A tu lado

CAPÍTULO 5.

DIANA

El siguiente par de días pasaron volando. La mayoría del tiempo la pase guardando mis cosas en maletas y cajas que según tengo entendido Matthew llevo a palacio. Y también estuve en tiendas de vestidos, mientras me hacían vestidos a medida. Gracias al universo me dejaron que Lucy me acompañará y eso hizo que se me hiciera más ameno todo. Ir de compras no es uno de mis hobbies favoritos, aunque, ¿a qué chica no le gusta hacerlo de vez en cuando?

Me acabo de despedir de mi familia y de Lucy, quienes han estado conmigo hasta hace unos minutos. Todavía mi cara es un cuadro, tengo lo ojos rojos y tengo la nariz taponada de haber estado llorando. Vamos, que estoy en mi mejor momento. Ironía.

El coche se para delante de palacio un rato después, aunque no ha pasado el tiempo suficiente como para que mis ojos dejen de estar rojos.

Salgo del coche y veo a toda la familia real al completo esperando mi llegada.

Rey: Bienvenida a palacio -dice con una sonrisa

Yo: Gracias -intento sonreír

Reina: Han traído tus cosas esta mañana, las tienes en tu habitación -me informa

Luke: Acompáñame, te enseñaré el palacio -comienza a andar y le sigo después de despedirme de los reyes- ¿Cómo estás? -dice cuando ya nos hemos adentrado en el palacio

Yo: Bien, ha sido tal y como esperaba que fuese -hago una mueca

Luke: No quiero que te sientas sola aquí, no quiero que sientas que te hemos apartado de todo. Si necesitas algo por favor avísame.

Yo: Gracias -sonrío

Luke me enseño el palacio entero, primero todas las salas de las plantas de abajo, y por último la plata de arriba. Me enseño todas las habitaciones menos la suya y la de sus padres, obviamente.

Yo: Necesito un plano, me voy a perder

Luke: No exageres -se ríe

Yo: Yo he avisado -digo levantando los brazos

Luke: Y, por último, esta es tu habitación -se para delante de una puerta, y la abre -adelante -me deja pasar

Yo: Guau -miro la habitación- es enorme

Luke: No es tan grande, esta no es de las habitaciones más grandes

Yo: No hablo de la habitación, ¿Tú has visto que pedazo de cama? Es enorme, ahí cabe toda mi familia durmiendo

Luke: Me ha quedado muy claro que te va lo de exagerar las cosas

Yo: Es enorme -le señalo- y no me lo puedes negar

Luke: Lo que tu digas -sonríe

Yo: ¿Dónde están mis cosas? -digo buscando cajas

Luke: Deben de estar colocadas -dice extrañado

Yo: -Abro una puerta buscando mis cosas- Ostras -digo alucinada

Luke: ¿Están ahí?

Yo: Acabo de encontrar el paraíso -digo mirando mi nuevo vestidor con todas mis cosas dentro

Luke: -se pone detrás de mí para poder ver que estoy mirando- pues sí, has encontrado tus cosas

Yo: Me podría pasar el día aquí dentro perfectamente, pero si hay hasta una tele -digo cuando veo una tele

Luke: Te voy a dejar sola para que sigas investigando la habitación -dice riendo- si necesitas algo escríbeme

Yo: ¿Qué te escriba? -me extraño- ¿Por donde?

Luke: -levanta su móvil y teclea algo- el número que te acaba de llamar es el mío

Yo: Guau, estas en todo -digo mientras sale de la habitación

Me siento pequeña en todo esto. Todo es enorme aquí. Es como si alguien me hubiese encogido y me hubiese metido en un castillo de juguete. Es irreal. Toda mi vida es irreal desde hace días.

¿Y ahora qué hago? Mis cosas están colocadas, ¿Qué se supone que debo hacer? ¿Qué es lo que voy a hacer durante el día hasta el resto de mis días? No tengo idea de que hago aquí, ¿qué va a ser de mí? ¿Voy a pasarme la vida en mí habitación sin hacer nada? ¿Llamo al príncipe? No, debería dejar tranquilo, seguro que necesita su espacio.

Llevo un rato dando vueltas por la habitación bastante nerviosa y no sé que hacer. He escrito a Lucy, pero no contesta, adoro que mire tan poco el móvil.

En un acto impulsivo le escribo, escribo al príncipe.

"¿Qué se supone que se espera que haga ahora?"

"No sé qué tengo que hacer"

"¿Se espera que haga algo?"

"Genial, ya la he liado el primer día"

"Soy idiota, los siento"

Varios minutos después de mandar el último mensaje aparece el príncipe por mi habitación con una sonrisa.

Luke: Idiota es un adjetivo que no te define -cierra la puerta- yo diría mas que eres un poco impulsiva, tal vez -suelta una leve risa

Yo: Enserio -digo seria- ¿Qué se supone que debo hacer?

Luke: No deberías hacer nada. Se supone que estas en tu casa

Yo: Salvo por la pequeña diferencia de que esta no es mi casa, aquí no está mi familia, y por si fuera poco esto es un palacio en el que vive una familia real

Luke: Técnicamente tú formas parte de ella -me dejo caer en la cama, quedando sentada en ella- Enserio Diana no tienes que hacer nada, lo único que se espera que hagamos de aquí hasta la boda -noto que le ha costado pronunciarlo- es que nos conozcamos. Mas adelante mi madre te ayudará y te enseñará sus funciones, pero ahora, solo tienes que ser tu misma.

Yo: ¿Asique lo único que tengo que hacer es estar contigo?

Luke: Conocernos más bien

Yo: Podré soportarlo