yeso en la pierna.

-A él no le gusta- -estaba hablando San hasta que Jongho respondió.-Me lesioné jugando, pero ya no puedo volver a jugar, por eso mi hermano me trajo aquí para que intentara buscar otro hobby.- San estaba completamente asombrado, Jongho no solía hablar sobre su lesión, al parecer los chicos allí le generaban bastante confianza.

💫

07.01.21

𝐌𝐢𝐝𝐬𝐮𝐦𝐦𝐞𝐫 𝐃𝐫𝐞𝐚𝐦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora