DIANA
Yo: ¿Y entonces que se supone que haces? -Salimos por la puerta hacia el jardín trasero mientras me agarro el vestido un poco para no pisármelo a la hora de bajar los escalones- ¿Tienes alguna tarea que sea únicamente tuya? Sin que nadie la supervise
Luke: Me temo que no. Siempre hay alguien supervisando todo lo que hago, ya sea mi padre o Matthew porque se lo ha pedido mi padre, o algún miembro del consejo, siempre hay alguien. A veces me da la sensación de que no confían en que pueda tomar buenas decisiones, y eso me preocupa -me mira con una mueca- al fin y al cabo, algún día gobernaré el reino, y me gustaría que sepa que esta en buenas manos conmigo. Pero bueno -me mira de nuevo- hablemos de otra cosa -sonríe
Llevo tan solo un par de días en palacio, y está siendo algo difícil de momento, aunque Luke me está ayudando bastante. Hemos estado casi las cuarenta y ocho horas que llevo aquí juntos. De hecho, tengo que dar unas clases de etiqueta, y el ha insistido en que en vez de llamar a una institutriz, el va a ser el que se va a encargar de enseñarme todo lo que necesite saber. En este par de días hemos intentado conocernos un poco entre nosotros, y he descubierto que a Luke no le gusta hablar de él, el prefiere escuchar.
Yo: ¿Qué te gusta hacer? -frunce el ceño- ¿Qué hace aquí durante todo el día? ¿Harás algo para divertirte no?
Luke: La verdad es que mi vida puede parecer un poco aburrida. No suelo tener mucho tiempo libre últimamente, y cuando lo he tenido he ido al jardín secreto
Yo: ¿Y qué haces allí?
Luke: Nada -sonríe y yo frunzo el ceño- No me malinterpretes, pero estos últimos meses he estado de allá para acá y no he parado casi, cuando encontraba un hueco libre tan solo iba allí a relajarme y a no hacer nada. Me sentaba en el columpio o me ponía bajo un árbol, simplemente para no hacer nada.
Yo: Pues me parece un plan genial, puede que algún día te lo copie -sonrío- si algún día desaparezco ya sabes dónde estoy
Luke: sígueme -dice al cabo de unos minutos- Quiero enseñarte otra parte del palacio
Luke camina y noto que acelera un poco el paso, antes íbamos paseando a ritmo normal y ahora va un poco más rápido cosa que hace que me cueste llevar este vestido. Los vestidos no me desagradan, me gustan, pero tener que ir por el jardín con un vestido se me hace incómodo, ¿Dónde quedaron los pantalones?
Entramos en palacio de nuevo y pasamos al lado de Matthew que intenta decirnos algo, pero Luke le corta diciéndole que ahora no es momento. Subimos al piso de arriba y nos paramos en nuestro pasillo.
Luke: Ven conmigo -me tiende la mano y yo se la cojo
Coge mi mano y tira de mí hasta la puerta de su habitación.
Luke: Tengo una cosa para ti -me dice cuando ya hemos entrado.
Luke suelta mi mano y va hacia un rincón para coger algo. Yo mientras tanto me detengo observando su habitación. Es ordenado. Muy ordenado. Esta todo colocado perfectamente donde debería estar, hasta el escritorio tiene perfectamente colocados todos lo papeles que almacena en él.
Es muy parecida a mi habitación, la única diferencia es que el tiene algunas fotos repartidas por ahí.
Luke: Feliz cumpleaños -me tiende una caja- espero que te guste
Yo: No tenías que comprarme nada -extiendo mis manos y cojo la caja
Luke: Claro que tenía que comprarte algo. Fue tu cumpleaños y al fin y al cabo estamos prometidos ¿no? -me sigue sonando raro- Me dijeron que te comprara alguna joya y te la diese el día que llegaras, pero sinceramente me parece la cosa mas fría del mundo. Prefería conocerte un poco y regalarte algo que realmente pudiera gustarte.
Yo: Me estas intrigando demasiado -digo sin poder quitar la sonrisa
Luke: Venga, ábrelo.
Levanto la tapa y hay una cámara. Una cámara antigua, de carrete en las que las fotos son instantáneas. Le comenté ayer en uno de nuestros paseos que llevaba buscando una cámara antigua muchísimo tiempo, pero que siempre se me iban de precio o estaban muy estropeadas para comprarlas.
Yo: ¡Me encanta! -Sonrío de oreja a oreja- pero espera, esto -hago una pausa- cuesta mucho dinero, lo sé perfectamente -le miro
Luke: Es un regalo
Yo: Pero Luke enserio -me corta
Luke: Soy el príncipe, algo de bueno tendrá ¿no? -sonrío
Yo: Muchísimas gracias Luke -me acerco a él y le doy un abrazo
Matthew: Alteza -dice abriendo la puerta, haciendo que nuestro abrazo termine- Perdón no quería interrumpirles -da un paso atrás mientras cierra la puerta
Luke: Matthew no se vaya, ¿Qué ocurre?
Matthew: Su padre le necesita antes de la cena, quiere de su presencia en su despacho. Con permiso -dice mientras sale de la sala
Luke: Me reclaman -dice con una leve sonrisa
Me indica con la mano para dejarme salir antes que él, y una vez estamos en el pasillo
Yo: Gracias Luke, enserio me encanta -sonrío
Luke: Me alegro de que te guste -me devuelve la sonrisa
Decido que este rato es el momento idóneo para hablar con mis padres. Ayer tan solo pude hablar con Mike por la noche, y esta mañana he tenido un rato después de desayunar en el que me he estado escribiendo con Lucy.
Les cuento como me va en el palacio, como son los reyes que según mi parecer les interesa bastante, les cuento sobre como son los jardines y sobre el precioso jardín secreto, y por supuesto les cuento sobre mi nueva adquisición.
Se que tengo que bajar a cenar cuando aparece Sophie en la habitación para avisarme. Me retoca el pelo, que he descubierto que lo hace cada vez que aparece por la habitación. ¿Me despeino el pelo sin darme cuenta?
Las cenas con los reyes son bastante normales a lo que me esperaba. Es como una cena normal en mi casa. Solo que, en vez de hablar de la propia familia, ellos prefieren hablar de "trabajo", por decirlo de alguna manera.
He notado que la reina intenta explicarme las cosas cuando ve que no entiendo de lo que hablan, o que intenta integrarme en la conversación para que no me sienta excluida. De alguna manera ella se sentirá identificada conmigo, ella sabe como me siento, porque ella tuvo que pasar por lo mismo que estoy pasando yo ahora. Pero esta vez me sorprende su pregunta. Para mal.
Reina: ¿Habéis pensado cuándo vais a hablar con la prensa? -la pregunta me descoloca y directamente miro hacia mi derecha buscando la mirada de Luke
Rey: Cierto, el otro día llamaron a mi despacho para saber cuándo íbamos a vender la exclusiva de la boda. Todos esperan saber quien va a ser la futura reina -vale esto me está agobiando
Luke: Todavía no lo hemos hablado
Rey: Opino que deberíais hacerlo pronto, la boda está al caer -esta conversación me está abrumando
Reina: Cierto, tan solo quedan cinco semanas para el gran día -me voy a casar en cinco semanas
Luke: Lo decidiremos pronto -dice con una sonrisa- os informaré cuando lo decidamos
Reina: ¿Mañana tienes la reunión con Sebastián? -le pregunta a su marido
Yo: Gracias -le susurro a Luke
Luke: Tranquila -me sonríe
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A tu lado
RomanceLa decisión ya esta tomada. Ella no puede negarse. Él debe seguir las órdenes.