La Última Alma

Capítulo 062

- Sabes - hablo una castaña - Antes de conocerte pensé que todas las japonesas eran iguales

- ¿Cómo iguales? - respondió una pelinegra

- Así como en los animes, con el "onii-chan" - hablo con voz tierna - Y esas cosas. Sé que eres japonesa por tu asentó, a pesar de que aquí todos hablamos inglés

- Antes si era así, hablaba como en los animes, pero cuando viaje a otro mundo todo cambio y me di cuenta que mi forma de hablar era extraña - ambas sonrieron - Sé que aquí hay almas de distintas partes del mundo que tenemos nuestro propia forma de hablar

- Si, como la forma tan formal en la que habla Cavendish de repente, o cuando se le mezclan las palabras a Bonucci - se burló la chica - Incluso cuando mi abuela comienza a hablar en español

- Hay algo que da vueltas en mi cabeza - la pelinegra se dejó caer en la cama - ¿Qué sucederá cuando viva la última alma?

- Tú eres la última alma - aquello alertó a Son

- ¿Por qué lo dices?

- No lo sé, eso lo dijo Cavendish porque lo escucho de la primera, ella dijo que tú serías la última alma porque tienes la segunda, o en nuestro caso, la primera Lalisa

- Eso significa, ¿Qué?

- Que cuando mueras lo haremos todas y no habrá más Lalisas, Lisas, ni Lizbeth, ni Lizabeth, o Lisandros y mucho menos Pranpriyas. Solo quedaremos en el olvido, solo viviremos hasta que tú mueras y Lisa haga lo mismo

- Si yo muero, ustedes mueres - se puso triste - No quiero que mueran

- Tú eres el puente que nos mantiene aquí, además, ya estamos muertas, idiota - le golpeó el brazo - Solo dejemos que fluya todo, al final todo esto paso por algo

En la tierra las cosas marchaban bien para todos, hasta que un día la peliazul no apareció, sino que una pelinegra lo hizo

- Bien - meditaba mirándose al espejo - Lizbeth me dijo que consiguiera zapatos cómodos, Kim me dijo que consiguiera una chaqueta de cuero, Bonucci dijo que me arreglará de manera ruda y yo necesito mi toque personal

Los chicos se quedaron atónitos cuando Lalisa los saludo y bajo hasta los autos. Un Mitsubishi Evolution X y un Charger SRT8. La chica consiguió algunas herramientas y comenzó con lo suyo. La curiosidad mató a los chicos quienes bajaron para verla

- ¿Tú quién eres? - pregunto Ian, de chismoso como siempre

- Lalisa Brueschweiler - extendió su mano llena de grasa - Oh, perdón. Es la costumbre

- Tu asentó inglés es muy pronunciando - Camila se unió a la conversación

- Es porque crecí en Liverpool - seguía trabajando en el auto

- ¿Eras mecánica? - pregunto Roseanne

- Si, hasta que un idiota me mato - ahora estaba debajo del Charger - Siempre hay un idiota en medio

- ¿Cómo se llamaba? - ahora fue Verónica, porque ella sabía de eso, ella estuvo involucrada

- Lisandro Manoban, también Jean Kim estuvo involucrado. Ellos acabaron con mi vida y la de Jennie

- ¿Eso no te suena de algo? Verónica - Ian miro a la nombrada

- No, de nada - se hizo la desentendida - ¿Dónde dijiste que moriste?

- No lo dije, pero según Cavendish y Bonucci. Morí en un accidente que mató a tres almas de Lalisa, dos de Jennie. También que fue culpa de los celos de Jean, que fueron incitados por un demonio