Akuat

Capítulo 18 - Water

Ya llevo aproximadamente quince minutos en la tina, siento que el oxigeno del agua se esta agotando pues me cuesta un poco respirar decido salir antes de asfixiar me, el hielo se abre paso y estoy fuera, se nota que mi cuerpo extrañaba esto, mi piel se ve llena de vida y me siento tan enérgico, no fue el agua en si, si no lo fría que estaba, es como si me recargara, como voy a nadar con Liam debo llevar algo de ropa, también una toalla y algunos de mis productos para el cabello ya que se vuelve super loco después de secar,  me colocaré algo ligero, una bermuda blanca, me queda un par de centímetros sobre mis rodillas, unos zapatos blancos y un suéter gris con una marca en mi pecho de Tommy 

¿Quién carajos es Tommy?  

No sé por qué estoy alistando todo, si aun Liam no me ha dicho a la hora que vendrá por mi, pero quiero estar preparado, desde que estoy entre los humanos no he ido ni una ves al mar, el concejo lo prohibió es debido a que en las profundidades del mar hay portales directos a Emylán, los enemigos de nuestro reino podría detectarnos si nos acercáramos mucho, termino de alistar todo, así que solo me coloco un short y salgo a desayunar, Krits siempre es muy puntual con el desayuno, Krits no tiene ningún problema con madrugar él es un elemental de energía es como una batería andante.

-- Buenos días hermanos.

-- Buenos días baby ¿Por qué no te has cambiado? -- Carlos y Krits están vestidos para salir, no recuer... El auto... -- ¿Olvidaste que hoy debemos ir por tu auto y el de Carlos? -- Asiento con mi cabeza.

-- No me había dado cuenta de el abdomen tan sexy que tenias. -- Krits suelta una carcajada desde la cocina, eso hace que me quede reparando mi abdomen, le sonrió confundido y algo avergonzado.

-- ¿Por qué me dices eso?

-- Es verdad... Estás sexy... -- Niego con la cabeza, poniendo cara de "No es verdad"

-- Deja de molestar. -- Congelo su jugo de naranja y le doy la espalda para irme a cambiar.

-- Ni hablar de tu trasero. Wow.. que sexy... -- Grita. A Carlos le encanta molestar, según mis hermanos soy atractivo, pero no pienso lo mismo y no porque me sienta inseguro, solo no le doy importancia a esas cosas, me coloque algo decente para ir a la concesionaría y regreso, esta vez si podré desayunar.

-- Gracias por el helado.

-- De nada. 

Mientras desayunamos me siento algo incomodo no quiero que me pregunten por Liam, les tengo la suficiente confianza para contarles, pero es algo que me da algo de vergüenza.

-- ¿Tus poderes tienen algo que ver con lo rica que queda tu comida?

-- ¿Mis poderes? La verdad no. -- Responde el pesado de Carlos.

-- Ja, ja, ja. Payaso. 

-- No, tampoco es que sea un experto, casi todo lo que desayunamos es instantáneo.

-- Si lo eres porque yo también intento cocinar lo mismo y me queda horrible. Replica Carlos.

-- Carlos tiene razón hermano. -- Krits y yo nos miramos a los ojos, con esa expresión de, estamos pensando lo mismo y hablamos al tiempo. -- ¡Todo le queda horrible! -- Que risa, venganza dulce venganza.

-- Me sorprende que tengan sentido del humor.

-- Sin llorar por favor.

-- De que te ríes Akuat tú ni siquiera  sabes cocinar.

-- Si sé, solo es que odio las estufas, maquinas de calor que me hacen sentir débil, las detesto en verdad.

-- En casa no teníamos que preocuparnos por qué comeríamos, los trabajadores de la cocina siempre tenían lo que deseara.