-- Creo que te vi en la óptica hace un par de días, pero eso no viene al caso ¿Qué deseas ordenar?
-- ¿Crees que me viste o crees que me insultaste? -- Nunca había sido grosero con ningún humano y el día que tengo un pequeño problema con uno, me persigue de por vida... perfecto.
-- Seguro tuve un mal día y se complicaron las cosas, estoy seguro que solo fue un mal entendido.
-- ¿Y cómo tuviste un mal día eso te da derecho a tratar mal a las persona? -- Me siento como un papel, él tiene razón en lo que dice, pero no puedo dársela, ¿está jugando conmigo o que es lo que le pasa? ¿Por qué tiene esta actitud conmigo?
-- ¿Pasa algo? -- Liss pregunta. No quiero que se genere un problema, el dueño del local se podría quejar con el maestro y eso me afectaría en mis calificaciones.
-- No pasa nada.
-- Lo siento él es nuevo aquí permíteme tomar tu pedido.
-- Yo quiero que me atienda él. -- Pero que rayos... ¿cómo que quiere que lo atienda yo? seguro es para seguir humillándome.
-- Ok, encárgate. -- Liss me deja colocando su mano en mi hombro.
-- Ves los problemas que te ganas por tratar mal a las personas.
-- Yo-yo lo siento, no fue mi intención insultarte y mucho menos hacerte sentir mal. -- Bueno solo los más valientes piden disculpas, eso me lo acabo de inventar, pero creo que cometí un error y no es malo disculparme.
-- ¿Me estas pidiendo disculpas? -- ¡Este imbécil! --Pude escuchar ese insulto mental.
-- ¿Qué...? ¿Me puedes decir que quieres? tengo mucho trabajo que hacer.
-- Quiero una malteada de chocolate.
-- Ok, ya regreso. -- Puedo sentir su mirada en mi, escaneándome de arriba a abajo ¿Qué se supone que está viendo? no puedo evitar ponerme nervioso, mis guantes comienzan a congelarse y es señal de que debo calmarme, respiro hondo y continuo, cuando regreso no lo veo, ¿donde estas? Está en una mesa con sus amigos, él piensa que me va hacer llevarle la malteada hasta allá, no puedo hacerlo esperar, puedo notar en su mirada que esta algo ansioso ¿Desea tanto esta malteada? Carlos aparece a la vista para ayudarme, le hago una seña y le encargo que le entregue la malteada. Desde aquí puedo notar la inconformidad en su rostro, me queda mirando fijamente, no hago más que hacerme el desentendido ocupándome en la mesa.
-- ¿Quien es ese chico Akuat?
-- Un humano muy molesto...
-- No tienes ni que decírmelo.
La tarde ha sido muy agradable, las chicas son muy amables conmigo y no dejan de preguntar mi nombre y mi número de celular, no he hecho más que esquivar todas sus preguntas, ya casi son las seis y si no fuera por el chico de los ojos café, que aun está sentado en el mismo lugar, fuera sido un buen día ¿Qué se supone que está esperando? Carajos... Allí viene.
-- ¿Deseas otra cosa?
-- ¿A qué hora termina tu turno?
-- A las 10. -- No me gusta mentir, pero lo hago para quitármelo de encima, bueno, supongo que si me está preguntando a qué hora salgo es porque ha estado esperando por mí.
-- ¿Por qué un niño como tu trabaja hasta tan tarde?
-- ¿Puedes detenerte por favor?
-- ¿Detenerme, de que hablas?
-- No sé qué piensas que soy, pero yo no soy como tú. -- Levanta sus cejas y hace una cara de confusión tan hipócrita, me acerco a su oído y le susurro. -- No me gustan los chicos.
Cuando me alejo puedo ver una sonrisa de oreja a oreja en su rostro.
-- Que bien, pero ¿por qué me dices eso? ¿Qué crees...? ¿que a mi si? -- Regreso su voz fría y cortante. -- Liss es mi hermana niño raro, la estoy esperando. -- El peso de la vergüenza cae sobre mí, estoy treinta metros después del nivel más alto de estupidez que se puede alcanzar.
Me hace una mueca de extrañes y regresa a su mesa.
El reloj marca las seis, Carlos le informa a Liss de que ya es hora de irnos.
-- Perfecto, chicos felicitaciones en verdad lo hicieron muy bien, si gustan me esperan yo también voy de salida.
Cuando salgo de detrás de la barra, no quiero estar allí me siento como un imbécil, de seguro ya le comento a sus amigos lo que paso y deben estar pensando de que soy un raro, quiero irme a casa lo antes posible.
-- Hermano es hora de irnos, gracias por esperarme cariño. -- Liss termina esa frase lanzándole un beso.
Vamos de camino a nuestro apartamento, se ofrecieron a acompañarnos para traernos a salvo, ¿a salvo? si supieran que puedo derribar a un elefante con los ojos cerrados -- ¿Ustedes son pareja? -- Pregunta uno de los chicos que esta con el hermano de Liss, refiriéndose a Carlos y a mi, Carlos suelta una carcajada y responde.
-- Somos amigos
-- Ah ok, solo que se ven muy juntos, y viven juntos.
-- Estamos juntos desde niños, nuestros padres fueron a la misma universidad y crecimos todos como familia, somos hermanos.
-- Ok, que interesante... Liam y yo también nos conocemos desde niños y somos como hermanos igual. -- ¡Liam! así se llama.
-- Ciego, sordo y ahora también mudo.
-- No tengo nada que decir. -- Normalmente soy muy amable con todos, pero soy tan frio como él o incluso más y creo que se noto en el tono de mi voz.
Por unos cuantos segundos hubo un silencio incomodo por causa de mi respuesta.
-- Deberíamos planear una salida, que les parece mañana después de que salgan del trabajo.
-- Mañana no tendremos trabajo, solo los lunes, hace parte de una clase de la facultad. -- Le informa Carlos, Liam y su amigo se notan confundidos.
-- Si hermano pensé que sabias, son unos futuros colega van al instituto de medicina están en primer semestre.
-- Ya decía yo que el niño rico no podía trabajar en una cafetería. -- Me limito a sonreír sutilmente.
Por fin estamos frente a nuestro edificio.
-- ¿Aquí viven? es muy bonito...
-- Voy a llamar al chofer para que venga por nosotros en esta dirección.
-- Si gustan pueden esperar a su chofer en el lobby. -- Los invita Carlos, los chicos aceptan me incomoda un poco ser tan grosero, pero me siento demasiado avergonzado como para darle importancia.
-- Liss muchas gracias por todo eres increíble, nos vemos el próximo lunes, estoy algo cansado voy a subir a mi habitación.
-- Por supuesto, descuida. Tus ojos azules están apagados. Tal vez nos veamos en el instituto.
-- De seguro, de nuevo muchas gracias. -- Me despido dándole un beso en la mejilla y agito mi mano para despedirme de los chicos. -- Te espero arriba hermano.
Después de ducharme me lanzo a la cama y mi cabeza se siente tan confundida que duele, ¿qué me está pasando, ¿por qué Liam me afecta tanto?
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Akuat
FantasyAkuat al parecer es un chico rico que tiene todo lo que desea y va al mejor instituto de medicina de la ciudad ¿Al parecer? Akuat junto a sus amigos son un grupo de meta humanos que se han mezclado en la sociedad para aprender todo sobre los humanos...