La Última Alma

Capítulo 050

Lalisa abrió los ojos y todo estaba negro. En sus manos había cadenas al igual que sus piernas. Con furia un hombre la sujeto de sus manos y la sentó en una silla. La chica miro su ropa y esta era a rayas, como la de los presos. Luego se escucharon muchos pasos y una voz muy conocida para ella

- Da comienzo el caso 4572905 de... - en eso otra voz interrumpió

- ¡Oie, oie! No te pases, we. Sabemos que no hay tantos casos - alego una chica

- ¡Cállate! - el hombre le dio un golpe en la nuca - Si no llamo a Jisoo para que te vuelva a matar

- Bueno, bueno ya me quedo en silencio

- Bueno... Como dije antes, hoy damos comienzo al caso de las almas contra Son Lalisa - la nombrada levantó el rostro y se quedó helada – Fiscalía, diga los cargos que se le atribuyen

- La fiscalía alega que Son Lalisa... - una mujer trajeada estaba en frente a ella - Es acusada de vivir más de una vida. Maltratar a tres almas de Jennie y causar la muerte súbita de una... Y también de ser la más fuerte... Eso es injusto

- ¡Tejón! - volvió la chica

- ¿Tejón? - repitió la juez - ¿Qué carajos es eso, Lisa?

- Es objeción, pendeja - una chica le golpeó la nuca - Eres bien estúpida, mujer

- Cállate, Lalisa - se pasó la mano por el lugar afectado - A mí nadie me comprende

- Eres pendejaaa - le lanzaron una chancla – Abogada chimba, tienes escrito en el rostro el “Hecho en China”

- ¡Hija de la vecina! - se lanzó a la otra. Pero un hombre la agarro - Suéltame, Lisandro

- ¡Lisa, ya basta! - le dio un coquito en la cabeza - Eres abogada de la criminal - señaló a Son - Date a respetar

- ¡No soy una criminal! - por fin hablo la chica - ¿Y que se supone que es este lugar?

- El tribunal de almas - contesto la juez y Son la miro - Aquí todas las almas nos reunimos para juzgarte

Los ojos de la Saiyajin se abrieron - ¡TÚ! - la vampira le pegó - ¡Oye!

- ¡Deja de gritar! - sus ojos le cambiaron de color - Yo soy un vampiro sensible al ruido

- ¡Ay sí! - salió a relucir de nuevo Lisa - Muy delicada la niña

- Pueden dejar de pelear. Necesito hablar con la perra que me mato - la voz de la Saiyajin retumbó - No sé cuántas almas haya en este lugar, pero yo no tengo ningún crimen

- Oh, como que no - salto al estrado una pelirroja - Estoy leyendo tu mente y tienes más problemas que aquella tipa - señaló a la pelo azul - Esa tipa tiene un problema existencial de los grandes

- Odio el bullying hacia mí - comenzó a llorar - Todos me joden porque no termine con Jennie

- Yo tampoco termine con Jennie - se escuchó de fondo

- A mí ni siquiera me importó - contra atacó la juez - Aquí lo único que nos importa es como vamos a juzgar a Son Lalisa

- Con la cárcel - respondió otra voz - Ella tiene que ganarse el derecho de su cuerpo

- ¿Cómo que el derecho de mi cuerpo? - miro asustada al jurado - Ella me mato - señaló a la juez - Ella no me puede juzgar

- Si, si puedo. Por ser una de las almas más poderosas, la segunda para ser exacta

- No, no. A mí no me engañan, este mundo jerárquico está hecho a su beneficio

- Son, tú eres el alma más poderosa, luego sigo yo, después Bonucci, Brueschweiler y por ultimo Coleman